Dicen que Dios se manifiesta de diferentes formas en las adversidades, y este puede ser el caso que se produjo en la precordillera. Allí esta ayuda se materializó en las manos de enfermeros, médicos y chofer que ayudaron a una parturienta a traer al mundo a su beba.
El martes 2 de septiembre, a las 19 y 40 horas, ingresó al hospital Roberto Gandini de San Martin una joven paciente en trabajo de parto. Allí fue recibidapor enfermeras del establecimiento y la médica de guardia, que, al evaluar su estado, decidió que sea trasladada de urgencia a la ciudad de Esquel.
La comitiva junto a la madre que mostraba en su rostro el sufrimiento propio del parto, salióa las 20 horas hacia Esquel, distante unos 200 kilómetros.
En pleno viaje, la joven comenzó con el proceso de alumbramiento en la ambulancia, dejando por sentado quehasta Esquel sería imposible llegar.
Fue así que se decidióarribar al hospital de Tecka, donde se realizó con éxito el parto. Luego de minutos interminables, una ruta destruida y un clima adverso, nació a las 21 05 horas Martina, pesando 2780 kg.
En el nosocomio de Tecka se realizaron los cuidados necesarios tanto de la madre y su pequeña hija y se procedió a continuar el viaje hacia Esquel, donde ya descansan tras una agotadora odisea.
Dicen que Dios se manifiesta de diferentes formas en las adversidades, y este puede ser el caso que se produjo en la precordillera. Allí esta ayuda se materializó en las manos de enfermeros, médicos y chofer que ayudaron a una parturienta a traer al mundo a su beba.
El martes 2 de septiembre, a las 19 y 40 horas, ingresó al hospital Roberto Gandini de San Martin una joven paciente en trabajo de parto. Allí fue recibidapor enfermeras del establecimiento y la médica de guardia, que, al evaluar su estado, decidió que sea trasladada de urgencia a la ciudad de Esquel.
La comitiva junto a la madre que mostraba en su rostro el sufrimiento propio del parto, salióa las 20 horas hacia Esquel, distante unos 200 kilómetros.
En pleno viaje, la joven comenzó con el proceso de alumbramiento en la ambulancia, dejando por sentado quehasta Esquel sería imposible llegar.
Fue así que se decidióarribar al hospital de Tecka, donde se realizó con éxito el parto. Luego de minutos interminables, una ruta destruida y un clima adverso, nació a las 21 05 horas Martina, pesando 2780 kg.
En el nosocomio de Tecka se realizaron los cuidados necesarios tanto de la madre y su pequeña hija y se procedió a continuar el viaje hacia Esquel, donde ya descansan tras una agotadora odisea.