Médicos anunciaron medidas de fuerza

Médicos de los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) de Chubut llevan adelante una medida de fuerza que incluye la reducción horaria de atención durante los días hábiles y la suspensión de la atención los días sábados.

09 JUN 2025 - 12:47 | Actualizado 09 JUN 2025 - 12:49

El reclamo, encabezado por la Asociación Gremial de la Salud Pública se centra en la necesidad urgente de una recomposición salarial y en la crítica situación del sistema sanitario provincial.

Federico Larreira, representante de AGreMeCh Chubut, explicó que la protesta se debe a que “el salario médico está muy por debajo de lo que debería ser, especialmente en el primer nivel de atención, que es clave para contener la demanda y evitar la saturación del sistema”. Indicó que, en los últimos años, “están ingresando muy pocos profesionales, casi con cuentagotas, y muchos están saliendo del sistema, ya sea por jubilación o porque se van al ámbito privado”.

Advirtió que localidades como Rawson o Esquel podrían ver colapsado su sistema en los próximos años: “La mitad del sistema de salud estará en condiciones de jubilarse en cinco años. Hoy hay centros que no llegan a tener dos médicos por sala”.

Larreira remarcó que el impacto ya se percibe en la atención diaria: “Hoy tenemos colas a las 5 de la mañana en los centros de salud para conseguir un turno. Hay barrios donde ya existen personas que se dedican a hacer la fila y luego cobran ese turno, incluso hasta cinco veces más de lo que el Estado le paga a un médico recién ingresado”.

Sobre la realidad de los CAPS, explicó: “El 30% de los turnos son programados, para controles de salud, y el 70% restante es demanda espontánea. Cuando los centros no pueden responder, esos pacientes van directo a la guardia”. Y subrayó: “La saturación de la guardia es el termómetro de cómo está funcionando el sistema de salud. Si la guardia está desbordada, es porque el primer nivel ya no puede sostener la demanda”.

También alertó por el incremento de pacientes con obra social que recurren al sistema público: “La atención con arancelamiento aumentó porque las obras sociales están fallando o porque la gente no puede pagar los copagos. Tenemos un aumento importante de la demanda de sectores con cobertura social”.

Respecto a las condiciones salariales, Larreira indicó que “el salario básico ronda entre los 300 y 400 mil pesos por 36 horas semanales, incluyendo sábados, pero ese básico está congelado hace tiempo. Lo que se han hecho son parches en forma de adicionales, lo que genera inequidad: cada médico cobra diferente según el lugar donde trabaja”.

“Hoy un médico especialista -explicó Larreira- con 6, 7, 11 años de formación, que ingresa a la provincia, cobra apenas un poco más que la canasta básica patagónica: alrededor de 1.6 millones de pesos por un cargo de 36 horas”.

Finalmente, advirtió: “Lo que estamos alertando es que hoy esta medida es temporal, pero si no se toman decisiones, será la realidad definitiva de los centros de salud. Lo vimos en Río Negro: hoy hay centros en Roca o Viedma que solo atienden tres veces por semana. Si seguimos así, vamos hacia ese modelo”.

09 JUN 2025 - 12:47

El reclamo, encabezado por la Asociación Gremial de la Salud Pública se centra en la necesidad urgente de una recomposición salarial y en la crítica situación del sistema sanitario provincial.

Federico Larreira, representante de AGreMeCh Chubut, explicó que la protesta se debe a que “el salario médico está muy por debajo de lo que debería ser, especialmente en el primer nivel de atención, que es clave para contener la demanda y evitar la saturación del sistema”. Indicó que, en los últimos años, “están ingresando muy pocos profesionales, casi con cuentagotas, y muchos están saliendo del sistema, ya sea por jubilación o porque se van al ámbito privado”.

Advirtió que localidades como Rawson o Esquel podrían ver colapsado su sistema en los próximos años: “La mitad del sistema de salud estará en condiciones de jubilarse en cinco años. Hoy hay centros que no llegan a tener dos médicos por sala”.

Larreira remarcó que el impacto ya se percibe en la atención diaria: “Hoy tenemos colas a las 5 de la mañana en los centros de salud para conseguir un turno. Hay barrios donde ya existen personas que se dedican a hacer la fila y luego cobran ese turno, incluso hasta cinco veces más de lo que el Estado le paga a un médico recién ingresado”.

Sobre la realidad de los CAPS, explicó: “El 30% de los turnos son programados, para controles de salud, y el 70% restante es demanda espontánea. Cuando los centros no pueden responder, esos pacientes van directo a la guardia”. Y subrayó: “La saturación de la guardia es el termómetro de cómo está funcionando el sistema de salud. Si la guardia está desbordada, es porque el primer nivel ya no puede sostener la demanda”.

También alertó por el incremento de pacientes con obra social que recurren al sistema público: “La atención con arancelamiento aumentó porque las obras sociales están fallando o porque la gente no puede pagar los copagos. Tenemos un aumento importante de la demanda de sectores con cobertura social”.

Respecto a las condiciones salariales, Larreira indicó que “el salario básico ronda entre los 300 y 400 mil pesos por 36 horas semanales, incluyendo sábados, pero ese básico está congelado hace tiempo. Lo que se han hecho son parches en forma de adicionales, lo que genera inequidad: cada médico cobra diferente según el lugar donde trabaja”.

“Hoy un médico especialista -explicó Larreira- con 6, 7, 11 años de formación, que ingresa a la provincia, cobra apenas un poco más que la canasta básica patagónica: alrededor de 1.6 millones de pesos por un cargo de 36 horas”.

Finalmente, advirtió: “Lo que estamos alertando es que hoy esta medida es temporal, pero si no se toman decisiones, será la realidad definitiva de los centros de salud. Lo vimos en Río Negro: hoy hay centros en Roca o Viedma que solo atienden tres veces por semana. Si seguimos así, vamos hacia ese modelo”.