La tradicional celebración, que ya lleva desarrollándose hace de una década, se realizo ayer por la tarde-noche en las pistas del cerro y su organización estuvo a cargo de la empresa Laderas y el Club Andino Piltriquitron (CAP).
Visitantes y pobladores ingresaron al cerro de forma gratuita hasta la cota de 1400 metros para contemplar esta experiencia única.
En la terraza de la confitería A-Gusto, hubo chocolate y vino caliente, además de la presencia de un DJ que musicalizó la previa.
También estuvieron abiertos La Base Café y el Refugio, brindando sus ofertas gastronómicas, ambos ubicados en la cota de 900m, a pocos metros del estacionamiento.
“La actividad fue protagonizada por más de 200 personas, en una noche estrelladas y con viento en calma como pocas” expresaron desde la organización.
“De la bajada de las antorchas participaron todos los instructores de ski y snowboard de la Escuela de Laderas, además de los profesores y alumnos del CAP, junto con varios visitantes que se animaron a participar de esta experiencia única” detallaron desde la empresa concesionaria del cerro patagónico.
La tradicional celebración, que ya lleva desarrollándose hace de una década, se realizo ayer por la tarde-noche en las pistas del cerro y su organización estuvo a cargo de la empresa Laderas y el Club Andino Piltriquitron (CAP).
Visitantes y pobladores ingresaron al cerro de forma gratuita hasta la cota de 1400 metros para contemplar esta experiencia única.
En la terraza de la confitería A-Gusto, hubo chocolate y vino caliente, además de la presencia de un DJ que musicalizó la previa.
También estuvieron abiertos La Base Café y el Refugio, brindando sus ofertas gastronómicas, ambos ubicados en la cota de 900m, a pocos metros del estacionamiento.
“La actividad fue protagonizada por más de 200 personas, en una noche estrelladas y con viento en calma como pocas” expresaron desde la organización.
“De la bajada de las antorchas participaron todos los instructores de ski y snowboard de la Escuela de Laderas, además de los profesores y alumnos del CAP, junto con varios visitantes que se animaron a participar de esta experiencia única” detallaron desde la empresa concesionaria del cerro patagónico.