El número dos el mundo necesitó dos horas y seis minutos sobre el Rod Laver Arena para vencer por cuarta vez en su carrera al "Peque" y dio un nuevo paso hacia el objetivo de lograr su octavo título en el "Major" australiano, del que es su máximo ganador histórico.
El balcánico, campeón en las ediciones 2008, 2011, 2012, 2013, 2015, 2016 y 2019, enfrentará en cuartos de final al canadiense Milos Raonic, quien venció al croata Marin Cilic por 6-4, 6-3 y 7-5 en otro partido de la jornada.
Schwartzman, de 27 años, igualó esta temporada su mejor participación en Melbourne, al empardar la cuarta ronda alcanzada dos años atrás cuando fue eliminado por el español Rafael Nadal.
Después de sufrir su cuarta derrota ante "Nole", como sucedió en el US Open 2014, Roland Garros 2017 y Roma 2019, el argentino aceptó que su rival atraviesa un gran momento y eso hace "casi imposible" vencerlo.
“Jugar contra un tenista como Djokovic es algo muy difícil, y a veces cuando entrás a la cancha y lo ves jugando en uno de sus mejores momentos, empezás a buscar soluciones y no las encontrás tan fácil, cuando están arriba en el marcador, se sienten cómodos y terminan sacando diferencia. Cuando están en su mejor nivel, son superiores al resto”, destacó el número 14 del ranking mundial de tenis.
Tras un excelente inicio en el torneo, donde no cedió un solo set, Schwartzman calificó de inoportuno el cruce y lamentó no tener rivales más competitivos previo a enfrentar al siete veces campeón en Australia: “Tuve la suerte de jugar muy bien las primeras tres rondas, contra rivales obviamente muy difíciles porque es un Grand Slam, pero me faltó tener un partido con un rival con el nivel un poco más parecido al de Djokovic, para entender que quizás con sólo tirarla para el otro lado, en varios pasajes del partido, no alcanzaba”.
Schwartzman admitió que enfrentar al jugador más ganador del torneo es equiparable “a jugar contra Nadal en Roland Garros o Federer en Wimbledon” y que para ganarles “hay que estar a un 120 por ciento".
“Hay momentos como el de hoy, que él puede ser más duro, como Rafa en Roland Garros o como Federer en Wimbledon. Cualquier de los tres, cuando están bien y afilados y el rival no está al 120 por ciento, es difícil encontrar soluciones”, asumió el porteño, que nunca le pudo ganar a un tenista top cinco en 22 enfrentamientos disputados.
Es la sexta vez que el campeón de tres títulos ATP disputa el Abierto de Australia y el público australiano demostró apoyar al argentino en varios pasajes del partido, por lo que se sintió agradecido: “Está bueno que la gente me demuestre su cariño. Los últimos años me fue regular y bien aquí, y el público australiano que le gusta el tenis, y lo ve durante todo el año, repite el torneo, eso hace que te vean más seguido y les gusta. Cuando las cosas salen bien dentro de la cancha, tengo un juego que está bueno para ver, de pasar las bolas y jugar los puntos, y la gente se puede entretener con eso”.
A pesar de la derrota, Schwartzman se fue conforme con lo hecho durante el torneo y espera seguir aprendiendo de cara al futuro. “En todo momento me faltó un poquito de algo, sacar mejor, en otros cuando él estaba muy preciso en la línea de fondo, ser un poco más agresivo. No tuve muchas chances en cada set. El siempre fue arriba y jugando mejor. Igual fue un muy buen torneo para mí y para seguir aprendiendo”.
Por otra parte, el suizo Roger Federer, número tres del ranking ATP y seis veces ganador en Melbourne (2004, 2006, 2007, 2010, 2017 y 2018), se instaló en cuartos de final con una victoria sobre el húngaro Marton Fucsovics por 4-6, 6-1, 6-2 y 6-2.
Su rival en la siguiente instancia será el estadounidense Tennys Sandgren, que se impuso sobre el duodécimo preclasificado, el italiano Fabio Fognini por 7-6 (5), 7-5, 6-7 (2) y 6-4.
El cuadro de cuartos de final masculino se completará mañana después de los siguientes cruces: Rafael Nadal (España, 1)-Nick Kirgyos (Australia, 23); Gael Monfils (Francia, 10)-Dominic Thiem (Austria, 5); Daniil Medvedev (Rusia, 4)-Stanislas Wawrinka (Suiza, 15) y Andrey Rublev (Rusia, 17)-Alexander Zverev (Alemania, 7).
El número dos el mundo necesitó dos horas y seis minutos sobre el Rod Laver Arena para vencer por cuarta vez en su carrera al "Peque" y dio un nuevo paso hacia el objetivo de lograr su octavo título en el "Major" australiano, del que es su máximo ganador histórico.
El balcánico, campeón en las ediciones 2008, 2011, 2012, 2013, 2015, 2016 y 2019, enfrentará en cuartos de final al canadiense Milos Raonic, quien venció al croata Marin Cilic por 6-4, 6-3 y 7-5 en otro partido de la jornada.
Schwartzman, de 27 años, igualó esta temporada su mejor participación en Melbourne, al empardar la cuarta ronda alcanzada dos años atrás cuando fue eliminado por el español Rafael Nadal.
Después de sufrir su cuarta derrota ante "Nole", como sucedió en el US Open 2014, Roland Garros 2017 y Roma 2019, el argentino aceptó que su rival atraviesa un gran momento y eso hace "casi imposible" vencerlo.
“Jugar contra un tenista como Djokovic es algo muy difícil, y a veces cuando entrás a la cancha y lo ves jugando en uno de sus mejores momentos, empezás a buscar soluciones y no las encontrás tan fácil, cuando están arriba en el marcador, se sienten cómodos y terminan sacando diferencia. Cuando están en su mejor nivel, son superiores al resto”, destacó el número 14 del ranking mundial de tenis.
Tras un excelente inicio en el torneo, donde no cedió un solo set, Schwartzman calificó de inoportuno el cruce y lamentó no tener rivales más competitivos previo a enfrentar al siete veces campeón en Australia: “Tuve la suerte de jugar muy bien las primeras tres rondas, contra rivales obviamente muy difíciles porque es un Grand Slam, pero me faltó tener un partido con un rival con el nivel un poco más parecido al de Djokovic, para entender que quizás con sólo tirarla para el otro lado, en varios pasajes del partido, no alcanzaba”.
Schwartzman admitió que enfrentar al jugador más ganador del torneo es equiparable “a jugar contra Nadal en Roland Garros o Federer en Wimbledon” y que para ganarles “hay que estar a un 120 por ciento".
“Hay momentos como el de hoy, que él puede ser más duro, como Rafa en Roland Garros o como Federer en Wimbledon. Cualquier de los tres, cuando están bien y afilados y el rival no está al 120 por ciento, es difícil encontrar soluciones”, asumió el porteño, que nunca le pudo ganar a un tenista top cinco en 22 enfrentamientos disputados.
Es la sexta vez que el campeón de tres títulos ATP disputa el Abierto de Australia y el público australiano demostró apoyar al argentino en varios pasajes del partido, por lo que se sintió agradecido: “Está bueno que la gente me demuestre su cariño. Los últimos años me fue regular y bien aquí, y el público australiano que le gusta el tenis, y lo ve durante todo el año, repite el torneo, eso hace que te vean más seguido y les gusta. Cuando las cosas salen bien dentro de la cancha, tengo un juego que está bueno para ver, de pasar las bolas y jugar los puntos, y la gente se puede entretener con eso”.
A pesar de la derrota, Schwartzman se fue conforme con lo hecho durante el torneo y espera seguir aprendiendo de cara al futuro. “En todo momento me faltó un poquito de algo, sacar mejor, en otros cuando él estaba muy preciso en la línea de fondo, ser un poco más agresivo. No tuve muchas chances en cada set. El siempre fue arriba y jugando mejor. Igual fue un muy buen torneo para mí y para seguir aprendiendo”.
Por otra parte, el suizo Roger Federer, número tres del ranking ATP y seis veces ganador en Melbourne (2004, 2006, 2007, 2010, 2017 y 2018), se instaló en cuartos de final con una victoria sobre el húngaro Marton Fucsovics por 4-6, 6-1, 6-2 y 6-2.
Su rival en la siguiente instancia será el estadounidense Tennys Sandgren, que se impuso sobre el duodécimo preclasificado, el italiano Fabio Fognini por 7-6 (5), 7-5, 6-7 (2) y 6-4.
El cuadro de cuartos de final masculino se completará mañana después de los siguientes cruces: Rafael Nadal (España, 1)-Nick Kirgyos (Australia, 23); Gael Monfils (Francia, 10)-Dominic Thiem (Austria, 5); Daniil Medvedev (Rusia, 4)-Stanislas Wawrinka (Suiza, 15) y Andrey Rublev (Rusia, 17)-Alexander Zverev (Alemania, 7).