Pablo Arabia vino desde atrás para romper la racha
El piloto trelewense quebró un prolongado maleficio en el “Mar y Valle” y se adjudicó la mejor final del Gran Premio “Día del Trabajador”, la del Turismo Pista 1.100. El campeón Federico Turrez en la Renault 12 (por un recargo al vencedor en pista, Jonatan Montenegro), Sergio Larreguy en el TC Austral, Amílcar Oliver en el TC Patagónico y Sandro Abdala en la Gol 1.6 fueron los otros vencedores de la cuarta fecha del calendario provincial
“Vino, vino, vino, ¿quién vino?” rezaba el texto de una vieja publicidad radial relacionada a la emblemática marca que representa la distribuidora de la familia Arabia en Trelew. El apellido es por supuesto sinónimo de automovilismo, y de TP 1.100.
“Ver a tu viejo festejando y a tu vieja llorando en la llegada, no tiene precio. Nosotros corremos en una categoría zonal, no ganamos plata, al contrario. Pero además, nuestros éxitos son productos de mucha gente que le pone el lomo en el taller y de la que colabora por gusto”, resumió “Pablito” en el diálogo con el equipo Puesta a Punto por Cadena Tiempo, posterior a la victoria, al desahogo, de este domingo.
“Largamos 11, íbamos de trompa, de culo, no teníamos un auto para ganar, pero a veces tenés un auto para ganar y terminás con las manos vacías, la cuota de suerte siempre es necesaria”, admitió con honestidad brutal el vencedor de otra tremenda final de la categoría espectáculo.
Arabia se hizo de la punta a dos vueltas del final, después de un desarrollo de puro entrevero en la punta.
Arrancó el novel Martín Muñoz al frente del pelotón de 33 autos, pero en la segunda vuelta, Mariano Ayup ya era el nuevo líder de carrera, al mismo tiempo que Martín Jones iba a boxes por una pinchadura.
Ayup, Muñoz, el campeón Walter Jones, Facundo Villar y Jeremías Saldivia comandaban el nutrido pelotón de una decena de autos y aunque los cuatro primeros parecían desprendidos del resto, resultó un espejismo.
Saldivia empezó a escalar posiciones, primero cuarto, después tercero en la quinta vuelta, y segundo en el sexto giro. Pero su escalada terminó con un apercibimiento por un toque después de atrás en la 12º vuelta y la posterior exclusión con bandera negra por golpear a Mauro Larrachau, aunque el piloto hizo caso omiso y decidió terminar la carrera, incluso incidiendo en la lucha de las dos últimas vueltas.
La carrera tenía cambios permanentes y Arabia ya aparecía sexto en una visible remontada, mientras Jones retrocedía al cuarto puesto y Daniel Nogales ascendía al quinto.
Detrás, el madrynense Renzo Sastre, el dolavense Cristian Robles y Martín Jones ingresaban a boxes para abandonar.
En otro golpe de escena, Nogales había superado de un viaje a Saldivia y Muñoz y se posicionaba segundo en la décima vuelta, mientras Arabia daba cuenta de Walter Jones.
Ayup intentaba soportar el asedio de todo el malón que tenía detrás, pero el auto sintió el desgaste y perdió rendimiento justo en el momento definitorio.
Muñoz, el mejor de la clasificación y ganador de la serie más rápida el sábado, recuperaba el tercer puesto, y Arabia llegaba al cuarto, justo cuando apercibían a Saldivia. En el opuesto de esa 12º vuelta, Nogales se retrasó y Arabia quedó tercero y en el giro siguiente segundo. Detrás asomaba también Daniel Galleguillo.
Pero la final no daba respiro y en la penúltima vuelta Arabia tomó el comando de carrera, un recuperado Villar consiguió el segundo lugar y Muñoz se mezcló tercero en una puja enardecida con Galleguillo y Jones. Y después de tantas incidencias y tres líderes (Muñoz, Ayup y Arabia), en los últimos 2.747 metros nada cambió.
A PAPA SANDRO…
La Gol, con 27 autos en la grilla, también tuvo un comienzo vibrante: SantiagoPaincho largó mejor que Emanuel Abdala, pero el subcampeón se recuperó rápido y en el opuesto volvió al liderazgo.
Ezequiel Bórquez se había quedado “varado” en la curva 1 y obligó el ingreso del pace car en la segunda vuelta de competencia, aunque a los protagonistas les costaba desacelerar, pese a la bandera tricolor.
Ema Abdala, Paincho, Sandro Abdala, el campeón Christian Abdala y Alberto Pinto Victorino integraban el pelotón de punta.
Paincho volvió a madrugar a Ema en la recta principal, pero el ex piloto del Turismo Nacional retomaba la punta en el sector trabado.
Martín Ebene, el más rápido de la clasificación, recibía un golpe desde atrás en el Tobogán y se veía obligado a abandonar en la quinta vuelta.
Al giro siguiente, Sandro Abdala aprovechó los problemas en la caja de cambios en el auto de Emanuel y se hizo de la punta, la que conservaría hasta alcanzar la bandera a cuadros, todavía con 10 vueltas por delante.
Cristian Abdala sorprendía a Paincho y completaba el trio familiar, pero en el séptimo giro su motor explotó y regó de aceite la pista contra la barda.
En los giros siguientes se despedían de la carrera Álvarez, Flavio Carugo, Daniel Jones y Fabián López.
Ya era visible el ascenso de Pablo Pires, que había ganado la tercera fecha en Comodoro, y de Renzo Blotta, en el quinto y sexto lugar.
Pero la final tenía más emociones para ofrecer, o mejor dicho más frustraciones, porque en la 13º vuelta el motor de Paincho dijo basta, lo mismo que la caja de cambios de Emanuel Abdala.
Pinto Victorino quedaba segundo, Pires tercero y Blotta cuarto, pero podía haber más, y a dos vueltas del final, Pires también rompió el motor y dejó una sola humareda en el aire.
Así Sandro Abdala llegó en absoluta soledad a la bandera a cuadros, Pinto Vitorino logró un segundo puesto más que deseado y Blotta, tercero, siguió con la racha positiva que lo ratificabacomo un gran candidato al título.
Sin embargo, en la revisión técnica fueron excluidos Pinto Vitorino, Blotta y Daniel "Chino" Miranda y por lo tanto, Juan Corchuelo saltó al segundo lugar y Carlos De Rossi -muy contrariado por el rendimiento de su auto- al tercero, además de los cambios en las posiciones posteriores.
EL ÚNICO CAMPEÓN VENCEDOR
Amilcar Oliver llegó contrariado el viernes al circuito, con algunos cambios en el chasis que no habían sido de su agrado. Sin embargo, lo disimuló el sábado y este domingo, sobre todo en una final, que ganó de punta a punta en el TC Patagónico, donde 13 autos comenzaron la final de 16 vueltas.
Mientras “Paco” Rodríguez y “Tomasito” Oliver se enredaban en el fondo, “Julín” Bona sorprendía a Emiliano López en la segunda vuelta y lo desplazaba de la posición de escolta. Marcos Laudonio se ilusionaba con ser tercero, pero debió ingresar a boxes con problema en el carburador y su posterior regreso a pista sólo duró una vuelta.
Antes de mitad de carrera, el despiste de Daniel Sosa en la primera curva obligó al ingreso del auto de seguridad.
Tras la reanudación de la prueba con seis vueltas por cumplir, Adolfo Cattaneo logró superar a Emiliano López para subirse al podio, mientras
Bona achicaba diferencias con Oliver, aunque se quedó sin tiempo y vueltas para ir por el triunfo.
“Gasté mucho el auto en las primeras vueltas porque López me frenaba. Aunque soy subcampeón, vivimos aprendiendo, estamos cerca, en cualquier momento ganamos”, se ilusionó el madrynense, que había logrado el mejor tiempo clasificatorio.
MONÓLOGO DE LARREGUY
En el TC Austral, el subcampeón Sergio Larreguy también ganó de principio a fin, pero el desenlace de la carrera hubiera sido muy distinto si Miguel Otero no hubiera roto el tren delantero en la penúltima vuelta, cuando estaba cerca de superar a Marcelo Pérez para ser segundo y lograba limar cerca de un segundo vuelta respecto del líder de la carrera, que además volvió a la cima del campeonato.
La final empezó con sólo 10 autos y terminó con la mitad por los abandonos de “Lucho” Méndez, Pablo Soetbeer, Fernando Vázquez, Miguel Panquilto y Otero.
Javier Figueroa había completado el podio en carrera, pero en una rigurosa revisión técnica fue excluido y su lugar fue finalmente ocupado por Javier Hernández.
TURREZ GANADOR POR UN RECARGO A MONTENEGRO
La final de la Renault fue la primera gran entrega de una jornada emocionante. El campeón Federico Turrez largaba en punta la prueba de casi 44 kilómetros dividida también en 16 vueltas al dibujo de 2.747 metros. Sin embargo, en las primeras vueltas Lucas Nicolia y Sebastián Marsicano lograron llegar a la punta en una enardecida lucha de un pelotón de diez autos.
Abel Panquilto, el presidente de la categoría que llegaba como líder del campeonato a Trelew, debía abandonar después había logrado llegar incluso al tercer lugar, lo mismo que Jesús Sugman, que en el frenesí de la lucha perdió el capot de su vehículo.
En el noveno giro, Gianfranco Mesiti, a la postre cuarto y contento por haber terminado con el "auto entero", logró la vuelta más rápida con 1:13.358.
El pelotón de punta se redujo a tres autos, los de Turrez, Montenegro y Nicolia, y en la última vuelta, en la salida del Tobogán, Montenegro y Nicolia “madrugaron” a Turrez, lo superaron y pese a que el campeón reaccionó, sólo recuperó el segundo lugar. Y Montenegro enfiló hacia la recta principal con su primer triunfo de la temporada en el bolsillo.
Sin embargo, el Comisariato Deportivo informó después que Montenegro fue recargado con la pérdida de un puesto por sobrepaso con bandera amarilla, y esa sanción le terminó costando la victoria al piloto comodorense. Pero además, el tercero, Lucas Nicolia fue excluido en la revisión técnica, y por lo tanto, Franco Mesiti ascendió al tercer puesto.
FINALES
Textos: Edgardo Lillo. Fotos: Norman Evans (Jornada Medios).
“Vino, vino, vino, ¿quién vino?” rezaba el texto de una vieja publicidad radial relacionada a la emblemática marca que representa la distribuidora de la familia Arabia en Trelew. El apellido es por supuesto sinónimo de automovilismo, y de TP 1.100.
“Ver a tu viejo festejando y a tu vieja llorando en la llegada, no tiene precio. Nosotros corremos en una categoría zonal, no ganamos plata, al contrario. Pero además, nuestros éxitos son productos de mucha gente que le pone el lomo en el taller y de la que colabora por gusto”, resumió “Pablito” en el diálogo con el equipo Puesta a Punto por Cadena Tiempo, posterior a la victoria, al desahogo, de este domingo.
“Largamos 11, íbamos de trompa, de culo, no teníamos un auto para ganar, pero a veces tenés un auto para ganar y terminás con las manos vacías, la cuota de suerte siempre es necesaria”, admitió con honestidad brutal el vencedor de otra tremenda final de la categoría espectáculo.
Arabia se hizo de la punta a dos vueltas del final, después de un desarrollo de puro entrevero en la punta.
Arrancó el novel Martín Muñoz al frente del pelotón de 33 autos, pero en la segunda vuelta, Mariano Ayup ya era el nuevo líder de carrera, al mismo tiempo que Martín Jones iba a boxes por una pinchadura.
Ayup, Muñoz, el campeón Walter Jones, Facundo Villar y Jeremías Saldivia comandaban el nutrido pelotón de una decena de autos y aunque los cuatro primeros parecían desprendidos del resto, resultó un espejismo.
Saldivia empezó a escalar posiciones, primero cuarto, después tercero en la quinta vuelta, y segundo en el sexto giro. Pero su escalada terminó con un apercibimiento por un toque después de atrás en la 12º vuelta y la posterior exclusión con bandera negra por golpear a Mauro Larrachau, aunque el piloto hizo caso omiso y decidió terminar la carrera, incluso incidiendo en la lucha de las dos últimas vueltas.
La carrera tenía cambios permanentes y Arabia ya aparecía sexto en una visible remontada, mientras Jones retrocedía al cuarto puesto y Daniel Nogales ascendía al quinto.
Detrás, el madrynense Renzo Sastre, el dolavense Cristian Robles y Martín Jones ingresaban a boxes para abandonar.
En otro golpe de escena, Nogales había superado de un viaje a Saldivia y Muñoz y se posicionaba segundo en la décima vuelta, mientras Arabia daba cuenta de Walter Jones.
Ayup intentaba soportar el asedio de todo el malón que tenía detrás, pero el auto sintió el desgaste y perdió rendimiento justo en el momento definitorio.
Muñoz, el mejor de la clasificación y ganador de la serie más rápida el sábado, recuperaba el tercer puesto, y Arabia llegaba al cuarto, justo cuando apercibían a Saldivia. En el opuesto de esa 12º vuelta, Nogales se retrasó y Arabia quedó tercero y en el giro siguiente segundo. Detrás asomaba también Daniel Galleguillo.
Pero la final no daba respiro y en la penúltima vuelta Arabia tomó el comando de carrera, un recuperado Villar consiguió el segundo lugar y Muñoz se mezcló tercero en una puja enardecida con Galleguillo y Jones. Y después de tantas incidencias y tres líderes (Muñoz, Ayup y Arabia), en los últimos 2.747 metros nada cambió.
A PAPA SANDRO…
La Gol, con 27 autos en la grilla, también tuvo un comienzo vibrante: SantiagoPaincho largó mejor que Emanuel Abdala, pero el subcampeón se recuperó rápido y en el opuesto volvió al liderazgo.
Ezequiel Bórquez se había quedado “varado” en la curva 1 y obligó el ingreso del pace car en la segunda vuelta de competencia, aunque a los protagonistas les costaba desacelerar, pese a la bandera tricolor.
Ema Abdala, Paincho, Sandro Abdala, el campeón Christian Abdala y Alberto Pinto Victorino integraban el pelotón de punta.
Paincho volvió a madrugar a Ema en la recta principal, pero el ex piloto del Turismo Nacional retomaba la punta en el sector trabado.
Martín Ebene, el más rápido de la clasificación, recibía un golpe desde atrás en el Tobogán y se veía obligado a abandonar en la quinta vuelta.
Al giro siguiente, Sandro Abdala aprovechó los problemas en la caja de cambios en el auto de Emanuel y se hizo de la punta, la que conservaría hasta alcanzar la bandera a cuadros, todavía con 10 vueltas por delante.
Cristian Abdala sorprendía a Paincho y completaba el trio familiar, pero en el séptimo giro su motor explotó y regó de aceite la pista contra la barda.
En los giros siguientes se despedían de la carrera Álvarez, Flavio Carugo, Daniel Jones y Fabián López.
Ya era visible el ascenso de Pablo Pires, que había ganado la tercera fecha en Comodoro, y de Renzo Blotta, en el quinto y sexto lugar.
Pero la final tenía más emociones para ofrecer, o mejor dicho más frustraciones, porque en la 13º vuelta el motor de Paincho dijo basta, lo mismo que la caja de cambios de Emanuel Abdala.
Pinto Victorino quedaba segundo, Pires tercero y Blotta cuarto, pero podía haber más, y a dos vueltas del final, Pires también rompió el motor y dejó una sola humareda en el aire.
Así Sandro Abdala llegó en absoluta soledad a la bandera a cuadros, Pinto Vitorino logró un segundo puesto más que deseado y Blotta, tercero, siguió con la racha positiva que lo ratificabacomo un gran candidato al título.
Sin embargo, en la revisión técnica fueron excluidos Pinto Vitorino, Blotta y Daniel "Chino" Miranda y por lo tanto, Juan Corchuelo saltó al segundo lugar y Carlos De Rossi -muy contrariado por el rendimiento de su auto- al tercero, además de los cambios en las posiciones posteriores.
EL ÚNICO CAMPEÓN VENCEDOR
Amilcar Oliver llegó contrariado el viernes al circuito, con algunos cambios en el chasis que no habían sido de su agrado. Sin embargo, lo disimuló el sábado y este domingo, sobre todo en una final, que ganó de punta a punta en el TC Patagónico, donde 13 autos comenzaron la final de 16 vueltas.
Mientras “Paco” Rodríguez y “Tomasito” Oliver se enredaban en el fondo, “Julín” Bona sorprendía a Emiliano López en la segunda vuelta y lo desplazaba de la posición de escolta. Marcos Laudonio se ilusionaba con ser tercero, pero debió ingresar a boxes con problema en el carburador y su posterior regreso a pista sólo duró una vuelta.
Antes de mitad de carrera, el despiste de Daniel Sosa en la primera curva obligó al ingreso del auto de seguridad.
Tras la reanudación de la prueba con seis vueltas por cumplir, Adolfo Cattaneo logró superar a Emiliano López para subirse al podio, mientras
Bona achicaba diferencias con Oliver, aunque se quedó sin tiempo y vueltas para ir por el triunfo.
“Gasté mucho el auto en las primeras vueltas porque López me frenaba. Aunque soy subcampeón, vivimos aprendiendo, estamos cerca, en cualquier momento ganamos”, se ilusionó el madrynense, que había logrado el mejor tiempo clasificatorio.
MONÓLOGO DE LARREGUY
En el TC Austral, el subcampeón Sergio Larreguy también ganó de principio a fin, pero el desenlace de la carrera hubiera sido muy distinto si Miguel Otero no hubiera roto el tren delantero en la penúltima vuelta, cuando estaba cerca de superar a Marcelo Pérez para ser segundo y lograba limar cerca de un segundo vuelta respecto del líder de la carrera, que además volvió a la cima del campeonato.
La final empezó con sólo 10 autos y terminó con la mitad por los abandonos de “Lucho” Méndez, Pablo Soetbeer, Fernando Vázquez, Miguel Panquilto y Otero.
Javier Figueroa había completado el podio en carrera, pero en una rigurosa revisión técnica fue excluido y su lugar fue finalmente ocupado por Javier Hernández.
TURREZ GANADOR POR UN RECARGO A MONTENEGRO
La final de la Renault fue la primera gran entrega de una jornada emocionante. El campeón Federico Turrez largaba en punta la prueba de casi 44 kilómetros dividida también en 16 vueltas al dibujo de 2.747 metros. Sin embargo, en las primeras vueltas Lucas Nicolia y Sebastián Marsicano lograron llegar a la punta en una enardecida lucha de un pelotón de diez autos.
Abel Panquilto, el presidente de la categoría que llegaba como líder del campeonato a Trelew, debía abandonar después había logrado llegar incluso al tercer lugar, lo mismo que Jesús Sugman, que en el frenesí de la lucha perdió el capot de su vehículo.
En el noveno giro, Gianfranco Mesiti, a la postre cuarto y contento por haber terminado con el "auto entero", logró la vuelta más rápida con 1:13.358.
El pelotón de punta se redujo a tres autos, los de Turrez, Montenegro y Nicolia, y en la última vuelta, en la salida del Tobogán, Montenegro y Nicolia “madrugaron” a Turrez, lo superaron y pese a que el campeón reaccionó, sólo recuperó el segundo lugar. Y Montenegro enfiló hacia la recta principal con su primer triunfo de la temporada en el bolsillo.
Sin embargo, el Comisariato Deportivo informó después que Montenegro fue recargado con la pérdida de un puesto por sobrepaso con bandera amarilla, y esa sanción le terminó costando la victoria al piloto comodorense. Pero además, el tercero, Lucas Nicolia fue excluido en la revisión técnica, y por lo tanto, Franco Mesiti ascendió al tercer puesto.
FINALES
Textos: Edgardo Lillo. Fotos: Norman Evans (Jornada Medios).