Así lo informaron hoy especialistas de esa casa de estudios y señalaron que los huevos fueron rescatados en un área protegida de la universidad por ser considerado un “sitio único” en el mundo por la riqueza paleontológica que contiene.
El paleontólogo Juan Porfiri, informó a Télam que decidieron "realizar un monitoreo de un sector del campus de la universidad dónde se van a ejecutar nuevas construcciones en un yacimiento de fósiles muy rico donde hemos encontrados serpientes y cocodrilos y donde creemos que hay mucho más por rescatar”.
“Nosotros propusimos antes de que comenzaran las obras, al haber riesgo paleontológico, hacer el monitoreo en ese sector donde años anteriores habíamos trabajado y encontrado fósiles”, indicó.
También explicó que “cuando limpiaron el lugar se encontraron con un área de nidificación que tiene muchos huevos de los cuales hemos rescatado hasta el momento 73 y siguen apareciendo”.
Porfiri precisó que lo que hallaron "es un sitio de nidificación que tiene 12 metros de largo por 5 de ancho”.
Sobre la base de antecedentes de este tipo de huevos que se han estudiado, el científico explicó que los hallados en la universidad son de ave y con una antigüedad de 85 millones de años del período cretácico.
El paleontólogo especificó que “tienen aproximadamente 5 centímetros de punta a punta en forma elíptica, con una cáscara sumamente lisa a diferencia de otros huevos de dinosaurios que han aparecido en la ciudad de Neuquén que son rugosos, redondos y de mayor tamaño”.
La formación geológica del hallazgo se denomina “Bajo de la Carpa” y “hace 85 millones de años era un lugar con dunas y pequeñas lagunas con un clima semiárido”, detalló Porfiri.
En las próximas semanas continuarán las tareas de rescate, aunque muchos de los materiales encontrados están en el sitio y otros se han colectado y ya fueron incorporados a la colección del Museo.
Porfiri destacó que “hay varios estudios hechos sobre estos huevos de aves, pero siempre hay nuevos aportes a través de estudios tafonómicos que se están haciendo para conocer bien por qué están depositados, qué forma de depositación tienen y, a su vez, avanzar en algún otro tipo de investigaciones”.
“El yacimiento paleontológico de todo el campus universitario es sumamente importante porque siempre aparecen materiales fósiles, incluso muchos de los que han aparecido son nuevas especies de cocodrilos, reptiles, aves y que han sido los primeros grupos de nuevas familias de dinosaurios que se han encontrado en el mundo”, explicó.
Puso como ejemplo fósiles hallados de cocodrilos “Notosuquios”, o los “Alvarezsauros”, una familia de dinosaurios que aparecen en el campus de la universidad por primera vez y después empiezan a aparecer parientes de estos en Mongolia, en Canadá y en otras partes del mundo”.
“El campus de la universidad es conocido mundialmente y justamente por la riqueza paleontológica que tiene, lo transforma en algo único, y por eso es tan importante seguir poniendo en valor todo esto”.
“Quienes trabajan en paleontología de cualquier lugar del mundo, conocen a la universidad por su riqueza”, dijo.
Del proyecto de investigación participan estudiantes de la carrera de Geología de la UNCo que han formado parte de otras iniciativas con el Museo de Ciencias Naturales y la Secretaría de Políticas Universitarias.
“Son voluntariados universitarios con especialización en paleontología y hoy se ven ante esta oportunidad de trabajar en este proyecto”, comentó Porfiri.
El equipo de trabajo lo coordinan los paleontólogos Juan Porfiri y Domenica dos Santos y lo integran los estudiantes avanzados de geología de la universidad, Darío López, Macarena Martínez, Martín Gasparini y Santiago Sánchez.
Así lo informaron hoy especialistas de esa casa de estudios y señalaron que los huevos fueron rescatados en un área protegida de la universidad por ser considerado un “sitio único” en el mundo por la riqueza paleontológica que contiene.
El paleontólogo Juan Porfiri, informó a Télam que decidieron "realizar un monitoreo de un sector del campus de la universidad dónde se van a ejecutar nuevas construcciones en un yacimiento de fósiles muy rico donde hemos encontrados serpientes y cocodrilos y donde creemos que hay mucho más por rescatar”.
“Nosotros propusimos antes de que comenzaran las obras, al haber riesgo paleontológico, hacer el monitoreo en ese sector donde años anteriores habíamos trabajado y encontrado fósiles”, indicó.
También explicó que “cuando limpiaron el lugar se encontraron con un área de nidificación que tiene muchos huevos de los cuales hemos rescatado hasta el momento 73 y siguen apareciendo”.
Porfiri precisó que lo que hallaron "es un sitio de nidificación que tiene 12 metros de largo por 5 de ancho”.
Sobre la base de antecedentes de este tipo de huevos que se han estudiado, el científico explicó que los hallados en la universidad son de ave y con una antigüedad de 85 millones de años del período cretácico.
El paleontólogo especificó que “tienen aproximadamente 5 centímetros de punta a punta en forma elíptica, con una cáscara sumamente lisa a diferencia de otros huevos de dinosaurios que han aparecido en la ciudad de Neuquén que son rugosos, redondos y de mayor tamaño”.
La formación geológica del hallazgo se denomina “Bajo de la Carpa” y “hace 85 millones de años era un lugar con dunas y pequeñas lagunas con un clima semiárido”, detalló Porfiri.
En las próximas semanas continuarán las tareas de rescate, aunque muchos de los materiales encontrados están en el sitio y otros se han colectado y ya fueron incorporados a la colección del Museo.
Porfiri destacó que “hay varios estudios hechos sobre estos huevos de aves, pero siempre hay nuevos aportes a través de estudios tafonómicos que se están haciendo para conocer bien por qué están depositados, qué forma de depositación tienen y, a su vez, avanzar en algún otro tipo de investigaciones”.
“El yacimiento paleontológico de todo el campus universitario es sumamente importante porque siempre aparecen materiales fósiles, incluso muchos de los que han aparecido son nuevas especies de cocodrilos, reptiles, aves y que han sido los primeros grupos de nuevas familias de dinosaurios que se han encontrado en el mundo”, explicó.
Puso como ejemplo fósiles hallados de cocodrilos “Notosuquios”, o los “Alvarezsauros”, una familia de dinosaurios que aparecen en el campus de la universidad por primera vez y después empiezan a aparecer parientes de estos en Mongolia, en Canadá y en otras partes del mundo”.
“El campus de la universidad es conocido mundialmente y justamente por la riqueza paleontológica que tiene, lo transforma en algo único, y por eso es tan importante seguir poniendo en valor todo esto”.
“Quienes trabajan en paleontología de cualquier lugar del mundo, conocen a la universidad por su riqueza”, dijo.
Del proyecto de investigación participan estudiantes de la carrera de Geología de la UNCo que han formado parte de otras iniciativas con el Museo de Ciencias Naturales y la Secretaría de Políticas Universitarias.
“Son voluntariados universitarios con especialización en paleontología y hoy se ven ante esta oportunidad de trabajar en este proyecto”, comentó Porfiri.
El equipo de trabajo lo coordinan los paleontólogos Juan Porfiri y Domenica dos Santos y lo integran los estudiantes avanzados de geología de la universidad, Darío López, Macarena Martínez, Martín Gasparini y Santiago Sánchez.