Detuvieron a tres policías por el secuestro de un gitano
Tres efectivos de la comisaría 12da. de la Policía Federal (PFA) de la Ciudad de Buenos Aires fueron detenidos como partícipes del secuestro extorsivo de un comerciante de la comunidad gitana en el que se pagaron 17.000 dólares de rescate, y por el cual también fue apresada la esposa de la víctima como presunta "entregadora".
Fuentes policiales y judiciales informaron hoy que que los efectivos detenidos son un oficial y dos suboficiales, todos pertenecientes a la brigada de la seccional 12, ubicada en el barrio porteño de Caballito.
La detención estuvo a cargo de detectives de la División Operativa Central (ex Antisecuestros) de la PFA, quienes anoche allanaron la mencionada comisaría localizada en la calle Valle 1454, de la Capital Federal.
Los procedimientos fueron ordenados por el juez federal porteño Claudio Bonadio a pedido del fiscal federal que instruyó la causa por el secuestro extorsivo, Carlos Rívolo.
Los policías detenidos fueron identificados como el inspector Gonzalo González -jefe de la brigada-, y los cabos primeros Carlos Arnaldo Molas y Antonio Ezequiel Vecchio.
Los voceros agregaron que la cuarta detención fue la de la mujer de la víctima, también gitana, identificada como Malvina Verónica Silvina Sasma (28) quien de acuerdo a la investigación de la fiscalía tuvo un grado de participación al aportar datos a los policías para concretar el secuestro extorsivo.
El secuestro ocurrió la noche del 25 de junio pasado y tuvo como víctima al comerciante identificado como Gustavo Mateo (25).
Mateo, quien tiene domicilio en un edificio de la avenida Directorio al 1200 de Caballito, fue secuestrado por una banda que exigió un rescate por su liberación.
El pago fue de 17.000 dólares y fue efectuado por la propia Sasma que ahora quedó detenida como supuesta cómplice de la banda.
Además del procedimiento en la comisaría 12, el fiscal Rívolo también ordenó allanar los domicilios particulares de los tres policías imputados, algunos de ellos vía exhorto en los partidos bonaerenses de Quilmes y Lomas de Zamora.
En la comisaría 12, los detectives secuestraron los tres equipos de radiocomunicación que usaban los policías, sus tres equipos Nextel y seis celulares.
También fueron inspeccionados la oficina de la brigada, sus lockers personales y los vehículos que utilizaban, dos autos y una motocicleta.
Los cuatro quedaron alojados en la alcaidía de los tribunales federales de Retiro, a la espera de que sean indagados por el delito de "secuestro extorsivo triplemente agravado" por el cobro del rescate, por el número de intervinientes y por la participación de miembros de una fuerza de seguridad.
Fuentes policiales y judiciales informaron hoy que que los efectivos detenidos son un oficial y dos suboficiales, todos pertenecientes a la brigada de la seccional 12, ubicada en el barrio porteño de Caballito.
La detención estuvo a cargo de detectives de la División Operativa Central (ex Antisecuestros) de la PFA, quienes anoche allanaron la mencionada comisaría localizada en la calle Valle 1454, de la Capital Federal.
Los procedimientos fueron ordenados por el juez federal porteño Claudio Bonadio a pedido del fiscal federal que instruyó la causa por el secuestro extorsivo, Carlos Rívolo.
Los policías detenidos fueron identificados como el inspector Gonzalo González -jefe de la brigada-, y los cabos primeros Carlos Arnaldo Molas y Antonio Ezequiel Vecchio.
Los voceros agregaron que la cuarta detención fue la de la mujer de la víctima, también gitana, identificada como Malvina Verónica Silvina Sasma (28) quien de acuerdo a la investigación de la fiscalía tuvo un grado de participación al aportar datos a los policías para concretar el secuestro extorsivo.
El secuestro ocurrió la noche del 25 de junio pasado y tuvo como víctima al comerciante identificado como Gustavo Mateo (25).
Mateo, quien tiene domicilio en un edificio de la avenida Directorio al 1200 de Caballito, fue secuestrado por una banda que exigió un rescate por su liberación.
El pago fue de 17.000 dólares y fue efectuado por la propia Sasma que ahora quedó detenida como supuesta cómplice de la banda.
Además del procedimiento en la comisaría 12, el fiscal Rívolo también ordenó allanar los domicilios particulares de los tres policías imputados, algunos de ellos vía exhorto en los partidos bonaerenses de Quilmes y Lomas de Zamora.
En la comisaría 12, los detectives secuestraron los tres equipos de radiocomunicación que usaban los policías, sus tres equipos Nextel y seis celulares.
También fueron inspeccionados la oficina de la brigada, sus lockers personales y los vehículos que utilizaban, dos autos y una motocicleta.
Los cuatro quedaron alojados en la alcaidía de los tribunales federales de Retiro, a la espera de que sean indagados por el delito de "secuestro extorsivo triplemente agravado" por el cobro del rescate, por el número de intervinientes y por la participación de miembros de una fuerza de seguridad.