Un violento golpe comando se registró poco después de las 10 de este miércoles en la concesionaria Volkswagen, ubicada al este de Trelew, ocasión en que tres delincuentes y con armas, ingresaron y redujeron al personal que se encontraba en el interior.
Según el ministro de Seguridad, Héctor Iturrioz, el golpe comando duró siete segundos.
Fue en un momento en que había movimiento de dinero por lo que había personal policial adicional. Al ver la presencia de los uniformados se dieron a la fuga en el vehículo que llegaron.
A razón de lo sucedido se montó un operativo cerrojo para dar con ellos.
El ministro de Seguridad Héctor Iturrioz, se hizo presente en el lugar y brindó detalles del hecho. “En total eran tres delincuentes, no estaban encapuchados, solo con gorras y uno de ellos exhibió un arma. Ingresaron por una puerta de acceso al salón que permanece cerrada habitualmente”.
Cuando ingresaron “hicieron tirar al personal al suelo. Ninguno sufrió violencia física, solo están asustados por la situación”. Se supo además que el personal de la concesionaria temía que el personal de seguridad (policía montada) actuara.

Un violento golpe comando se registró poco después de las 10 de este miércoles en la concesionaria Volkswagen, ubicada al este de Trelew, ocasión en que tres delincuentes y con armas, ingresaron y redujeron al personal que se encontraba en el interior.
Según el ministro de Seguridad, Héctor Iturrioz, el golpe comando duró siete segundos.
Fue en un momento en que había movimiento de dinero por lo que había personal policial adicional. Al ver la presencia de los uniformados se dieron a la fuga en el vehículo que llegaron.
A razón de lo sucedido se montó un operativo cerrojo para dar con ellos.
El ministro de Seguridad Héctor Iturrioz, se hizo presente en el lugar y brindó detalles del hecho. “En total eran tres delincuentes, no estaban encapuchados, solo con gorras y uno de ellos exhibió un arma. Ingresaron por una puerta de acceso al salón que permanece cerrada habitualmente”.
Cuando ingresaron “hicieron tirar al personal al suelo. Ninguno sufrió violencia física, solo están asustados por la situación”. Se supo además que el personal de la concesionaria temía que el personal de seguridad (policía montada) actuara.