El incidente ocurrió alrededor de las 22 del viernes en un domicilio sobre calle Nicaragua al 500, a donde llegó en primera instancia el servicio de emergencias provincial (SAME), que constató la muerte del niño y alertó a la comisaría seccional 30.
De acuerdo al relato de los familiares de la víctima, los efectivos establecieron que el perro ingresó a la vivienda desde el patio del fondo y comenzó a morder al niño cuando la madre se había ausentado de la vivienda.
El ataque le causó "graves heridas en la cabeza y otras partes del cuerpo”, según detallaron a Télam las fuentes consultadas.
Dos hermanitos del niño, mellizos de 10 años, intentaron defenderlo arrojándole agua al perro, con lo que lograron que vuelva al fondo de la casa, y de inmediato salieron a pedir ayuda a vecinos, quienes fueron los que llamaron al servicio de emergencias.
Ante el fatal desenlace, al lugar arribó luego la fiscalía de turno y personal de criminalista para realizar las tareas de rigor, mientras personal del SAME avanzó en brindar contención a los hermanos del menor y a la madre.
En tanto, personal de Canes de la Policía local, con autorización fiscal, trasladó al perro a un centro de zoonosis del Municipio local, donde encontraron que el animal estaba “alterado y agresivo”.
Alrededor de la medianoche, personal de Bomberos trasladó el cuerpo del niño a la morgue judicial por disposición fiscal.
Finalmente desde el Departamento Contravencional local se dispuso iniciar tareas informativas por ocurrir el hecho dentro de una vivienda y ser el animal propiedad de familia.
El incidente ocurrió alrededor de las 22 del viernes en un domicilio sobre calle Nicaragua al 500, a donde llegó en primera instancia el servicio de emergencias provincial (SAME), que constató la muerte del niño y alertó a la comisaría seccional 30.
De acuerdo al relato de los familiares de la víctima, los efectivos establecieron que el perro ingresó a la vivienda desde el patio del fondo y comenzó a morder al niño cuando la madre se había ausentado de la vivienda.
El ataque le causó "graves heridas en la cabeza y otras partes del cuerpo”, según detallaron a Télam las fuentes consultadas.
Dos hermanitos del niño, mellizos de 10 años, intentaron defenderlo arrojándole agua al perro, con lo que lograron que vuelva al fondo de la casa, y de inmediato salieron a pedir ayuda a vecinos, quienes fueron los que llamaron al servicio de emergencias.
Ante el fatal desenlace, al lugar arribó luego la fiscalía de turno y personal de criminalista para realizar las tareas de rigor, mientras personal del SAME avanzó en brindar contención a los hermanos del menor y a la madre.
En tanto, personal de Canes de la Policía local, con autorización fiscal, trasladó al perro a un centro de zoonosis del Municipio local, donde encontraron que el animal estaba “alterado y agresivo”.
Alrededor de la medianoche, personal de Bomberos trasladó el cuerpo del niño a la morgue judicial por disposición fiscal.
Finalmente desde el Departamento Contravencional local se dispuso iniciar tareas informativas por ocurrir el hecho dentro de una vivienda y ser el animal propiedad de familia.