Parque Industrial de Trelew: se perdieron otros 132 empleos y sólo quedan 851 trabajadores

Se trata de las fuentes laborales directas. Entre las dificultades figuran los altos costos, aumentos de servicios, falta de mercado y la poca calificación.

15 FEB 2020 - 18:59 | Actualizado

La crisis del Parque Industrial de Trelew no es algo nuevo, ni tampoco la situación delicada que atraviesan varias de las empresas que están radicadas, sobre todo aquellas del rubro textil sintético. Tal vez si sorprenda el número de trabajadores que queda dentro del polo productivo, que supo ser uno de los motores durante décadas.

Durante el último año se perdieron otras 132 fuentes laborales. Y el número de empleos directos hoy se reduce a tan sólo 851. Después están aquellas actividades tercerizadas que están fuera del Parque y que suman otros tantos empleos. Es lo que se denomina empleo indirecto.

Esta merma representa una caída del 13,2%. Y es la variación entre agosto de 2018 y agosto 2019 (cuando había 983 empleos), es decir a lo largo de 12 meses.

Los datos son oficiales. Son parte del informe elaborado por técnicos de la Agencia de Desarrollo Productivo de Trelew y que fue presentado a modo de diagnóstico a las autoridades nacionales días atrás.

Entre las dificultades que presentan las firmas, figura el acceso a las materias primas, los incrementos en los costos, el aumento en los servicios, las cargas impositivas y como factor determinante el achicamiento del mercado interno. Y también se plantea como una traba la poca calificación a la hora de incorporar personal.

Dentro de las desvinculaciones no se incluyen aquellos trabajadores que, ante la emergencia en las empresas, y la firme posibilidad de cierre definitivo de algunas de ellas, se han conformado en distintos grupos asociativos de trabajo (fábricas recuperadas, cooperativas), lo cual fácilmente podría engrosar este número, ya que en la actualidad se mantienen sub ocupados.

Sector por sector

Uno de los sectores más afectados por la disminución de trabajo es el textil. De acuerdo al documento, “la problemática es una constante en los últimos años, dado que este sector se ha visto perjudicado directamente por el aumento de los insumos y de las materias primas a causa de la variación del dólar. También el elevado costo de los servicios públicos, genera un incremento y encarecimiento en los procesos de producción, lo que determina dificultades a la hora de competir con otros mercados, convirtiendo a la oferta local en poco atractiva”.

“Una consecuencia que podemos mencionar como identificada con este sector productivo, es la dificultad de los trabajadores despedidos para reinsertarse laboralmente. Esto debido que los mismos son mayormente adultos, lo cual es un punto en contra a la hora de buscar un nuevo empleo, sumado a la escasa oferta laboral actual”.

Se detalla que “otro factor relevante es el cobro de las indemnizaciones por despidos. No en todos los casos se recibe en tiempo y forma. Y aquellos que la han percibido, mayormente lo han hecho en cuotas o de manera parcial. Si bien se puede tomar como una solución momentánea, no es lo adecuado”.

Del rubro textil, se contactaron un total de 17 empresas, 8 de ellas pertenecientes al sector sintético, 9 son peinadurías. Las pertenecientes al sector textil sintético, representan el área donde más se evidencia la disminución de puestos de trabajo. En relación a igual período del año 2018, la pérdida de puestos de trabajo representa alrededor del 15%. Sólo quedan 624 empleados textiles.

En cuanto a las peinadurías, la variación en los puestos de trabajo se ha reflejado en una disminución del 13% aproximadamente. Si bien esto está relacionado directamente con el entorno de crisis económica y social, existen factores puntuales y determinantes dentro del sector. Los elevados costos impositivos y de los servicios públicos, las restricciones o especulaciones de parte de los proveedores, las trabas a las exportaciones, la dificultad para acceder a materia prima de buena calidad y los mercados alternativos a los cuales tienen acceso los potenciales clientes, representan las causas que determinan el estado actual de las peinadurías.

“En algunos casos, los trabajadores optan por iniciar emprendimientos de autogestión para paliar la situación de crisis, pero al no percibir su indemnización de manera total, esto se dificulta”.

La principal causa de los despidos es la caída de la actividad productiva. Y los factores que determinan esta situación son los costos elevados de materias primas e insumos, servicios públicos muy caros, deudas y cargas impositivas, imposibilidad de competir con otros mercados.

Dentro del rubro metalmecánico el empleo cayó 11% en el último año. Actualmente la actividad de estas empresas está determinada en su gran mayoría por obras civiles. En el caso de las que fabrican aberturas de aluminio, puntualmente lo hacen a pedido, y en menor medida cuentan con un stock de producción destinado a la venta. Esta situación se da sobre todo por la disminución de obras públicas, mayormente debido a la suspensión de contratos por la falta de pago.

Las empresas pertenecientes a la actividad de la construcción que se han relevado son 10, que se dedican a distintas actividades, (hormigón elaborado, fábrica de cerámicas, constructoras, carpintería, fábrica de premoldeados, insumos para la constricción) y presentan como dificultad más notoria la baja en la oferta tanto de obras públicas, como civiles. La pérdida de puestos de trabajo se ha manifestado mayoritariamente en este sector, dado que en relación con el mismo período del año anterior, la baja representa un 22%.

Las empresas de transporte que se relevaron fueron 4. Este rubro es uno de los que mayores consecuencias sufren de cara a la crisis. La poca actividad económica, el aumento constante de combustibles, lubricantes y repuestos, sumado al alto costo de mantenimiento de las infraestructuras (depósitos, oficinas, talleres), representan “un panorama complicado para las mismas”. La disminución ha sido por debajo del 5%.

Dentro del segmento de servicios diversos, se relevaron 6 empresas. Los servicios prestados son: recolección de residuos, tratamiento de residuos patológicos, reciclado, clasificación de residuos, entre otros. La disminución del empleo ha sido aproximadamente del 8%.

Nivel de funcionamiento

Del total de empresas relevadas (45), 34 (75,56%) de ellas se encuentran totalmente activas, y solo 11 empresas (24,44%) están desarrollando su actividad de manera moderada o semi activa. Solo dos de ellas cuentan con algún tipo de asistencia por parte del Estado Provincial o Municipal, planes de contingencia ante situaciones puntuales, como por ejemplo asistencia ante posibilidad de despidos, inserción laboral ante la falta de personal calificado, asistencia económica para paliar la crisis.

Entre las dificultades que presentan las empresas se enumera en el diagnóstico del Municipio “los altos costos de producción, debido a la variación del precio del dólar, lo que incrementa notablemente el costo de los insumos. También el aumento de las cargas impositivas, tarifas de servicios públicos en constante aumento, combustibles, fletes”.

Los incrementos de costos traen aparejado un difícil acceso a las materias primas de calidad, lo que obliga a las empresas, en algunos casos, a optar por insumos de menor calidad, lo que impacta negativamente en el producto final. A contrapartida de lo mencionado anteriormente, la mano de obra calificada es una “materia pendiente del sector”, ya que representa una complicación al momento de incorporar recursos humanos. En menor medida, la infraestructura inadecuada o maquinarias obsoletas representan también una dificultad existente.

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15 FEB 2020 - 18:59

La crisis del Parque Industrial de Trelew no es algo nuevo, ni tampoco la situación delicada que atraviesan varias de las empresas que están radicadas, sobre todo aquellas del rubro textil sintético. Tal vez si sorprenda el número de trabajadores que queda dentro del polo productivo, que supo ser uno de los motores durante décadas.

Durante el último año se perdieron otras 132 fuentes laborales. Y el número de empleos directos hoy se reduce a tan sólo 851. Después están aquellas actividades tercerizadas que están fuera del Parque y que suman otros tantos empleos. Es lo que se denomina empleo indirecto.

Esta merma representa una caída del 13,2%. Y es la variación entre agosto de 2018 y agosto 2019 (cuando había 983 empleos), es decir a lo largo de 12 meses.

Los datos son oficiales. Son parte del informe elaborado por técnicos de la Agencia de Desarrollo Productivo de Trelew y que fue presentado a modo de diagnóstico a las autoridades nacionales días atrás.

Entre las dificultades que presentan las firmas, figura el acceso a las materias primas, los incrementos en los costos, el aumento en los servicios, las cargas impositivas y como factor determinante el achicamiento del mercado interno. Y también se plantea como una traba la poca calificación a la hora de incorporar personal.

Dentro de las desvinculaciones no se incluyen aquellos trabajadores que, ante la emergencia en las empresas, y la firme posibilidad de cierre definitivo de algunas de ellas, se han conformado en distintos grupos asociativos de trabajo (fábricas recuperadas, cooperativas), lo cual fácilmente podría engrosar este número, ya que en la actualidad se mantienen sub ocupados.

Sector por sector

Uno de los sectores más afectados por la disminución de trabajo es el textil. De acuerdo al documento, “la problemática es una constante en los últimos años, dado que este sector se ha visto perjudicado directamente por el aumento de los insumos y de las materias primas a causa de la variación del dólar. También el elevado costo de los servicios públicos, genera un incremento y encarecimiento en los procesos de producción, lo que determina dificultades a la hora de competir con otros mercados, convirtiendo a la oferta local en poco atractiva”.

“Una consecuencia que podemos mencionar como identificada con este sector productivo, es la dificultad de los trabajadores despedidos para reinsertarse laboralmente. Esto debido que los mismos son mayormente adultos, lo cual es un punto en contra a la hora de buscar un nuevo empleo, sumado a la escasa oferta laboral actual”.

Se detalla que “otro factor relevante es el cobro de las indemnizaciones por despidos. No en todos los casos se recibe en tiempo y forma. Y aquellos que la han percibido, mayormente lo han hecho en cuotas o de manera parcial. Si bien se puede tomar como una solución momentánea, no es lo adecuado”.

Del rubro textil, se contactaron un total de 17 empresas, 8 de ellas pertenecientes al sector sintético, 9 son peinadurías. Las pertenecientes al sector textil sintético, representan el área donde más se evidencia la disminución de puestos de trabajo. En relación a igual período del año 2018, la pérdida de puestos de trabajo representa alrededor del 15%. Sólo quedan 624 empleados textiles.

En cuanto a las peinadurías, la variación en los puestos de trabajo se ha reflejado en una disminución del 13% aproximadamente. Si bien esto está relacionado directamente con el entorno de crisis económica y social, existen factores puntuales y determinantes dentro del sector. Los elevados costos impositivos y de los servicios públicos, las restricciones o especulaciones de parte de los proveedores, las trabas a las exportaciones, la dificultad para acceder a materia prima de buena calidad y los mercados alternativos a los cuales tienen acceso los potenciales clientes, representan las causas que determinan el estado actual de las peinadurías.

“En algunos casos, los trabajadores optan por iniciar emprendimientos de autogestión para paliar la situación de crisis, pero al no percibir su indemnización de manera total, esto se dificulta”.

La principal causa de los despidos es la caída de la actividad productiva. Y los factores que determinan esta situación son los costos elevados de materias primas e insumos, servicios públicos muy caros, deudas y cargas impositivas, imposibilidad de competir con otros mercados.

Dentro del rubro metalmecánico el empleo cayó 11% en el último año. Actualmente la actividad de estas empresas está determinada en su gran mayoría por obras civiles. En el caso de las que fabrican aberturas de aluminio, puntualmente lo hacen a pedido, y en menor medida cuentan con un stock de producción destinado a la venta. Esta situación se da sobre todo por la disminución de obras públicas, mayormente debido a la suspensión de contratos por la falta de pago.

Las empresas pertenecientes a la actividad de la construcción que se han relevado son 10, que se dedican a distintas actividades, (hormigón elaborado, fábrica de cerámicas, constructoras, carpintería, fábrica de premoldeados, insumos para la constricción) y presentan como dificultad más notoria la baja en la oferta tanto de obras públicas, como civiles. La pérdida de puestos de trabajo se ha manifestado mayoritariamente en este sector, dado que en relación con el mismo período del año anterior, la baja representa un 22%.

Las empresas de transporte que se relevaron fueron 4. Este rubro es uno de los que mayores consecuencias sufren de cara a la crisis. La poca actividad económica, el aumento constante de combustibles, lubricantes y repuestos, sumado al alto costo de mantenimiento de las infraestructuras (depósitos, oficinas, talleres), representan “un panorama complicado para las mismas”. La disminución ha sido por debajo del 5%.

Dentro del segmento de servicios diversos, se relevaron 6 empresas. Los servicios prestados son: recolección de residuos, tratamiento de residuos patológicos, reciclado, clasificación de residuos, entre otros. La disminución del empleo ha sido aproximadamente del 8%.

Nivel de funcionamiento

Del total de empresas relevadas (45), 34 (75,56%) de ellas se encuentran totalmente activas, y solo 11 empresas (24,44%) están desarrollando su actividad de manera moderada o semi activa. Solo dos de ellas cuentan con algún tipo de asistencia por parte del Estado Provincial o Municipal, planes de contingencia ante situaciones puntuales, como por ejemplo asistencia ante posibilidad de despidos, inserción laboral ante la falta de personal calificado, asistencia económica para paliar la crisis.

Entre las dificultades que presentan las empresas se enumera en el diagnóstico del Municipio “los altos costos de producción, debido a la variación del precio del dólar, lo que incrementa notablemente el costo de los insumos. También el aumento de las cargas impositivas, tarifas de servicios públicos en constante aumento, combustibles, fletes”.

Los incrementos de costos traen aparejado un difícil acceso a las materias primas de calidad, lo que obliga a las empresas, en algunos casos, a optar por insumos de menor calidad, lo que impacta negativamente en el producto final. A contrapartida de lo mencionado anteriormente, la mano de obra calificada es una “materia pendiente del sector”, ya que representa una complicación al momento de incorporar recursos humanos. En menor medida, la infraestructura inadecuada o maquinarias obsoletas representan también una dificultad existente.


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