En el marco de una intensa investigación que se desarrolla hace varios meses, el Ministerio Público Fiscal encabezado por la fiscal general Julieta Gamarra en conjunto con la División Policial de Investigaciones, allanó varios domicilios de Trelew por diversos robos agravados cometidos recientemente.
Las diligencias comenzaron alrededor de las cuatro de la madrugada de este martes, y se extendieron durante la mañana. En ellas, la DPI (cuyos titulares son el comisario jefe Franco Soto, y segundo jefe Edgardo Julián) detectó principalmente por escuchas de intervenciones telefónicas el accionar de una organización criminal.
Según lo detallado, esta banda de entre seis y ocho personas irrumpía en propiedades previamente vigiladas. El ingreso era violento, con caras cubiertas y portando armas, y por lo general tenían el mismo tipo de víctima (mujeres adultas) a quienes maniataban y golpeaban. Los criminales contaban además con equipos de comunicación con los que se mantenían en contacto entre quienes entraban a las viviendas y aquellos que se quedaban afuera para vigilar.
En particular se investigaron tres hechos de robos agravados ocurridos el 18 de julio, el primero de agosto y el 13 del mismo mes, aunque las sospechas de quienes habrían intervenido comenzaron con sucesos ocurridos en el mes de mayo.
La fiscal Julieta Gamarra destacó el poder de organización previa de los involucrados. Durante los allanamientos, que fueron autorizados por el Juez Marcelo Nieto Di Biasse, se logró la detención de tres personas y el hallazgo de numerosos elementos denunciados como sustraídos. Se habrían fugado dos personas más, que podrían entregarse en las próximas horas.
En el marco de una intensa investigación que se desarrolla hace varios meses, el Ministerio Público Fiscal encabezado por la fiscal general Julieta Gamarra en conjunto con la División Policial de Investigaciones, allanó varios domicilios de Trelew por diversos robos agravados cometidos recientemente.
Las diligencias comenzaron alrededor de las cuatro de la madrugada de este martes, y se extendieron durante la mañana. En ellas, la DPI (cuyos titulares son el comisario jefe Franco Soto, y segundo jefe Edgardo Julián) detectó principalmente por escuchas de intervenciones telefónicas el accionar de una organización criminal.
Según lo detallado, esta banda de entre seis y ocho personas irrumpía en propiedades previamente vigiladas. El ingreso era violento, con caras cubiertas y portando armas, y por lo general tenían el mismo tipo de víctima (mujeres adultas) a quienes maniataban y golpeaban. Los criminales contaban además con equipos de comunicación con los que se mantenían en contacto entre quienes entraban a las viviendas y aquellos que se quedaban afuera para vigilar.
En particular se investigaron tres hechos de robos agravados ocurridos el 18 de julio, el primero de agosto y el 13 del mismo mes, aunque las sospechas de quienes habrían intervenido comenzaron con sucesos ocurridos en el mes de mayo.
La fiscal Julieta Gamarra destacó el poder de organización previa de los involucrados. Durante los allanamientos, que fueron autorizados por el Juez Marcelo Nieto Di Biasse, se logró la detención de tres personas y el hallazgo de numerosos elementos denunciados como sustraídos. Se habrían fugado dos personas más, que podrían entregarse en las próximas horas.