Son Horacio Corbacho y Nicola Corradi, condenados en el histórico juicio por el abuso sexual de menores con discapacidad en el ámbito del Instituto Próvolo. En tanto, el jardinero Armando Gómez recibió una pena de 18 años de cárcel por delitos similares, también consumados en el ámbito del instituto religioso para niños hipoacúsicos.