
Y liberó al lonko Facundo Jones Huala, acusado en el país trasandino de tenencia ilegal de armas de fabricación artesanal y de municiones, incendio de un inmueble en zona rural e infracción a la Ley de Extranjería al haber ingresado a ese país de modo clandestino. La causa data de enero de 2013, con fuga a Argentina tras no haber asistido a una audiencia en octubre de 2014.
Hoy a las 12 se leerá toda la sentencia en la sede del Juzgado, con sus fundamentos. Otranto hizo lugar a la mayoría de los planteos de las defensoras, Elizabeth Gómez Alcorta y Sonia Ivanoff, que plantearon que el proceso desde su inicio estaba viciado de nulidad. La audiencia se desarrolló normalmente.
Otranto declaró la nulidad del informe presentado el 10 de febrero de 2015 por la División de Investigaciones de Esquel, que originó el proceso judicial, consecuencia de la actuación policial. Archivó ese expediente y la caratuló de “viciada de nulidad”.
Jones Huala no sólo salió de la Unidad 14. En la causa provincial, el juez Martín Zacchino también lo dejó libre. Tenía arresto domiciliario en la casa de su abuela.
Otranto ordenó la extracción de testimonio para investigar el delito de acción pública del que habría sido víctima Gonzalo Cabrera, joven detenido en Gualjaina en 2015 después de un robo en la estación de servicio. Rechazó su posible falso testimonio, También pidió investigar el delito de acción pública cometido durante la audiencia de Pablo Carrizo y Víctor Osvaldo Veloso.
Hubo alegría de la comunidad mapuche adentro y afuera del recinto. Tras el fallo, personal del Servicio Penitenciario Federal se llevó a la U-14 al Lonko Jones Huala, mientras la comunidad festejaba con llantos y cánticos.
Su abogada Gómez Alcorta indicó con felicidad que quedó en el proceso una “trama al descubierto” con acciones y diligencias ilegales, tormento y persecución que sucede cotidianamente en todos los pueblos y comunidades en todo el país.
“Hay algunos resquicios que aún nos da el sistema para poder lograr un poco de justicia”, dijo. “Hoy Facundo no tiene orden de detención en su contra”.
La abogada también defiende a Milagro Sala. Dijo que hubo cuestiones irregulares por parte de la Policía y funcionarios provinciales y judiciales, que revelaron una persecución y violencia institucional con eje en un joven “torturado” para que declare en contra de Jones Huala con la complicidad del juez José Colabelli.
Indicó que Chile pidió la extradición cuando tuvo la información que se extrajo, según Gómez Alcorta, bajo tormento y gracias al agente de la ex-SIDE que trabajó ilegalmente y que sólo investigó a las comunidades, a Jones Huala y a vecinos de Esquel.
Antes del alegato, del fallo y de la palabra final de Jones Huala compareció ante el juez el oficial Pablo Carrizo, responsable de la Brigada de Investigaciones de la Policía en la cordillera. Debió responder un puntual cuestionario que prepararon las defensoras, factor que habría inclinado la decisión de liberar al líder mapuche. Esto, por el interrogatorio a Gonzalo Cabrera de Gualjaina, hecho según el joven bajo presión y golpes. Para la defensa fue un procedimiento ilegal.
La exposición de la fiscal federal Silvina Ávila fue más breve y en la audiencia en Gendarmería se tenía como carente de argumentos que pudieran convencer a Otranto.
“Dar la vida”
Jones Huala, antes del fallo, sostuvo que seguiría militando “preso o libre” y peleando por la liberación del pueblo mapuche. Se contactará con sus vínculos con las organizaciones políticas radicalizadas del pueblo mapuche.
“Tengo una responsabilidad como lonko; soy un luchador político y social”, expresó. Reivindicó la violencia política pero comentó que no es la violencia lo que la comunidad busca. Pero si no queda otra alternativa, lo hará.
“Lamentablemente ambos Estados (Argentina y Chile) no nos han dado alternativas”, dijo Jones Huala.
Agregó que la comunidad mapuche está en medio de un conflicto político. “Tenemos una idea como mapuche y los Estados capitalistas tienen otra”.
Presos políticos
Advirtió que en Chile y Argentina hay presos políticos. “Los mapuches hoy politizados conscientes de las derechos políticos y territoriales, estamos dentro de ese paradigma, y de un conflicto territorial donde demandamos por nuestros derechos. Luchamos por la transformación de la realidad. Somos pobres, marginados y nadie respeta nuestros derechos”.
Reiteró ante su gente Jones Huala que desde pequeño sufre hostigamiento y nadie los ayudaba.
“No luchamos por la destrucción del Estado. Pero vamos a transformar esta realidad; queremos la tierra de ambos lados de la Cordillera, recuperarla para seguir siendo lo que fuimos”.
“Vamos a luchar hasta el último día de nuestras vidas, si es necesario para expulsar a las empresas trasnacionales”, aseveró el dirigente mapuche. “Estoy dispuesto a dar la vida por mi pueblo”.#

Y liberó al lonko Facundo Jones Huala, acusado en el país trasandino de tenencia ilegal de armas de fabricación artesanal y de municiones, incendio de un inmueble en zona rural e infracción a la Ley de Extranjería al haber ingresado a ese país de modo clandestino. La causa data de enero de 2013, con fuga a Argentina tras no haber asistido a una audiencia en octubre de 2014.
Hoy a las 12 se leerá toda la sentencia en la sede del Juzgado, con sus fundamentos. Otranto hizo lugar a la mayoría de los planteos de las defensoras, Elizabeth Gómez Alcorta y Sonia Ivanoff, que plantearon que el proceso desde su inicio estaba viciado de nulidad. La audiencia se desarrolló normalmente.
Otranto declaró la nulidad del informe presentado el 10 de febrero de 2015 por la División de Investigaciones de Esquel, que originó el proceso judicial, consecuencia de la actuación policial. Archivó ese expediente y la caratuló de “viciada de nulidad”.
Jones Huala no sólo salió de la Unidad 14. En la causa provincial, el juez Martín Zacchino también lo dejó libre. Tenía arresto domiciliario en la casa de su abuela.
Otranto ordenó la extracción de testimonio para investigar el delito de acción pública del que habría sido víctima Gonzalo Cabrera, joven detenido en Gualjaina en 2015 después de un robo en la estación de servicio. Rechazó su posible falso testimonio, También pidió investigar el delito de acción pública cometido durante la audiencia de Pablo Carrizo y Víctor Osvaldo Veloso.
Hubo alegría de la comunidad mapuche adentro y afuera del recinto. Tras el fallo, personal del Servicio Penitenciario Federal se llevó a la U-14 al Lonko Jones Huala, mientras la comunidad festejaba con llantos y cánticos.
Su abogada Gómez Alcorta indicó con felicidad que quedó en el proceso una “trama al descubierto” con acciones y diligencias ilegales, tormento y persecución que sucede cotidianamente en todos los pueblos y comunidades en todo el país.
“Hay algunos resquicios que aún nos da el sistema para poder lograr un poco de justicia”, dijo. “Hoy Facundo no tiene orden de detención en su contra”.
La abogada también defiende a Milagro Sala. Dijo que hubo cuestiones irregulares por parte de la Policía y funcionarios provinciales y judiciales, que revelaron una persecución y violencia institucional con eje en un joven “torturado” para que declare en contra de Jones Huala con la complicidad del juez José Colabelli.
Indicó que Chile pidió la extradición cuando tuvo la información que se extrajo, según Gómez Alcorta, bajo tormento y gracias al agente de la ex-SIDE que trabajó ilegalmente y que sólo investigó a las comunidades, a Jones Huala y a vecinos de Esquel.
Antes del alegato, del fallo y de la palabra final de Jones Huala compareció ante el juez el oficial Pablo Carrizo, responsable de la Brigada de Investigaciones de la Policía en la cordillera. Debió responder un puntual cuestionario que prepararon las defensoras, factor que habría inclinado la decisión de liberar al líder mapuche. Esto, por el interrogatorio a Gonzalo Cabrera de Gualjaina, hecho según el joven bajo presión y golpes. Para la defensa fue un procedimiento ilegal.
La exposición de la fiscal federal Silvina Ávila fue más breve y en la audiencia en Gendarmería se tenía como carente de argumentos que pudieran convencer a Otranto.
“Dar la vida”
Jones Huala, antes del fallo, sostuvo que seguiría militando “preso o libre” y peleando por la liberación del pueblo mapuche. Se contactará con sus vínculos con las organizaciones políticas radicalizadas del pueblo mapuche.
“Tengo una responsabilidad como lonko; soy un luchador político y social”, expresó. Reivindicó la violencia política pero comentó que no es la violencia lo que la comunidad busca. Pero si no queda otra alternativa, lo hará.
“Lamentablemente ambos Estados (Argentina y Chile) no nos han dado alternativas”, dijo Jones Huala.
Agregó que la comunidad mapuche está en medio de un conflicto político. “Tenemos una idea como mapuche y los Estados capitalistas tienen otra”.
Presos políticos
Advirtió que en Chile y Argentina hay presos políticos. “Los mapuches hoy politizados conscientes de las derechos políticos y territoriales, estamos dentro de ese paradigma, y de un conflicto territorial donde demandamos por nuestros derechos. Luchamos por la transformación de la realidad. Somos pobres, marginados y nadie respeta nuestros derechos”.
Reiteró ante su gente Jones Huala que desde pequeño sufre hostigamiento y nadie los ayudaba.
“No luchamos por la destrucción del Estado. Pero vamos a transformar esta realidad; queremos la tierra de ambos lados de la Cordillera, recuperarla para seguir siendo lo que fuimos”.
“Vamos a luchar hasta el último día de nuestras vidas, si es necesario para expulsar a las empresas trasnacionales”, aseveró el dirigente mapuche. “Estoy dispuesto a dar la vida por mi pueblo”.#