Hay 10 personas bajo investigación por la caza furtiva

Lo reveló el fiscal Carlos Diaz Mayer sobre el megaoperativo en El Maitén. “Cobraban a los cazadores por hacerles de guía”, indicó.

19 MAY 2025 - 16:53 | Actualizado 19 MAY 2025 - 17:29

Surgieron más detalles luego de que una organización de diez personas dedicada a la caza furtiva fuera desarticulada en un amplio operativo policial en El Maitén y otras localidades de Chubut y Río Negro. La investigación, encabezada por el fiscal Carlos Díaz Mayer, permitió secuestrar 48 armas de fuego —16 de ellas ilegales y una con numeración limada—, casi una tonelada de carne, 60 cabezas de ciervo, cinco vehículos, seis freezers, celulares y equipamiento para la recarga de municiones.

“La información llegó por un informe de Policía de la Seguridad Rural de El Maitén y a partir de ahí se hicieron tareas investigativas”, relató Díaz Mayer. La causa se consolidó a partir de un nuevo teléfono detectado durante los controles y del análisis de comunicaciones: “Pedimos las informaciones telefónicas y eso dio un montón de resultados que se terminaron de coronar y de confirmar todas las hipótesis con los allanamientos”.

Según el fiscal, “son cazadores furtivos, gente de El Maitén que recibía gente de afuera, de otras provincias; en este caso había de La Pampa, de Puerto Madryn, algunos venían de Córdoba y Buenos Aires”. Y detalló respecto al funcionamiento de la red: “Cobraban a los cazadores que venían a la zona por hacerles de guía, y no había nadie autorizado para eso”.

Sobre el destino de los animales, explicó: “Creemos que vendían la carne, la sacaban hacia otros lados, hacían embutidos y chacinados con el tema de la carne, se mezclaban con otros animales y se vendían. Una parte entiendo que consumían, porque hemos encontrado carne congelada”.

El operativo incluyó diez allanamientos en El Maitén, dos en Madryn, uno en El Hoyo, dos en El Bolsón y cinco en campos rurales, algunos en territorio rionegrino. Participaron más de cien funcionarios policiales.

La investigación involucra a más de diez personas. “Entre la gente que viene de otra provincia y las personas que son propietarios de campos, personas que trabajan en campo. Hay un poco de todo”, dijo. Algunos de los investigados “se dedicaron siempre a cazar, pero sin autorizaciones, y en algunos casos con permisos de algunas chacras, y en otros casos sin permisos y se metían igual”.

“Va a haber imputaciones respecto de la ley de fauna y la tenencia de armas ilegales, y también estamos investigando la falsificación de algunos documentos con los que se lograron autorizaciones y permisos para tenencias de armas y para ingresar a diferentes campos, todo falsificado”.

“La ley de fauna -explicó- prevé penas de prisión hasta cinco años de prisión, porque hay un agravante ante la existencia de una organización. Y después están las penas por tenencia ilegítima de armas y falsificación de documentos”.

No hubo detencionespero “hay muchas armas secuestradas, algunas con documentación en regla que se evaluará si corresponde devolver”.La temporada de caza de ciervo terminó en abril, "y surgió que el fin de semanahabían salido a cazar. La carne que encontramos estaba fresca”.

El material secuestrado está siendo clasificado para avanzar en las imputaciones y nuevas diligencias. “Seguían armando y recibiendo secuestros de los diferentes allanamientos, estaban centralizando todo en un mismo lugar para que quede más prolijo”, cerró Díaz Mayer en Jornada Radio.

Enterate de las noticias de POLICIALES a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.
19 MAY 2025 - 16:53

Surgieron más detalles luego de que una organización de diez personas dedicada a la caza furtiva fuera desarticulada en un amplio operativo policial en El Maitén y otras localidades de Chubut y Río Negro. La investigación, encabezada por el fiscal Carlos Díaz Mayer, permitió secuestrar 48 armas de fuego —16 de ellas ilegales y una con numeración limada—, casi una tonelada de carne, 60 cabezas de ciervo, cinco vehículos, seis freezers, celulares y equipamiento para la recarga de municiones.

“La información llegó por un informe de Policía de la Seguridad Rural de El Maitén y a partir de ahí se hicieron tareas investigativas”, relató Díaz Mayer. La causa se consolidó a partir de un nuevo teléfono detectado durante los controles y del análisis de comunicaciones: “Pedimos las informaciones telefónicas y eso dio un montón de resultados que se terminaron de coronar y de confirmar todas las hipótesis con los allanamientos”.

Según el fiscal, “son cazadores furtivos, gente de El Maitén que recibía gente de afuera, de otras provincias; en este caso había de La Pampa, de Puerto Madryn, algunos venían de Córdoba y Buenos Aires”. Y detalló respecto al funcionamiento de la red: “Cobraban a los cazadores que venían a la zona por hacerles de guía, y no había nadie autorizado para eso”.

Sobre el destino de los animales, explicó: “Creemos que vendían la carne, la sacaban hacia otros lados, hacían embutidos y chacinados con el tema de la carne, se mezclaban con otros animales y se vendían. Una parte entiendo que consumían, porque hemos encontrado carne congelada”.

El operativo incluyó diez allanamientos en El Maitén, dos en Madryn, uno en El Hoyo, dos en El Bolsón y cinco en campos rurales, algunos en territorio rionegrino. Participaron más de cien funcionarios policiales.

La investigación involucra a más de diez personas. “Entre la gente que viene de otra provincia y las personas que son propietarios de campos, personas que trabajan en campo. Hay un poco de todo”, dijo. Algunos de los investigados “se dedicaron siempre a cazar, pero sin autorizaciones, y en algunos casos con permisos de algunas chacras, y en otros casos sin permisos y se metían igual”.

“Va a haber imputaciones respecto de la ley de fauna y la tenencia de armas ilegales, y también estamos investigando la falsificación de algunos documentos con los que se lograron autorizaciones y permisos para tenencias de armas y para ingresar a diferentes campos, todo falsificado”.

“La ley de fauna -explicó- prevé penas de prisión hasta cinco años de prisión, porque hay un agravante ante la existencia de una organización. Y después están las penas por tenencia ilegítima de armas y falsificación de documentos”.

No hubo detencionespero “hay muchas armas secuestradas, algunas con documentación en regla que se evaluará si corresponde devolver”.La temporada de caza de ciervo terminó en abril, "y surgió que el fin de semanahabían salido a cazar. La carne que encontramos estaba fresca”.

El material secuestrado está siendo clasificado para avanzar en las imputaciones y nuevas diligencias. “Seguían armando y recibiendo secuestros de los diferentes allanamientos, estaban centralizando todo en un mismo lugar para que quede más prolijo”, cerró Díaz Mayer en Jornada Radio.