Indignación por las salidas transitorias de asesino de un niño
La Justicia de Neuquén volvió a habilitar las salidas transitorias para Carlos Soñé, condenado en 2004 a 30 años de prisión por violar y asesinar a Franco, el hijo de tres años de su pareja.
El caso, que sacudió a la comunidad de Zapala y provocó una fuerte reacción social, vuelve a generar indignación en Cutral Co y en todo el Alto Valle. La información fue confirmada en las últimas horas.
Soñé podrá salir tres veces al mes bajo custodia policial, pese a que su condena finaliza en 2032. El beneficio ya le había sido concedido en diciembre de 2017, pero en 2024 el Ministerio Público Fiscal solicitó interrumpirlo, basándose en la gravedad del caso. Sin embargo, el juez de garantías Gustavo Ravizzoli autorizó las salidas, argumentando que no hubo objeciones al comportamiento del condenado.
Desde la fiscalía se insistió en que no existían condiciones sociales ni institucionales para otorgar el beneficio, pero el planteo fue desestimado por falta de pruebas nuevas que justificaran su revocación.
La causa por la cual fue condenado Soñé se remonta al 30 de octubre de 2002, cuando atacó brutalmente al pequeño Franco, provocándole una peritonitis por ruptura intestinal. Al día siguiente, la madre del niño salió a trabajar dejando al menor en estado crítico. Soñé volvió a atacarlo, lo violó y lo quemó con un cigarrillo. Luego intentaron borrar las evidencias del crimen, pero la autopsia reveló la verdad.
Ambos adultos fueron condenados. Soñé recibió la pena máxima de 30 años, por los delitos de abuso sexual con acceso carnal continuado agravado por su condición de guardador, abandono de persona agravado por el resultado de muerte y lesiones leves continuadas.
“Me dijeron que iba a tener privilegios”
En una audiencia en 2019, Carlos Soñé se quejó por no haber recibido un tratamiento psicológico adecuado durante su estadía en prisión. “Cuando me condenaron, me dijeron que iba a tener privilegios para empezar a salir. Llegué a la mitad de la condena y no había preparado nada para mí”, expresó ante el tribunal.
El caso, que sacudió a la comunidad de Zapala y provocó una fuerte reacción social, vuelve a generar indignación en Cutral Co y en todo el Alto Valle. La información fue confirmada en las últimas horas.
Soñé podrá salir tres veces al mes bajo custodia policial, pese a que su condena finaliza en 2032. El beneficio ya le había sido concedido en diciembre de 2017, pero en 2024 el Ministerio Público Fiscal solicitó interrumpirlo, basándose en la gravedad del caso. Sin embargo, el juez de garantías Gustavo Ravizzoli autorizó las salidas, argumentando que no hubo objeciones al comportamiento del condenado.
Desde la fiscalía se insistió en que no existían condiciones sociales ni institucionales para otorgar el beneficio, pero el planteo fue desestimado por falta de pruebas nuevas que justificaran su revocación.
La causa por la cual fue condenado Soñé se remonta al 30 de octubre de 2002, cuando atacó brutalmente al pequeño Franco, provocándole una peritonitis por ruptura intestinal. Al día siguiente, la madre del niño salió a trabajar dejando al menor en estado crítico. Soñé volvió a atacarlo, lo violó y lo quemó con un cigarrillo. Luego intentaron borrar las evidencias del crimen, pero la autopsia reveló la verdad.
Ambos adultos fueron condenados. Soñé recibió la pena máxima de 30 años, por los delitos de abuso sexual con acceso carnal continuado agravado por su condición de guardador, abandono de persona agravado por el resultado de muerte y lesiones leves continuadas.
“Me dijeron que iba a tener privilegios”
En una audiencia en 2019, Carlos Soñé se quejó por no haber recibido un tratamiento psicológico adecuado durante su estadía en prisión. “Cuando me condenaron, me dijeron que iba a tener privilegios para empezar a salir. Llegué a la mitad de la condena y no había preparado nada para mí”, expresó ante el tribunal.