Cooperativas de telefonía consideran imprescindible "romper el oligopolio"

Las empresas de telecomunicaciones y cooperativas denuncian un "desequilibrio" en el mercado generado por las prácticas "abusivas" y el "oligopolio" de Telefónica, Telecom y Claro.

30 MAR 2014 - 14:37 | Actualizado

El presidente de la cámara que reúne a las empresas medianas y cooperativas de telecomunicaciones, Franco Cecchini, definió la situación actual como "un ambiente de innegable abuso de posición dominante y competencia desleal".

En diálogo con Télam, dijo que "para lograr una sociedad más justa, en la cual quien más necesite de las telecomunicaciones pague menos"; es "imprescindible romper el oligopolio de hecho" conformado por los grandes grupos de comunicaciones.

Iplan, Sion, Metrored y las cooperativas entre otras tantas compañías de telecomunicaciones apuntan contra la vigencia del "CPP" o pago por llamar -por sus sigla en inglés- que deben abonar a Telefónica y a Telecom por el uso de la red que llega al cliente final.

Las tarifas telefónicas son las únicas que el Estado nacional no actualiza desde el congelamiento dispuesto tras la crisis del 2001, no tienen ningún subsidio y hoy por hoy se aplican a unos ocho millones de líneas fijas. A la vez, desde esas líneas fijas se generan llamadas a teléfonos celulares.

La tarifa telefónica sólo influye sobre el servicio básico de voz a través de redes fijas, cuyo consumo se mide por pulsos.

En los últimos años, las empresas de telefonía fija encontraron como alternativa los paquetes de servicio por los cuales ofrecen -entre otras alternatias- internet, llamadas locales gratis y televisión a través de algún tipo de asociación.

Los usuarios que adquieren estos paquetes salen del esquema de la tarifa regulada, ya que dejan de tener un servicio por pulsos y pasan a tener un servicio medido en tiempo.

"Hablá todo lo que quieras, porque la voz no ocupa la red", dijo un ejecutivo de una de las grandes empresas del sector al explicar la oferta.

Las empresas que también ofrecen telefonía fija dentro de sus servicios, por su carácter de "entrantes" al mercado, no están obligadas a cobrar a sus clientes la tarifa regulada, pero "la realidad es que los precios se acercan mucho", reconocieron.

Por el CPP, por cada minuto de una llamada cursada desde un teléfono fijo a un móvil la empresa fija paga 0,335 pesos a la de telefonía móvil.

Esta modalidad se implementó en los principios de la telefonía móvil para dar sustentabilidad a un servicio que recién despegaba.

La inamovilidad de las tarifas fijas sumado a la estrategia de paquetizar servicios y ofrecer "llamadas a celulares ilimitadas", de parte de las empresas que tienen en su portfolio la telefonía móvil, es visto por las entrantes como una "práctica predatoria".

Para Cecchini, "es necesario darle el espacio merecido a quienes invirtieron en el paí­s y que siguen invirtiendo con calidad y precio, sin prebendas ni exclusividades y a su puro riesgo, dándole trabajo a nuestro pueblo" en referencia a los "emprendedores nacionales en telecomunicaciones".

Enterate de las noticias de ECONOMIA a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.
30 MAR 2014 - 14:37

El presidente de la cámara que reúne a las empresas medianas y cooperativas de telecomunicaciones, Franco Cecchini, definió la situación actual como "un ambiente de innegable abuso de posición dominante y competencia desleal".

En diálogo con Télam, dijo que "para lograr una sociedad más justa, en la cual quien más necesite de las telecomunicaciones pague menos"; es "imprescindible romper el oligopolio de hecho" conformado por los grandes grupos de comunicaciones.

Iplan, Sion, Metrored y las cooperativas entre otras tantas compañías de telecomunicaciones apuntan contra la vigencia del "CPP" o pago por llamar -por sus sigla en inglés- que deben abonar a Telefónica y a Telecom por el uso de la red que llega al cliente final.

Las tarifas telefónicas son las únicas que el Estado nacional no actualiza desde el congelamiento dispuesto tras la crisis del 2001, no tienen ningún subsidio y hoy por hoy se aplican a unos ocho millones de líneas fijas. A la vez, desde esas líneas fijas se generan llamadas a teléfonos celulares.

La tarifa telefónica sólo influye sobre el servicio básico de voz a través de redes fijas, cuyo consumo se mide por pulsos.

En los últimos años, las empresas de telefonía fija encontraron como alternativa los paquetes de servicio por los cuales ofrecen -entre otras alternatias- internet, llamadas locales gratis y televisión a través de algún tipo de asociación.

Los usuarios que adquieren estos paquetes salen del esquema de la tarifa regulada, ya que dejan de tener un servicio por pulsos y pasan a tener un servicio medido en tiempo.

"Hablá todo lo que quieras, porque la voz no ocupa la red", dijo un ejecutivo de una de las grandes empresas del sector al explicar la oferta.

Las empresas que también ofrecen telefonía fija dentro de sus servicios, por su carácter de "entrantes" al mercado, no están obligadas a cobrar a sus clientes la tarifa regulada, pero "la realidad es que los precios se acercan mucho", reconocieron.

Por el CPP, por cada minuto de una llamada cursada desde un teléfono fijo a un móvil la empresa fija paga 0,335 pesos a la de telefonía móvil.

Esta modalidad se implementó en los principios de la telefonía móvil para dar sustentabilidad a un servicio que recién despegaba.

La inamovilidad de las tarifas fijas sumado a la estrategia de paquetizar servicios y ofrecer "llamadas a celulares ilimitadas", de parte de las empresas que tienen en su portfolio la telefonía móvil, es visto por las entrantes como una "práctica predatoria".

Para Cecchini, "es necesario darle el espacio merecido a quienes invirtieron en el paí­s y que siguen invirtiendo con calidad y precio, sin prebendas ni exclusividades y a su puro riesgo, dándole trabajo a nuestro pueblo" en referencia a los "emprendedores nacionales en telecomunicaciones".


NOTICIAS RELACIONADAS