La captura se realizó el 8 de junio mientras el buque Floridablanca se encontraba en la búsqueda de merluza y calamar illex en una zona conocida como “la barranca”.
Una vez que fue descargado y trasladado a la planta Desafio SA, se tuvieron que enviar muestras al Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP) para determinar la especie del animal. Pero las suposiciones iniciales eran ciertas: efectivamente correspondía a un atún de aleta amarilla (Thunnus albacares), también conocido como rabil, que llegó a pesar 142 kilos eviscerado.
Según trascendió, suele habitar mares tropicales y subtropicales, por lo que es raro encontrar ejemplares en latitudes tan australes. A su vez, es un nadador ágil y veloz, que suele desplazarse en aguas superficiales en la búsqueda de calamar. Alcanzando longitudes de hasta 2,4 metros y pesos cercanos a los 200 kilos, es reconocido por su silueta estilizada, su brillante librea azul y plateada, y sus distintivas aletas amarillas.
El hallazgo sorprendió a los pescadores, quienes recordaron que durante los años ´70 se capturaba en abundancia este tipo de especie, pero al sudeste de Uruguay y con ejemplares que no superaban los 3 kilos.
(Deproa.com)
La captura se realizó el 8 de junio mientras el buque Floridablanca se encontraba en la búsqueda de merluza y calamar illex en una zona conocida como “la barranca”.
Una vez que fue descargado y trasladado a la planta Desafio SA, se tuvieron que enviar muestras al Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP) para determinar la especie del animal. Pero las suposiciones iniciales eran ciertas: efectivamente correspondía a un atún de aleta amarilla (Thunnus albacares), también conocido como rabil, que llegó a pesar 142 kilos eviscerado.
Según trascendió, suele habitar mares tropicales y subtropicales, por lo que es raro encontrar ejemplares en latitudes tan australes. A su vez, es un nadador ágil y veloz, que suele desplazarse en aguas superficiales en la búsqueda de calamar. Alcanzando longitudes de hasta 2,4 metros y pesos cercanos a los 200 kilos, es reconocido por su silueta estilizada, su brillante librea azul y plateada, y sus distintivas aletas amarillas.
El hallazgo sorprendió a los pescadores, quienes recordaron que durante los años ´70 se capturaba en abundancia este tipo de especie, pero al sudeste de Uruguay y con ejemplares que no superaban los 3 kilos.
(Deproa.com)