Beijing, una declaración clave cumplida a medias

La columna de la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina.

11 OCT 2021 - 20:25 | Actualizado

Por Patricia Reyes * /Especial para Jornada

En 2021 se cumplieron 26 años de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing que se redactó en 1995.

Este programa sobre derechos de las mujeres y las niñas tiene como objetivo alcanzar un derecho humano que es fundamental: la igualdad de género, siendo además una de las metas incluidas por la ONU en la Agenda 2030.

Este plan se conoce como el más progresista de la historia sobre los derechos de las mujeres, que surgió en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en septiembre de 1995.

Más de 17.000 participantes se reunían en la capital de China, Beijing (también conocida como Pekín) con un objetivo común: lograr el empoderamiento y la igualdad de género de todas las mujeres, en todo el mundo.

La redacción de este documento se logró gracias a la presión de más de 30.000 activistas, que llevaron a los 189 gobiernos presentes alcanzar un compromiso histórico: la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing.

Para ello, dividieron sus compromisos en varios ámbitos concretos como la violencia, la educación o la salud. En total, definieron 12 esferas de preocupación sobre las que centrar sus esfuerzos. A 26 años de esta Plataforma estos compromisos siguen siendo hoy más necesarios que nunca. Las mejoras en cuanto a la protección y promoción de los derechos de la mujer han avanzado pero los países que la formaron no han aún logrado la igualdad de género. Por ello es bueno recordarles a los actores mundiales la importancia de comprometerse con los derechos de todas las mujeres y niñas tal como lo asentaron en aquel documento histórico.

Podemos decir que Argentina se encuentra comprometida expresamente con esta Plataforma y así lo muestran en declaraciones, leyes, creación de organismo, y el habitual uso de frases y palabras que apuntan hacia el reconocimiento de los derechos de las mujeres, hablando así de una igualdad formal pero en la práctica estamos lejos de una igualdad real. A mi juicio existe un exceso de palabras y discurso y una falta concreta de acciones en pos de la igualdad de derechos entre mujeres y varones.

Hace años escuchamos a dirigentes políticos hablar de promover la agenda de género desde un enfoque multisectorial, transversal y federal, con el fin de lograr el empoderamiento integral de las mujeres, especialmente aquellas que enfrentan situaciones de violencia y que sufren discriminaciones, generando una afectación desproporcionada a sus derechos y una relación inequitativa respecto a los varones en la sociedad.

El Estado Argentino en todos los ámbitos jurisdiccionales habla de promover políticas públicas en pos del cumplimiento de las obligaciones asumidas mediante la adhesión a la normativa internacional en materia de promoción y protección de los derechos humanos al máximo nivel en el ordenamiento jurídico nacional. Sin embargo, a diario observamos innumerables situaciones que dejan al descubierto la desigualdad real de oportunidades en el acceso y goce de derechos a las mujeres.

En este ámbito y en un tema muy actual en nuestra provincia se enmarca la lucha por la paridad judicial, es decir el acceso a los puestos de decisión del Poder Judicial en Chubut como ocurre en el resto de nuestro país. Claramente estamos muy lejos de cumplir con la Igualdad de la Agenda 2030. En nuestra provincia desde el Poder Ejecutivo se está violentando toda la normativa en derecho de las mujeres al resistirse a proponer mujeres para la integración del STJ.

Se evidencia desde la clase política una resistencia al avance de los derechos de las mujeres en acciones concretas por parte de los actores de los poderes públicos, sin una explicación plausible de porque no se hacen eco del reclamo social en favor de la igualdad de derechos y la paridad en el acceso a los puestos de decisión. Los integrantes de la función legislativa por no promover la modificación de la Ley V-152 estableciendo la obligación de la integración respetando la paridad, y el representante del Ejecutivo al no proponer pliegos de mujeres del derecho de nuestra provincia para integrar el máximo órgano de la función judicial.

Parafraseando a Diana Maffia diré que el feminismo no tiene que ver con las hormonas tiene que ver con una convicción política y ética de cómo construir igualdad democrática en la sociedad.#

*?Jueza Penal de Puerto Madryn

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11 OCT 2021 - 20:25

Por Patricia Reyes * /Especial para Jornada

En 2021 se cumplieron 26 años de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing que se redactó en 1995.

Este programa sobre derechos de las mujeres y las niñas tiene como objetivo alcanzar un derecho humano que es fundamental: la igualdad de género, siendo además una de las metas incluidas por la ONU en la Agenda 2030.

Este plan se conoce como el más progresista de la historia sobre los derechos de las mujeres, que surgió en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en septiembre de 1995.

Más de 17.000 participantes se reunían en la capital de China, Beijing (también conocida como Pekín) con un objetivo común: lograr el empoderamiento y la igualdad de género de todas las mujeres, en todo el mundo.

La redacción de este documento se logró gracias a la presión de más de 30.000 activistas, que llevaron a los 189 gobiernos presentes alcanzar un compromiso histórico: la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing.

Para ello, dividieron sus compromisos en varios ámbitos concretos como la violencia, la educación o la salud. En total, definieron 12 esferas de preocupación sobre las que centrar sus esfuerzos. A 26 años de esta Plataforma estos compromisos siguen siendo hoy más necesarios que nunca. Las mejoras en cuanto a la protección y promoción de los derechos de la mujer han avanzado pero los países que la formaron no han aún logrado la igualdad de género. Por ello es bueno recordarles a los actores mundiales la importancia de comprometerse con los derechos de todas las mujeres y niñas tal como lo asentaron en aquel documento histórico.

Podemos decir que Argentina se encuentra comprometida expresamente con esta Plataforma y así lo muestran en declaraciones, leyes, creación de organismo, y el habitual uso de frases y palabras que apuntan hacia el reconocimiento de los derechos de las mujeres, hablando así de una igualdad formal pero en la práctica estamos lejos de una igualdad real. A mi juicio existe un exceso de palabras y discurso y una falta concreta de acciones en pos de la igualdad de derechos entre mujeres y varones.

Hace años escuchamos a dirigentes políticos hablar de promover la agenda de género desde un enfoque multisectorial, transversal y federal, con el fin de lograr el empoderamiento integral de las mujeres, especialmente aquellas que enfrentan situaciones de violencia y que sufren discriminaciones, generando una afectación desproporcionada a sus derechos y una relación inequitativa respecto a los varones en la sociedad.

El Estado Argentino en todos los ámbitos jurisdiccionales habla de promover políticas públicas en pos del cumplimiento de las obligaciones asumidas mediante la adhesión a la normativa internacional en materia de promoción y protección de los derechos humanos al máximo nivel en el ordenamiento jurídico nacional. Sin embargo, a diario observamos innumerables situaciones que dejan al descubierto la desigualdad real de oportunidades en el acceso y goce de derechos a las mujeres.

En este ámbito y en un tema muy actual en nuestra provincia se enmarca la lucha por la paridad judicial, es decir el acceso a los puestos de decisión del Poder Judicial en Chubut como ocurre en el resto de nuestro país. Claramente estamos muy lejos de cumplir con la Igualdad de la Agenda 2030. En nuestra provincia desde el Poder Ejecutivo se está violentando toda la normativa en derecho de las mujeres al resistirse a proponer mujeres para la integración del STJ.

Se evidencia desde la clase política una resistencia al avance de los derechos de las mujeres en acciones concretas por parte de los actores de los poderes públicos, sin una explicación plausible de porque no se hacen eco del reclamo social en favor de la igualdad de derechos y la paridad en el acceso a los puestos de decisión. Los integrantes de la función legislativa por no promover la modificación de la Ley V-152 estableciendo la obligación de la integración respetando la paridad, y el representante del Ejecutivo al no proponer pliegos de mujeres del derecho de nuestra provincia para integrar el máximo órgano de la función judicial.

Parafraseando a Diana Maffia diré que el feminismo no tiene que ver con las hormonas tiene que ver con una convicción política y ética de cómo construir igualdad democrática en la sociedad.#

*?Jueza Penal de Puerto Madryn


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