A la sala de hemodiálisis de Trelew la conforman 21 camas. El tratamiento ofrece una buena calidad de vida y le permite a las personas que esperan un trasplante, poder continuar con sus vidas. “Una vez que comienza el tratamiento de Hemodiálisis no se corta porque el riñón sigue necesitando de ese porcentaje de funcionabilidad que es suministrado”, explica Amalia Whon, una de las enfermeras encargadas.
Tal es el caso de Ariana Cabrera, una joven paciente con insuficiencia renal crónica desde los 6 años. Después de haber padecido el Covid-19 la función de su riñón emporó y la llevo a tener que tratarse con Hemodiálisis.
La mayoría espera un trasplante: “Es importante cómo está preparado el paciente internamente para que pueda acceder al trasplante”, aclara Whon: “La espera es muy larga. En ese trascurrir se mesclan muchas emociones: frustraciones y éxito, todo junto en la misma persona”.
A la sala de hemodiálisis de Trelew la conforman 21 camas. El tratamiento ofrece una buena calidad de vida y le permite a las personas que esperan un trasplante, poder continuar con sus vidas. “Una vez que comienza el tratamiento de Hemodiálisis no se corta porque el riñón sigue necesitando de ese porcentaje de funcionabilidad que es suministrado”, explica Amalia Whon, una de las enfermeras encargadas.
Tal es el caso de Ariana Cabrera, una joven paciente con insuficiencia renal crónica desde los 6 años. Después de haber padecido el Covid-19 la función de su riñón emporó y la llevo a tener que tratarse con Hemodiálisis.
La mayoría espera un trasplante: “Es importante cómo está preparado el paciente internamente para que pueda acceder al trasplante”, aclara Whon: “La espera es muy larga. En ese trascurrir se mesclan muchas emociones: frustraciones y éxito, todo junto en la misma persona”.