Mario Das Neves íntimo

El flamante diputado nacional recibió a Jornada en su casa. Habló de las responsabilidades del gobierno, de las mentiras y del por qué de su triunfo. Y también de su familia.

28 OCT 2013 - 22:54 | Actualizado

-Soy un tipo duro. Lo reconozco. Pero nada revanchista. Esto no es una revancha para mí Yo miro hacia adelante. No uso el espejo retrovisor. No sirve para nada eso.

Mario Das Neves disfruta el día después a su manera. Ganó por una diferencia enorme, se quedó con las dos bancas y movió el tablero político de la provincia. Sin embargo, pide que le den los resultados de todas las localidades para saber qué pasó en cada lugar. En cada escuela, en cada mesa. Tal vez en esa obsesión por el trabajo político radique el secreto de esa catarata de votos que lo convirtió en el candidato que ganó por mayor diferencia en todo el país.

Recibió a Jornada en su casa el famoso “día después”. Y dijo: “¿Qué día después? La gente siguió trabajando, abrieron los negocios, todo fue normal. Los políticos tenemos que bajar a la tierra. Es la única manera en que vamos a poder entender la realidad. Hay quienes se meten en un frasco y después lo pagan caro. Hay que salir, caminar, ver. Hablar con todo el mundo. No hay secretos en esto. Hay que dar la cara. Pero no a veces. Hay que dar la cara siempre.

-¿Qué sintió anoche cuando puso su cabeza en la almohada?

-La misma tranquilidad que el 10 de diciembre de 2011 a la noche. A mí me han dicho de todo. Y a mi familia también. Por eso, lo primero que hice fue hablar con ellos, con los que me bancaron siempre. Estoy acostumbrado a hacer campañas casi en soledad. Pero sé con quiénes las hago. Mi familia es fundamental en mi vida política. Me digan lo que me digan. Ellos están siempre. En las mejores y en las peores. Y también hay un grupo de gente en la que confío. Que también estuvieron. Yo a veces me siento mal porque expongo demasiado a quienes más quiero. Pero dentro de todo, ayer me sentí feliz cuando vi en el palco a mi madre, a mi señora, a mis hijos. Y en un lugar que mi padre me dejó para que no tenga que andar alquilando. Así me lo dijo. Hoy lo sigo honrando, siendo como soy.

-¿Pensaba ganar de esta manera?

-Les voy a decir algo porque han hecho miles de análisis respecto al triunfo de ayer. Que se provincializó, que la gente creía que votaba otra cosa y no se cuántas pavadas más. No hay que subestimar a nadie. La gente vota de acuerdo a lo que le pasa y no a lo que le dicen. Hay una crisis dirigencial, de conducción. Hay crisis en los partidos políticos. Y si no, fíjense lo que le pasó al Justicialismo. Tuvo la peor performance de su historia. El que vota se fija en otras cosas ahora. Quiere que alguien haga algo cuando las cosas están mal. Y las cosas están mal ahora. Y entonces, la gente pone en la urna eso, su necesidad de un cambio.

-¿Qué espera del gobierno provincial después de este resultado?

-Que sepan leerlo. Que dejen de lado las miserias del poder y empiecen a trabajar para la gente. Han perseguido a intendentes y a dirigentes por el solo hecho de pensar distinto. O por estar al lado mío. Los diputados provinciales del Modelo Chubut se cansaron de pedir audiencias. Nunca los recibieron. Pero actuaron con madurez cuando tuvieron que acompañar alguna medida que beneficie a la gente. Lo que pasa con este gobierno es que confundieron unidad con amontonamiento. Nunca fueron uno solo, sino que fueron varios que querían imponer sus pensamientos. Entonces todo se fue desnaturalizando. Y hoy la gente lo está pagando.

-¿Siente rencor hacia quienes gobiernan la provincia?

-Para nada. Lo que sí puedo decirles es que nunca pensé que iba a pasar por esto. Es una sensación extraña. Yo me preparé para irme el 10 de diciembre de 2011. Hicimos la mudanza nosotros. Volvimos a nuestra casa. Fue algo normal, que esperaba. Pero nunca esperé lo que vino. Querían sacarme, borrarme, jubilarme. Pero ¿por qué?. Nunca le encontré una explicación. Yo seguí andando por la vida como siempre. Fui a los mismos lugares. Y nunca bajé los brazos. Para un político no hay capital más importante que la palabra de la gente. El que no lo entiende así, va camino al fracaso.

-Pero algo de bronca debe tener en su interior.

-Y sí. No soy hipócrita. En el gobierno hay gente nefasta, personajes que en realidad deberían quedarse en su casa. Hay responsabilidades como las del gobernador y el vice. Y actitudes que deben ser revisadas profundamente. Como las que tuvo el fiscal de Estado Blas Meza Evans, por ejemplo. Gente que no merece tener un cargo. Pero me parece que es parte de la lectura que tienen que hacer los que tienen el poder de gobernar. Sabrán hasta dónde algunos pueden tirar de la soga. Debe haber una autocrítica que, les digo, ya debería haber llegado. No alcanza con maquillar la cosa haciendo pequeños cambios. El mensaje de las urnas fue muy claro. Y espero que lo entiendan.

-¿Por qué cree que lo votaron con estos porcentajes?

-Creo que la gente compara. Para mí fue una reivindicación. Los que están, gastaron muy rápido el crédito que les da la gente a quienes toman un gobierno. No veo compromiso. Hacen política desde las gacetillas de prensa. Y mintiendo. Y a la gente se le puede mentir una vez. Pero no siempre porque se da cuenta y castiga.

-¿Está pensando en 2015, en volver a ser gobernador?

-Les voy a decir la verdad: hoy soy diputado nacional electo. Tengo ese compromiso con quienes me votaron. Más adelante veré. También quiero que esta vez mi familia forme parte de las decisiones. Estuve ocho años en el poder y dejé una provincia integrada. Inclusiva. Hoy camino por el interior y me dan ganas de llorar. ¿Si quiero volver? Tal vez sí porque veo una provincia muy distinta a la que dejé. Pero eso no me quita el sueño. Me quitan el sueño otras cosas que puedo empezar a hacer por la gente de Chubut estando en el Congreso.

-¿Cuando dice “distinta” dice peor?

-Claro. Han dejado caer muchas cosas. Miren, esto es como una planta. Cuando crece no hay que dejar de regarla. Hay que regarla todos los días. Y eso es lo que no hicieron. Hay cosas que pasan que son muy peligrosas, por ejemplo en salud. Se han equivocado, están mintiendo. Yo les pido que dejen de mentir porque ofenden a la gente.

-Se lo nota muy enojado con esta gestión.

-Cómo quieren que esté. Me hicieron de todo, me quisieron convertir en un diablo. Hasta quisieron sacar mi foto de la casa de gobierno. Y han retirado placas de inauguraciones donde figuraba mi nombre. Lo pueden comprobar. Fueron maldades que no puedo soportar. Pero la gente las reprobó. Fui gobernador 8 años y siempre mi palabra fue un contrato. Un contrato con todos los habitantes. Ahora, usan la palabra pero para mentir. Y eso la gente no lo perdona.Tres llamadosEl senador Marcelo Guinle, el gobernador Martín Buzzi y el intendente de Comodoro Rivadavia Néstor Di Pierro llamaron a Das Neves para felicitarlo por el triunfo.

-¿Qué sintió cuando vio los números en su teléfono?

-Nada, fueron llamadas protocolares. De circunstancia. Nada más que eso. También me llamaron algunos diputados provinciales del Frente para la Victoria e intendentes que no están en mi línea. Todos podrían haberme llamado antes. Tengo el mismo teléfono que cuando era gobernador. Y lo atiendo yo.

Das Neves también recibió llamados de dirigentes nacionales como Massa y Scioli. Y le realizaron reportajes por varias radios de Capital Federal como Mitre y Radio 10 en la que tuvo una larga charla con González Oro. Está invitado a varios programas políticos. Pero aún no decidió qué hacer. “Es probable que el miércoles viaje a Buenos Aires. No sé, veremos”.

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28 OCT 2013 - 22:54

-Soy un tipo duro. Lo reconozco. Pero nada revanchista. Esto no es una revancha para mí Yo miro hacia adelante. No uso el espejo retrovisor. No sirve para nada eso.

Mario Das Neves disfruta el día después a su manera. Ganó por una diferencia enorme, se quedó con las dos bancas y movió el tablero político de la provincia. Sin embargo, pide que le den los resultados de todas las localidades para saber qué pasó en cada lugar. En cada escuela, en cada mesa. Tal vez en esa obsesión por el trabajo político radique el secreto de esa catarata de votos que lo convirtió en el candidato que ganó por mayor diferencia en todo el país.

Recibió a Jornada en su casa el famoso “día después”. Y dijo: “¿Qué día después? La gente siguió trabajando, abrieron los negocios, todo fue normal. Los políticos tenemos que bajar a la tierra. Es la única manera en que vamos a poder entender la realidad. Hay quienes se meten en un frasco y después lo pagan caro. Hay que salir, caminar, ver. Hablar con todo el mundo. No hay secretos en esto. Hay que dar la cara. Pero no a veces. Hay que dar la cara siempre.

-¿Qué sintió anoche cuando puso su cabeza en la almohada?

-La misma tranquilidad que el 10 de diciembre de 2011 a la noche. A mí me han dicho de todo. Y a mi familia también. Por eso, lo primero que hice fue hablar con ellos, con los que me bancaron siempre. Estoy acostumbrado a hacer campañas casi en soledad. Pero sé con quiénes las hago. Mi familia es fundamental en mi vida política. Me digan lo que me digan. Ellos están siempre. En las mejores y en las peores. Y también hay un grupo de gente en la que confío. Que también estuvieron. Yo a veces me siento mal porque expongo demasiado a quienes más quiero. Pero dentro de todo, ayer me sentí feliz cuando vi en el palco a mi madre, a mi señora, a mis hijos. Y en un lugar que mi padre me dejó para que no tenga que andar alquilando. Así me lo dijo. Hoy lo sigo honrando, siendo como soy.

-¿Pensaba ganar de esta manera?

-Les voy a decir algo porque han hecho miles de análisis respecto al triunfo de ayer. Que se provincializó, que la gente creía que votaba otra cosa y no se cuántas pavadas más. No hay que subestimar a nadie. La gente vota de acuerdo a lo que le pasa y no a lo que le dicen. Hay una crisis dirigencial, de conducción. Hay crisis en los partidos políticos. Y si no, fíjense lo que le pasó al Justicialismo. Tuvo la peor performance de su historia. El que vota se fija en otras cosas ahora. Quiere que alguien haga algo cuando las cosas están mal. Y las cosas están mal ahora. Y entonces, la gente pone en la urna eso, su necesidad de un cambio.

-¿Qué espera del gobierno provincial después de este resultado?

-Que sepan leerlo. Que dejen de lado las miserias del poder y empiecen a trabajar para la gente. Han perseguido a intendentes y a dirigentes por el solo hecho de pensar distinto. O por estar al lado mío. Los diputados provinciales del Modelo Chubut se cansaron de pedir audiencias. Nunca los recibieron. Pero actuaron con madurez cuando tuvieron que acompañar alguna medida que beneficie a la gente. Lo que pasa con este gobierno es que confundieron unidad con amontonamiento. Nunca fueron uno solo, sino que fueron varios que querían imponer sus pensamientos. Entonces todo se fue desnaturalizando. Y hoy la gente lo está pagando.

-¿Siente rencor hacia quienes gobiernan la provincia?

-Para nada. Lo que sí puedo decirles es que nunca pensé que iba a pasar por esto. Es una sensación extraña. Yo me preparé para irme el 10 de diciembre de 2011. Hicimos la mudanza nosotros. Volvimos a nuestra casa. Fue algo normal, que esperaba. Pero nunca esperé lo que vino. Querían sacarme, borrarme, jubilarme. Pero ¿por qué?. Nunca le encontré una explicación. Yo seguí andando por la vida como siempre. Fui a los mismos lugares. Y nunca bajé los brazos. Para un político no hay capital más importante que la palabra de la gente. El que no lo entiende así, va camino al fracaso.

-Pero algo de bronca debe tener en su interior.

-Y sí. No soy hipócrita. En el gobierno hay gente nefasta, personajes que en realidad deberían quedarse en su casa. Hay responsabilidades como las del gobernador y el vice. Y actitudes que deben ser revisadas profundamente. Como las que tuvo el fiscal de Estado Blas Meza Evans, por ejemplo. Gente que no merece tener un cargo. Pero me parece que es parte de la lectura que tienen que hacer los que tienen el poder de gobernar. Sabrán hasta dónde algunos pueden tirar de la soga. Debe haber una autocrítica que, les digo, ya debería haber llegado. No alcanza con maquillar la cosa haciendo pequeños cambios. El mensaje de las urnas fue muy claro. Y espero que lo entiendan.

-¿Por qué cree que lo votaron con estos porcentajes?

-Creo que la gente compara. Para mí fue una reivindicación. Los que están, gastaron muy rápido el crédito que les da la gente a quienes toman un gobierno. No veo compromiso. Hacen política desde las gacetillas de prensa. Y mintiendo. Y a la gente se le puede mentir una vez. Pero no siempre porque se da cuenta y castiga.

-¿Está pensando en 2015, en volver a ser gobernador?

-Les voy a decir la verdad: hoy soy diputado nacional electo. Tengo ese compromiso con quienes me votaron. Más adelante veré. También quiero que esta vez mi familia forme parte de las decisiones. Estuve ocho años en el poder y dejé una provincia integrada. Inclusiva. Hoy camino por el interior y me dan ganas de llorar. ¿Si quiero volver? Tal vez sí porque veo una provincia muy distinta a la que dejé. Pero eso no me quita el sueño. Me quitan el sueño otras cosas que puedo empezar a hacer por la gente de Chubut estando en el Congreso.

-¿Cuando dice “distinta” dice peor?

-Claro. Han dejado caer muchas cosas. Miren, esto es como una planta. Cuando crece no hay que dejar de regarla. Hay que regarla todos los días. Y eso es lo que no hicieron. Hay cosas que pasan que son muy peligrosas, por ejemplo en salud. Se han equivocado, están mintiendo. Yo les pido que dejen de mentir porque ofenden a la gente.

-Se lo nota muy enojado con esta gestión.

-Cómo quieren que esté. Me hicieron de todo, me quisieron convertir en un diablo. Hasta quisieron sacar mi foto de la casa de gobierno. Y han retirado placas de inauguraciones donde figuraba mi nombre. Lo pueden comprobar. Fueron maldades que no puedo soportar. Pero la gente las reprobó. Fui gobernador 8 años y siempre mi palabra fue un contrato. Un contrato con todos los habitantes. Ahora, usan la palabra pero para mentir. Y eso la gente no lo perdona.Tres llamadosEl senador Marcelo Guinle, el gobernador Martín Buzzi y el intendente de Comodoro Rivadavia Néstor Di Pierro llamaron a Das Neves para felicitarlo por el triunfo.

-¿Qué sintió cuando vio los números en su teléfono?

-Nada, fueron llamadas protocolares. De circunstancia. Nada más que eso. También me llamaron algunos diputados provinciales del Frente para la Victoria e intendentes que no están en mi línea. Todos podrían haberme llamado antes. Tengo el mismo teléfono que cuando era gobernador. Y lo atiendo yo.

Das Neves también recibió llamados de dirigentes nacionales como Massa y Scioli. Y le realizaron reportajes por varias radios de Capital Federal como Mitre y Radio 10 en la que tuvo una larga charla con González Oro. Está invitado a varios programas políticos. Pero aún no decidió qué hacer. “Es probable que el miércoles viaje a Buenos Aires. No sé, veremos”.


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