En un acto realizado en el stand argentino, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, ratificó el "pleno compromiso" de la Argentina con el desarrollo de la energía nuclear, y reiteró los avances de los últimos años en el sector como así los proyectos en marcha.
En ese sentido, recordó que este año se inauguró la central nuclear Atucha II, recientemente rebautizada Néstor Kirchner, los 11.000 millones de dólares que se invirtieron en el sector en los últimos diez años y los 31.000 millones previstos para la próxima década.
Por su parte, el embajador chino en Austria, Jingye Cheng, recordó el acuerdo bilateral firmado por los presidentes de ambos países en julio pasado, y afirmó que "marca el comienzo de una etapa de importante cooperación de ambos países".
"China reitera su predisposición a mantener y estrechar los lazos de cooperación entre ambos países", agregó Cheng, antes de la presentación de un video explicativo sobre la obra y un lunch que incluyó comida china y un vino argentino que atrajo a numerosos visitantes.
En un aparte con la prensa, De Vido explicó: "Vamos a seguir trabajando (con China), está operativo el crédito del Belgrano Cargas, estamos en el límite del inicio de las obras de las represas hidroeléctricas Kirchner y Cepernic".
Ante una consulta de Télam sobre posibles nuevas inversiones chinas en el país, el ministro mencionó el acuerdo para la construcción de la cuarta central nuclear, así como el hecho de estar preclasificado para la quinta, y "el gran interés en realizar otros proyectos, como (la central) Chihuido y la torre de comunicaciones".
En otro orden, De Vido aseguró que "nada de lo que pase por afuera de ambos países va a condicionar los acuerdos firmados entre la Argentina y China", en referencia al fallo del juez Thomas Griesa en el caso de la demanda de los fondos buitre.
En diálogo con los periodistas argentinos que viajaron a cubrir la Conferencia General de la OIEA, enfatizó: "Estamos convencidos de que esta cuestión de los holdouts que se intenta globalizar no es tan global como la Task Force de ellos quieren hacerlo parecer; de hecho las economías rusas y china son importantísimas, tienen un peso gravitante hoy en el mundo".
En ese sentido, De Vido agregó: "Nuestra presidenta y el ex presidente Kirchner construyeron un marco de relaciones que hoy nos permiten tener autodeterminación y soberanía ante estos embates que llevan adelante no sólo los holdouts y los fondos buitre, sino fundamentalmente algunos buitres que hay en la Argentina".
Además de De Vido y Cheng, estuvieron presentes el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Yukiya Amano; el vicepresidente de la CNNC, Lu Haxiang; y los titulares de Nucleoeléctrica Argentina (NA-SA), José Luis Antúnez; y de la CNEA, Norma Boero, entre otros funcionarios y empresarios.
Consultado por Télam, Antúnez hizo hincapié en que en 2014 el sector quedó marcado por acontecimientos muy especiales como "la terminación de Atucha II, un orgullo que el proyecto que presentamos en 2006 esté terminado y funcionando, y la alianza estratégica con China para la construcción de un reactor que tendrá un gran contenido nacional".
"NA-SA ha pasado a ser de lo que era en 2003, 2004, una empresa con dos centrales envejecidas, venciendo su plazo de vida y una abandonada, a ser una empresa que hoy tiene las dos primeras con programas de extensión de su vida y la otra, terminada y en funcionamiento, y dos más para el futuro", destacó.
Y en ronda con otros periodistas, Antúnez reveló: “el tiempo estimado para la construcción de Atucha III -o Proyecto Nacional como nos gusta llamarlo- es de ocho años”, y dijo que los primeros recursos chinos llegarán “en ocho o nueve meses”, estimando que generará entre tres mil y cuatro mil puestos de trabajo en el pico de construcción, o 60 millones de horas hombre de trabajo nacional.
Por su parte, Boero dijo a Télam que era una satisfacción presentar este año la evolución del plan nuclear argentino, "desde una declaración de lo que queríamos hacer a la concreción de lo que se hizo, se concretaron Atucha II, enriquecimiento de uranio, el Carem, el lanzamiento de la cuarta central nuclear con China".
Previamente, De Vido se había reunido con el ministro de Energía de Argelia, Yusef Yusfi, con quien ratificó también la asociación entre ambos países en materia de energía nuclear, vigente desde hace casi 30 años, al suscribir distintos acuerdos de cooperación.
En el encuentro, De Vido afirmó: "La Argentina y Argelia somos viejos socios en el sector nuclear"; y Yusfi dijo: "Estamos muy contentos del grado de colaboración que mantienen los dos países, que hoy estamos incrementando con estos acuerdos".
En la reunión, que se llevó a cabo en las oficinas que la Argentina posee en el Centro de Convenciones de Viena, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y su par argelina suscribieron un acuerdo por el cual la Argentina va a brindar asistencia para la formación de recursos humanos para el desarrollo de instalaciones nucleares, así como para el emplazamiento de una nueva central en ese país.
La Argentina vendió a Argelia en 1985 un reactor de investigación y una planta de fabricación de combustibles, y el INVAP firmó un contrato para la construcción de una planta de producción de radioisótopos, la ampliación de la planta de combustibles y la eventual repotenciación del actual reactor, obras que implican inversiones por 100 millones de dólares, sin contar el reactor.
Además, De Vido se reunió con el viceministro de Industria e Información de China y director de la Agencia China de Energía Atómica (CAEA, en inglés), Xu Dazhe, y el vicepresidente de la Corporación Nacional Nuclear China (CNNC, en inglés), Lu Huaxiang.
En un acto realizado en el stand argentino, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, ratificó el "pleno compromiso" de la Argentina con el desarrollo de la energía nuclear, y reiteró los avances de los últimos años en el sector como así los proyectos en marcha.
En ese sentido, recordó que este año se inauguró la central nuclear Atucha II, recientemente rebautizada Néstor Kirchner, los 11.000 millones de dólares que se invirtieron en el sector en los últimos diez años y los 31.000 millones previstos para la próxima década.
Por su parte, el embajador chino en Austria, Jingye Cheng, recordó el acuerdo bilateral firmado por los presidentes de ambos países en julio pasado, y afirmó que "marca el comienzo de una etapa de importante cooperación de ambos países".
"China reitera su predisposición a mantener y estrechar los lazos de cooperación entre ambos países", agregó Cheng, antes de la presentación de un video explicativo sobre la obra y un lunch que incluyó comida china y un vino argentino que atrajo a numerosos visitantes.
En un aparte con la prensa, De Vido explicó: "Vamos a seguir trabajando (con China), está operativo el crédito del Belgrano Cargas, estamos en el límite del inicio de las obras de las represas hidroeléctricas Kirchner y Cepernic".
Ante una consulta de Télam sobre posibles nuevas inversiones chinas en el país, el ministro mencionó el acuerdo para la construcción de la cuarta central nuclear, así como el hecho de estar preclasificado para la quinta, y "el gran interés en realizar otros proyectos, como (la central) Chihuido y la torre de comunicaciones".
En otro orden, De Vido aseguró que "nada de lo que pase por afuera de ambos países va a condicionar los acuerdos firmados entre la Argentina y China", en referencia al fallo del juez Thomas Griesa en el caso de la demanda de los fondos buitre.
En diálogo con los periodistas argentinos que viajaron a cubrir la Conferencia General de la OIEA, enfatizó: "Estamos convencidos de que esta cuestión de los holdouts que se intenta globalizar no es tan global como la Task Force de ellos quieren hacerlo parecer; de hecho las economías rusas y china son importantísimas, tienen un peso gravitante hoy en el mundo".
En ese sentido, De Vido agregó: "Nuestra presidenta y el ex presidente Kirchner construyeron un marco de relaciones que hoy nos permiten tener autodeterminación y soberanía ante estos embates que llevan adelante no sólo los holdouts y los fondos buitre, sino fundamentalmente algunos buitres que hay en la Argentina".
Además de De Vido y Cheng, estuvieron presentes el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Yukiya Amano; el vicepresidente de la CNNC, Lu Haxiang; y los titulares de Nucleoeléctrica Argentina (NA-SA), José Luis Antúnez; y de la CNEA, Norma Boero, entre otros funcionarios y empresarios.
Consultado por Télam, Antúnez hizo hincapié en que en 2014 el sector quedó marcado por acontecimientos muy especiales como "la terminación de Atucha II, un orgullo que el proyecto que presentamos en 2006 esté terminado y funcionando, y la alianza estratégica con China para la construcción de un reactor que tendrá un gran contenido nacional".
"NA-SA ha pasado a ser de lo que era en 2003, 2004, una empresa con dos centrales envejecidas, venciendo su plazo de vida y una abandonada, a ser una empresa que hoy tiene las dos primeras con programas de extensión de su vida y la otra, terminada y en funcionamiento, y dos más para el futuro", destacó.
Y en ronda con otros periodistas, Antúnez reveló: “el tiempo estimado para la construcción de Atucha III -o Proyecto Nacional como nos gusta llamarlo- es de ocho años”, y dijo que los primeros recursos chinos llegarán “en ocho o nueve meses”, estimando que generará entre tres mil y cuatro mil puestos de trabajo en el pico de construcción, o 60 millones de horas hombre de trabajo nacional.
Por su parte, Boero dijo a Télam que era una satisfacción presentar este año la evolución del plan nuclear argentino, "desde una declaración de lo que queríamos hacer a la concreción de lo que se hizo, se concretaron Atucha II, enriquecimiento de uranio, el Carem, el lanzamiento de la cuarta central nuclear con China".
Previamente, De Vido se había reunido con el ministro de Energía de Argelia, Yusef Yusfi, con quien ratificó también la asociación entre ambos países en materia de energía nuclear, vigente desde hace casi 30 años, al suscribir distintos acuerdos de cooperación.
En el encuentro, De Vido afirmó: "La Argentina y Argelia somos viejos socios en el sector nuclear"; y Yusfi dijo: "Estamos muy contentos del grado de colaboración que mantienen los dos países, que hoy estamos incrementando con estos acuerdos".
En la reunión, que se llevó a cabo en las oficinas que la Argentina posee en el Centro de Convenciones de Viena, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y su par argelina suscribieron un acuerdo por el cual la Argentina va a brindar asistencia para la formación de recursos humanos para el desarrollo de instalaciones nucleares, así como para el emplazamiento de una nueva central en ese país.
La Argentina vendió a Argelia en 1985 un reactor de investigación y una planta de fabricación de combustibles, y el INVAP firmó un contrato para la construcción de una planta de producción de radioisótopos, la ampliación de la planta de combustibles y la eventual repotenciación del actual reactor, obras que implican inversiones por 100 millones de dólares, sin contar el reactor.
Además, De Vido se reunió con el viceministro de Industria e Información de China y director de la Agencia China de Energía Atómica (CAEA, en inglés), Xu Dazhe, y el vicepresidente de la Corporación Nacional Nuclear China (CNNC, en inglés), Lu Huaxiang.