Tres abogados denunciaron al juez Richeri por "comercio ilegal"
La firmaron Alfredo Pérez Galimberti, José Raúl Heredia y Federico Ruffa. También lo acusan de haber usado Inteligencia Artificial para redactar una sentencia y haber abusado de su poder en una causa que los involucra.
Tres conocidos abogados denunciaron al juez de Esquel Carlos Richeri por ejercer el comercio ilegalmente, haber usado Inteligencia Artificial para redactar una sentencia y haber abusado de su poder en una causa que los involucra.
La presentación por mal desempeño ante la nueva integración del Consejo de la Magistratura la firmaron Alfredo Pérez Galimberti, José Raúl Heredia y Federico Ruffa.
Los letrados acusaron al magistrado por montar “una verdadera empresa comercial, una academia privada de enseñanza de destrezas forenses y al asesoramiento profesional de abogados y funcionarios judiciales”.
Son dos páginas web donde imparte clases particulares a abogados mediante grabaciones que entrega a cambio de tarifas diferenciales. Además, da cursos on-line que se pueden comprar en conjunto o separados de las clases grabadas. Las páginas son Neolitigantes academy.tiendup.com y Neolitigantes.academy.
“Publicita cursos, clínicas de casos y workshops (con intervenciones en vivo) dictados por el mismo Richeri, con el objeto de enseñar a desarmar y resolver casos, especialmente los casos reales que tienen en trámite los participantes”.
El juez ofrece un método llamado Stratlex y enseña destrezas forenses pero sin ningún aval universitario. “Es un emprendimiento comercial”, describieron.
Quienes compran el paquete “son derivados a una conversación privada con Richeri, para integrarse a un grupo que trabajará, en tiempo real, sobre los casos”.
Algunas frases de las webs del magistrado son: "Tanto si prefieres estudiar a tu ritmo (Curso Grabado) o tenerme como tu mentor en vivo (Workshop), aquí encontrarás el sistema completo para ganar tus casos"; "Encontrá la falla en toda acusación en 15´ y quebrala con litigación estratégica"; "PREVENTA Curso Completo: El Método STRATLEX Método secreto de litigación penal, revelado. Carlos Richeri (ex-Fiscal y actual Juez Penal), que te enseña a encontrar las fallas estructurales a cualquier acusación y ganar tus casos con estrategia, no con improvisación"; "Te enseñaré a pensar como un fiscal para poder desarmar sus casos, o a blindar los tuyos si eres acusador".
El precio de $ 500.000 está tachado y abajo hay un nuevo precio de $ 350.000 (con la leyenda de 30% off) con un vínculo para transferencia bancaria. El precio en dólares es de U$S 400, tachado y abajo un nuevo precio de U$S 250 (con la leyenda de 38% off).
Según otro texto de las páginas, "como Fiscal, usé este método para construir acusaciones implacables. Ahora, como Juez, te lo enseño para que puedas desarmarlas".
Tras recordar la Ley de Ética Pública, la denuncia recuerda que los jueces tienen prohibido ejercer el comercio y ejercer la abogacía de cualquier modo.
“La venta de cursos, grabados y presenciales, por parte del juez Richeri, con sustento en su -exagerada, por otra parte- experiencia como magistrado, garantizando resultados, actividad que publicita permanentemente con histrionismo desmedido, es una actividad incompatible con la dignidad de un magistrado”.
Pérez Galimberti, Ruffa y Heredia remarcaron que para sus videos Richeri usa su despacho y la sala de audiencias en los Tribunales de Esquel. “El empleo de las instalaciones del Poder Judicial, y hasta en ocasiones el uso de la toga, tienden a reforzar su campaña de venta mostrándose como un operador experimentado y criterioso del Poder Judicial de Chubut”.
“Usó bienes del Estado para provecho propio, como el propio edificio y el despacho judicial; los muebles y la enseña patria; también servicios, como la provisión de energía eléctrica, y eventualmente el uso de una computadora provista por el Poder Judicial”.
Lo consideran “una conducta gravemente indecorosa del juez, que aprovecha los recursos del Poder Judicial de Chubut para generar ingresos en un emprendimiento comercial”. En tal sentido “sus transgresiones son indicativas de su desprecio por el decoro que debe impregnar todos los actos de un magistrado”.
De acuerdo a la presentación, al dar asesoramiento personal en casos reales está ejerciendo la profesión de abogado, cuando lo tiene vedado. “Se ufana de los conocimientos adquiridos en sus funciones de Fiscal y Juez, y anuncia que los compartirá con quieres paguen sus cursos (…) Es un trabajo de asesoramiento profesional donde el vendedor del producto asegura resultados. No se trata de “couching”, concepto que identifica más un acompañamiento para el desarrollo personal de habilidades, sino lisa y llanamente de consejo profesional sobre casos. Y esto está prohibido, se mire por donde se mire”.
“La conducta de montar una academia, de la que sólo él es responsable, y que tiene por finalidad de obtención de dinero por parte de particulares, significa que ejerce un comercio en el que vende servicios. Y esto evidencia una grave falta de idoneidad moral”.
La denuncia también hace referencia a la sentencia de la Cámara Penal de Esquel, que invalidó un fallo de Richeri por haberlo escrito usando Inteligencia Artificial. Los tres jueces de la Cámara pidieron un sumario al juez.
“Lejos de arredrarse, y poniendo de manifiesto un consistente desprecio por los colegas Dal Verme, Zacchino y Estefanía, el juez publicó en Instagram un video donde supuestamente mantiene una conversación con el chat GPT”. En ese diálogo con sorna dice:
“En Esquel hay tres iluminados, que sólo leyendo, sin acompañamiento pericial ni rigor forense pueden afirmar si un archivo fue editado con inteligencia artificial”.
Luego vinieron otros dos videos virales en Tik Tok. “Richeri no duda en hacer befa de sus colegas revisores, comprometiendo también a dignidad del Poder Judicial”. El uso desprolijo de IA para fundamentar su decisión “se agrava cuando se aprecia el hacer burla de los jueces de Cámara que anularan su fallo, de modo repetido y público, a través de redes sociales de amplia difusión. A la par de falta e idoneidad moral, se suma la falta de idoneidad técnica”.
El tercer motivo de la denuncia es conocido: la intervención “irregular” del juez en la causa penal en la que Heredia y Pérez Galimberti, en representación de la Asociación de la Magistratura denunciaron a los integrantes del Superior Tribunal de Justicia.
“No solamente asumió una jurisdicción que no le correspondía; tampoco se excusó cuando todos los magistrados asociados lo hicieron”, dice la denuncia. Además, con “vergonzosos fundamentos” llama la atención a ambos abogados. “La excusación de magistrados cuando se involucra a su Asociación es una constante. Es que no se puede ser juez y parte. Es abuso de poder”.
Tres conocidos abogados denunciaron al juez de Esquel Carlos Richeri por ejercer el comercio ilegalmente, haber usado Inteligencia Artificial para redactar una sentencia y haber abusado de su poder en una causa que los involucra.
La presentación por mal desempeño ante la nueva integración del Consejo de la Magistratura la firmaron Alfredo Pérez Galimberti, José Raúl Heredia y Federico Ruffa.
Los letrados acusaron al magistrado por montar “una verdadera empresa comercial, una academia privada de enseñanza de destrezas forenses y al asesoramiento profesional de abogados y funcionarios judiciales”.
Son dos páginas web donde imparte clases particulares a abogados mediante grabaciones que entrega a cambio de tarifas diferenciales. Además, da cursos on-line que se pueden comprar en conjunto o separados de las clases grabadas. Las páginas son Neolitigantes academy.tiendup.com y Neolitigantes.academy.
“Publicita cursos, clínicas de casos y workshops (con intervenciones en vivo) dictados por el mismo Richeri, con el objeto de enseñar a desarmar y resolver casos, especialmente los casos reales que tienen en trámite los participantes”.
El juez ofrece un método llamado Stratlex y enseña destrezas forenses pero sin ningún aval universitario. “Es un emprendimiento comercial”, describieron.
Quienes compran el paquete “son derivados a una conversación privada con Richeri, para integrarse a un grupo que trabajará, en tiempo real, sobre los casos”.
Algunas frases de las webs del magistrado son: "Tanto si prefieres estudiar a tu ritmo (Curso Grabado) o tenerme como tu mentor en vivo (Workshop), aquí encontrarás el sistema completo para ganar tus casos"; "Encontrá la falla en toda acusación en 15´ y quebrala con litigación estratégica"; "PREVENTA Curso Completo: El Método STRATLEX Método secreto de litigación penal, revelado. Carlos Richeri (ex-Fiscal y actual Juez Penal), que te enseña a encontrar las fallas estructurales a cualquier acusación y ganar tus casos con estrategia, no con improvisación"; "Te enseñaré a pensar como un fiscal para poder desarmar sus casos, o a blindar los tuyos si eres acusador".
El precio de $ 500.000 está tachado y abajo hay un nuevo precio de $ 350.000 (con la leyenda de 30% off) con un vínculo para transferencia bancaria. El precio en dólares es de U$S 400, tachado y abajo un nuevo precio de U$S 250 (con la leyenda de 38% off).
Según otro texto de las páginas, "como Fiscal, usé este método para construir acusaciones implacables. Ahora, como Juez, te lo enseño para que puedas desarmarlas".
Tras recordar la Ley de Ética Pública, la denuncia recuerda que los jueces tienen prohibido ejercer el comercio y ejercer la abogacía de cualquier modo.
“La venta de cursos, grabados y presenciales, por parte del juez Richeri, con sustento en su -exagerada, por otra parte- experiencia como magistrado, garantizando resultados, actividad que publicita permanentemente con histrionismo desmedido, es una actividad incompatible con la dignidad de un magistrado”.
Pérez Galimberti, Ruffa y Heredia remarcaron que para sus videos Richeri usa su despacho y la sala de audiencias en los Tribunales de Esquel. “El empleo de las instalaciones del Poder Judicial, y hasta en ocasiones el uso de la toga, tienden a reforzar su campaña de venta mostrándose como un operador experimentado y criterioso del Poder Judicial de Chubut”.
“Usó bienes del Estado para provecho propio, como el propio edificio y el despacho judicial; los muebles y la enseña patria; también servicios, como la provisión de energía eléctrica, y eventualmente el uso de una computadora provista por el Poder Judicial”.
Lo consideran “una conducta gravemente indecorosa del juez, que aprovecha los recursos del Poder Judicial de Chubut para generar ingresos en un emprendimiento comercial”. En tal sentido “sus transgresiones son indicativas de su desprecio por el decoro que debe impregnar todos los actos de un magistrado”.
De acuerdo a la presentación, al dar asesoramiento personal en casos reales está ejerciendo la profesión de abogado, cuando lo tiene vedado. “Se ufana de los conocimientos adquiridos en sus funciones de Fiscal y Juez, y anuncia que los compartirá con quieres paguen sus cursos (…) Es un trabajo de asesoramiento profesional donde el vendedor del producto asegura resultados. No se trata de “couching”, concepto que identifica más un acompañamiento para el desarrollo personal de habilidades, sino lisa y llanamente de consejo profesional sobre casos. Y esto está prohibido, se mire por donde se mire”.
“La conducta de montar una academia, de la que sólo él es responsable, y que tiene por finalidad de obtención de dinero por parte de particulares, significa que ejerce un comercio en el que vende servicios. Y esto evidencia una grave falta de idoneidad moral”.
La denuncia también hace referencia a la sentencia de la Cámara Penal de Esquel, que invalidó un fallo de Richeri por haberlo escrito usando Inteligencia Artificial. Los tres jueces de la Cámara pidieron un sumario al juez.
“Lejos de arredrarse, y poniendo de manifiesto un consistente desprecio por los colegas Dal Verme, Zacchino y Estefanía, el juez publicó en Instagram un video donde supuestamente mantiene una conversación con el chat GPT”. En ese diálogo con sorna dice:
“En Esquel hay tres iluminados, que sólo leyendo, sin acompañamiento pericial ni rigor forense pueden afirmar si un archivo fue editado con inteligencia artificial”.
Luego vinieron otros dos videos virales en Tik Tok. “Richeri no duda en hacer befa de sus colegas revisores, comprometiendo también a dignidad del Poder Judicial”. El uso desprolijo de IA para fundamentar su decisión “se agrava cuando se aprecia el hacer burla de los jueces de Cámara que anularan su fallo, de modo repetido y público, a través de redes sociales de amplia difusión. A la par de falta e idoneidad moral, se suma la falta de idoneidad técnica”.
El tercer motivo de la denuncia es conocido: la intervención “irregular” del juez en la causa penal en la que Heredia y Pérez Galimberti, en representación de la Asociación de la Magistratura denunciaron a los integrantes del Superior Tribunal de Justicia.
“No solamente asumió una jurisdicción que no le correspondía; tampoco se excusó cuando todos los magistrados asociados lo hicieron”, dice la denuncia. Además, con “vergonzosos fundamentos” llama la atención a ambos abogados. “La excusación de magistrados cuando se involucra a su Asociación es una constante. Es que no se puede ser juez y parte. Es abuso de poder”.