Ana Prada ejerce "la libertad de vestir libremente a la canción"
La cantautora uruguaya, que irrumpió hace una década en la escena musical con su novedosa caligrafía como compositora, enfatizó -en la antesala de su presentación del viernes en el Parador Konex de la Capital Federal- los criterios de su búsqueda estética.
"Hay un rumbo generacional que se va definiendo con mucho compositor y mucha mujer escribiendo a ambos margenes del Río de la Plata. Hay una búsqueda de instrumentos latinoamericanos, mucha experimentación libre. Venciendo los preconceptos", afirmó Prada en diálogo con Télam.
Con esos criterios estéticos, la cantora se presentará el viernes desde las 21 en el Parador Konex, (Sarmiento 3131) en un concierto en que el sintetizará sus tres elogiados discos solistas, Soy Sola (2006), Soy Pecadora (2009) y Soy Otra (2013), además de presentar composiciones inéditas.
La acompañará una formación tímbrica con Juan de Benedictis (guitarra), Ariel Polenta (piano), Julián Semprini (batería) y Paco Arancibia (bajo).
"Habrá una recorrida por los tres discos, más algún ´cover´ y algunos invitados. Es un lujo porque comparto el ciclo con otros admirados artistas uruguayos y le daremos un desenlace veraniego, bailable, con la posibilidad de compartir con el público", adelantó Prada.
El ciclo del Parador Konex continuará con otros dos exponentes de la tradición popular de la música uruguaya: el 13 de marzo con Fernando Cabrera, uno de los creadores más lúcidos de este tiempo, y el 14 con Jaime Ross, emblema de la música rioplatense.
Acaso en esa misma línea, con un sonido más litoraleño, Prada se inscribe entre esos recorridos, a pesar de su tardía carrera en el circuito de la música profesional.
Nacida y criada en la ciudad de Paysandú, padeció el mandato familiar de seguir una carrera universitaria y en 1992 se trasladó a Montevideo para estudiar psicología.
Si inserción profesional comenzó en el año 1994 cuando se sumó como corista al grupo de su primo Daniel Drexler (La Caldera).
Fue el puntapié de una vida por los escenarios donde compartió músicas con León Gieco, Lisandro Aristimuño, Liliana Herrero, Rubén Rada, Kevin Johanssen, Javier Malosetti, Yusa y Jorge Drexler, entre muchos otros.
"Yo estudiaba psicología y me animé al desafío del canto colectivo. El primer disco solista, 'Soy sola', fue una prueba para mi porque me animé a desatar un proceso de composición. La verdad es que nunca busqué en forma consciente una carrera solista. Siempre estoy como entonces: preguntándome como ha cambiado la vida, casi sin querer queriendo".
"No sé si uno cambia la esencia y la impronta con los años. Porque uno lleva una memoria musical, pero es verdad que me he encontrado y compartido con artistas enormes que te dejan muchísimas enseñanzas", agregó.
Finalmente, Prada adelantó que trabaja con esmero en "tirar ideas" para un nuevo álbum que, asegura, no abandonará la marca de "mucha composición propia y mucha coautoría", con la intención de capitalizar la riqueza propia e irremplazable del arte en colaboración.
"Hay un rumbo generacional que se va definiendo con mucho compositor y mucha mujer escribiendo a ambos margenes del Río de la Plata. Hay una búsqueda de instrumentos latinoamericanos, mucha experimentación libre. Venciendo los preconceptos", afirmó Prada en diálogo con Télam.
Con esos criterios estéticos, la cantora se presentará el viernes desde las 21 en el Parador Konex, (Sarmiento 3131) en un concierto en que el sintetizará sus tres elogiados discos solistas, Soy Sola (2006), Soy Pecadora (2009) y Soy Otra (2013), además de presentar composiciones inéditas.
La acompañará una formación tímbrica con Juan de Benedictis (guitarra), Ariel Polenta (piano), Julián Semprini (batería) y Paco Arancibia (bajo).
"Habrá una recorrida por los tres discos, más algún ´cover´ y algunos invitados. Es un lujo porque comparto el ciclo con otros admirados artistas uruguayos y le daremos un desenlace veraniego, bailable, con la posibilidad de compartir con el público", adelantó Prada.
El ciclo del Parador Konex continuará con otros dos exponentes de la tradición popular de la música uruguaya: el 13 de marzo con Fernando Cabrera, uno de los creadores más lúcidos de este tiempo, y el 14 con Jaime Ross, emblema de la música rioplatense.
Acaso en esa misma línea, con un sonido más litoraleño, Prada se inscribe entre esos recorridos, a pesar de su tardía carrera en el circuito de la música profesional.
Nacida y criada en la ciudad de Paysandú, padeció el mandato familiar de seguir una carrera universitaria y en 1992 se trasladó a Montevideo para estudiar psicología.
Si inserción profesional comenzó en el año 1994 cuando se sumó como corista al grupo de su primo Daniel Drexler (La Caldera).
Fue el puntapié de una vida por los escenarios donde compartió músicas con León Gieco, Lisandro Aristimuño, Liliana Herrero, Rubén Rada, Kevin Johanssen, Javier Malosetti, Yusa y Jorge Drexler, entre muchos otros.
"Yo estudiaba psicología y me animé al desafío del canto colectivo. El primer disco solista, 'Soy sola', fue una prueba para mi porque me animé a desatar un proceso de composición. La verdad es que nunca busqué en forma consciente una carrera solista. Siempre estoy como entonces: preguntándome como ha cambiado la vida, casi sin querer queriendo".
"No sé si uno cambia la esencia y la impronta con los años. Porque uno lleva una memoria musical, pero es verdad que me he encontrado y compartido con artistas enormes que te dejan muchísimas enseñanzas", agregó.
Finalmente, Prada adelantó que trabaja con esmero en "tirar ideas" para un nuevo álbum que, asegura, no abandonará la marca de "mucha composición propia y mucha coautoría", con la intención de capitalizar la riqueza propia e irremplazable del arte en colaboración.