Pedro y Juana: misterio, muchas hipótesis y ninguna certeza

La desaparición de Pedro Alberto Kreder (79) y Juana Inés Morales (69) sigue rodeada de misterios en medio de una investigación que se cuestiona desde sus formas y que suma, cada vez, mayor cantidad de recursos tecnológicos y humanos.

22 OCT 2025 - 15:01 | Actualizado 22 OCT 2025 - 15:08

La búsqueda es compleja. Solamente llegar al lugar desde el centro de Comodoro Rivadavia implica poco más de cien kilómetros. Se debe llegar a la zona norte de la ciudad; tocar Caleta Córdova, el tradicional barrio de pescadores desde el que se transporta el petróleo crudo de la Cuenca del Golfo San Jorge a través de la monoboya de Termap para luego manteniendo el rumbo norte, dirigirse hasta Rocas Coloradas.

El sector que suele ser escenario de concursos de pesca y punto de encuentro para muchos aficionados cañófilos, se caracteriza por los “refugios” de chapa construídos con la finalidad de resguardar del clima a quienes comparten jornadas de pesca en la costa y o eligen éste sector alejado para disfrutar de un día de playa.

Siguiendo el norte existe una amplia franja poco conocida que en algún momento le dio sentido a la denominada “Ruta Azul” que impulsó el ex gobernador Martín Buzzi con la idea de reactivar éste tramo de la Ruta Uno para llegar por éste vía a la localidad de Camarones.

En éste sector, hoy un ejército de personas militares y civiles recorre cada centímetro con la esperanza de hallar una pista o un indicio. El paso de las horas genera alguna decepción entre quienes son parte del gigantesco operativo ya que la falta de resultados aumenta también la preocupación de familiares y allegados.

¿Quiénes eran Pedro y Juana?. Era una pareja que había iniciado recientemente una relación y que se encontraba en una instancia de “conocimiento” que no se había “blanqueado” abiertamente ante hijos y demás familiares. Ambos habrían decidido resguardar la relación y avanzar lentamente en el proceso.

Ambos eran jubilados y contaban con una vida normal. Ella ex docente y él, vecino del barrio Ciudadela parecían congeniar y proyectar aunque sin compartirlo plenamente con sus hijos. “Me enteré de que mi mamá viajaba a Camarones porque se lo comentó a mi hermana mayor”, dijo la hija de la mujer quien inicialmente publicó en redes sociales, una foto de Kreder para requerir información luego de que se desconociera el paradero de la madre.

Por su parte las dos hijas de Pedro, expresaron que no conocían a Juana pero que se acercaron a sus familiares en éste momento de búsqueda. “Mi papá era muy cuidadoso y no creemos que él haya llegado con su camioneta hasta éste lugar. Desconocemos lo que pudo haber pasado”, resumieron en medio de la incertidumbre.

Procedimiento en debate

La camioneta Toyota Hilux que permanecía encajada en un sector de suelo arcilloso en el sector denominado “Cañadón de Visser” recién en la jornada de ayer fue retirada de la posición en la que se halló. Se utilizaron eslingas y se debió recurrir a tres vehículos especiales para mover al vehículo que tenía su capot abierto y presentaba un vidrio lateral roto que debió forzarse por parte del personal policial.

La presencia de numerosas personas externas y equipos periodísticos foráneos en el lugar; generó un ámbito poco propicio para el resguardo de huellas y rastros. El cerrajero contratado para arrancar el vehículo debió recurrir a conectividad de un canal capitalino para realizar la copia y posteriormente, procedió al encendido del rodado sentado en el lugar del conductor.

Los elementos hallados en la cabina fueron exhibidos a través de la prensa: se observó dinero (sin que estableciera una cantidad exacta); un termo, objetos personales y alimentos. No se observaron indicios de violencia y en principio, tampoco se establecieron otros elementos de prueba.

Se cuestiona que la búsqueda de las personas en condición de desaparecidas se puso en marcha cinco días después de la denuncia ya que se considera éste lapso como “crucial” para determinar el curso de los hechos. Del mismo modo, la “contaminación” de las pruebas y la afectación de las huellas por parte de las incidencias climáticas (lluvia y fuertes vientos) resultan factores que le ponen aún más interrogantes al caso.

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22 OCT 2025 - 15:01

La búsqueda es compleja. Solamente llegar al lugar desde el centro de Comodoro Rivadavia implica poco más de cien kilómetros. Se debe llegar a la zona norte de la ciudad; tocar Caleta Córdova, el tradicional barrio de pescadores desde el que se transporta el petróleo crudo de la Cuenca del Golfo San Jorge a través de la monoboya de Termap para luego manteniendo el rumbo norte, dirigirse hasta Rocas Coloradas.

El sector que suele ser escenario de concursos de pesca y punto de encuentro para muchos aficionados cañófilos, se caracteriza por los “refugios” de chapa construídos con la finalidad de resguardar del clima a quienes comparten jornadas de pesca en la costa y o eligen éste sector alejado para disfrutar de un día de playa.

Siguiendo el norte existe una amplia franja poco conocida que en algún momento le dio sentido a la denominada “Ruta Azul” que impulsó el ex gobernador Martín Buzzi con la idea de reactivar éste tramo de la Ruta Uno para llegar por éste vía a la localidad de Camarones.

En éste sector, hoy un ejército de personas militares y civiles recorre cada centímetro con la esperanza de hallar una pista o un indicio. El paso de las horas genera alguna decepción entre quienes son parte del gigantesco operativo ya que la falta de resultados aumenta también la preocupación de familiares y allegados.

¿Quiénes eran Pedro y Juana?. Era una pareja que había iniciado recientemente una relación y que se encontraba en una instancia de “conocimiento” que no se había “blanqueado” abiertamente ante hijos y demás familiares. Ambos habrían decidido resguardar la relación y avanzar lentamente en el proceso.

Ambos eran jubilados y contaban con una vida normal. Ella ex docente y él, vecino del barrio Ciudadela parecían congeniar y proyectar aunque sin compartirlo plenamente con sus hijos. “Me enteré de que mi mamá viajaba a Camarones porque se lo comentó a mi hermana mayor”, dijo la hija de la mujer quien inicialmente publicó en redes sociales, una foto de Kreder para requerir información luego de que se desconociera el paradero de la madre.

Por su parte las dos hijas de Pedro, expresaron que no conocían a Juana pero que se acercaron a sus familiares en éste momento de búsqueda. “Mi papá era muy cuidadoso y no creemos que él haya llegado con su camioneta hasta éste lugar. Desconocemos lo que pudo haber pasado”, resumieron en medio de la incertidumbre.

Procedimiento en debate

La camioneta Toyota Hilux que permanecía encajada en un sector de suelo arcilloso en el sector denominado “Cañadón de Visser” recién en la jornada de ayer fue retirada de la posición en la que se halló. Se utilizaron eslingas y se debió recurrir a tres vehículos especiales para mover al vehículo que tenía su capot abierto y presentaba un vidrio lateral roto que debió forzarse por parte del personal policial.

La presencia de numerosas personas externas y equipos periodísticos foráneos en el lugar; generó un ámbito poco propicio para el resguardo de huellas y rastros. El cerrajero contratado para arrancar el vehículo debió recurrir a conectividad de un canal capitalino para realizar la copia y posteriormente, procedió al encendido del rodado sentado en el lugar del conductor.

Los elementos hallados en la cabina fueron exhibidos a través de la prensa: se observó dinero (sin que estableciera una cantidad exacta); un termo, objetos personales y alimentos. No se observaron indicios de violencia y en principio, tampoco se establecieron otros elementos de prueba.

Se cuestiona que la búsqueda de las personas en condición de desaparecidas se puso en marcha cinco días después de la denuncia ya que se considera éste lapso como “crucial” para determinar el curso de los hechos. Del mismo modo, la “contaminación” de las pruebas y la afectación de las huellas por parte de las incidencias climáticas (lluvia y fuertes vientos) resultan factores que le ponen aún más interrogantes al caso.