Los investigadores buscarán reconstruir lo ocurrido en el interior de la base conjunta antártica en la noche del Día de la Madre, cuando según los informes preliminares, un suboficial del Ejército atacó a mazazos al suboficial mayor de la Fuerza Aérea Gustavo Echenique, mientras dormía, y le produjo heridas cortantes en la cabeza, por las que recibió varios puntos de sutura.
Echenique fue “atendido en forma inmediata por el servicio de sanidad de la base” y se determinó que su vida no corría peligro aunque “como medida preventiva se procedió a replegarlo al Continente para su monitoreo y seguimiento en su evolución sanitaria”, informó en ese momento el Comando Conjunto Antártico (Cocoantar) a través de sus redes sociales.
Además, el organismo precisó que el presunto agresor también fue trasladado y “se iniciaron las actuaciones de justicia militar correspondientes a fin de esclarecer los hechos”.
En la faz penal, luego de que Echenique decidiera “instar la acción” (lo que era necesario porque el delito de lesiones es de acción privada) la causa fue derivada a la Fiscalía de la capital de Tierra del Fuego, a cargo del fiscal Juan Soria.
Los voceros consultados explicaron que Soria ya dispuso el envío de un grupo de gendarmes a la Antártida, quienes se encargarán de recolectar testimonios y otro tipo de pruebas, como croquis de los ambientes en que ocurrieron los hechos.
La versión preliminar de lo sucedido, confeccionada por militares y enviada por escrito al juzgado, señala que un grupo de la dotación de la Base Marambio se reunió el domingo 16 en el quincho de las instalaciones, a compartir una comida, y que una vez finalizado el encuentro, Echenique les ordenó a los demás “bajar la música” y “limpiar todo” antes de acostarse.
Al parecer esa orden fue incumplida y “volvieron a subir la música”, por lo que el encargado le comunicó la situación al jefe de la base y le dijo que había sido desobedecido.
Con posterioridad a ese desacuerdo es que tuvo lugar el incidente cuando el agresor entró a la habitación donde dormía Echenique y lo golpeó con una maza hasta que fue reducido por otros militares.
“No consta en las actuaciones algún tema derivado de las diferencias salariales entre miembros de las distintas fuerzas armadas. De hecho el cobro del plus antártico por parte de efectivos del Ejército y la Armada ya estaba solucionado antes del episodio”, reseñaron las fuentes judiciales consultadas.
Los investigadores también intentarán determinar la cantidad de alcohol ingerida durante la comida, teniendo en cuenta que el reglamento de la base permite consumir “una lata de cerveza por persona los sábados, cuando se come pizza, y un vaso de vino los domingos cuando se come asado”.
Una de las claves de la investigación también pasará por catalogar el tipo de lesiones sufridas por Echenique, que serán leves o graves de acuerdo a la cantidad de tiempo que demande su curación definitiva, agregaron los voceros.
El Cocoantar confirmó también el inicio de las “actuaciones de justicia militar”, y enfatizó que lo ocurrido “no constituye un hecho reiterativo en las Bases Antárticas Conjuntas” sino que, por el contrario, es un episodio “aislado y sin precedentes que no representa los valores y principios institucionales y a aún más los hábitos y costumbres en la convivencia en la Antártida”.
Los investigadores buscarán reconstruir lo ocurrido en el interior de la base conjunta antártica en la noche del Día de la Madre, cuando según los informes preliminares, un suboficial del Ejército atacó a mazazos al suboficial mayor de la Fuerza Aérea Gustavo Echenique, mientras dormía, y le produjo heridas cortantes en la cabeza, por las que recibió varios puntos de sutura.
Echenique fue “atendido en forma inmediata por el servicio de sanidad de la base” y se determinó que su vida no corría peligro aunque “como medida preventiva se procedió a replegarlo al Continente para su monitoreo y seguimiento en su evolución sanitaria”, informó en ese momento el Comando Conjunto Antártico (Cocoantar) a través de sus redes sociales.
Además, el organismo precisó que el presunto agresor también fue trasladado y “se iniciaron las actuaciones de justicia militar correspondientes a fin de esclarecer los hechos”.
En la faz penal, luego de que Echenique decidiera “instar la acción” (lo que era necesario porque el delito de lesiones es de acción privada) la causa fue derivada a la Fiscalía de la capital de Tierra del Fuego, a cargo del fiscal Juan Soria.
Los voceros consultados explicaron que Soria ya dispuso el envío de un grupo de gendarmes a la Antártida, quienes se encargarán de recolectar testimonios y otro tipo de pruebas, como croquis de los ambientes en que ocurrieron los hechos.
La versión preliminar de lo sucedido, confeccionada por militares y enviada por escrito al juzgado, señala que un grupo de la dotación de la Base Marambio se reunió el domingo 16 en el quincho de las instalaciones, a compartir una comida, y que una vez finalizado el encuentro, Echenique les ordenó a los demás “bajar la música” y “limpiar todo” antes de acostarse.
Al parecer esa orden fue incumplida y “volvieron a subir la música”, por lo que el encargado le comunicó la situación al jefe de la base y le dijo que había sido desobedecido.
Con posterioridad a ese desacuerdo es que tuvo lugar el incidente cuando el agresor entró a la habitación donde dormía Echenique y lo golpeó con una maza hasta que fue reducido por otros militares.
“No consta en las actuaciones algún tema derivado de las diferencias salariales entre miembros de las distintas fuerzas armadas. De hecho el cobro del plus antártico por parte de efectivos del Ejército y la Armada ya estaba solucionado antes del episodio”, reseñaron las fuentes judiciales consultadas.
Los investigadores también intentarán determinar la cantidad de alcohol ingerida durante la comida, teniendo en cuenta que el reglamento de la base permite consumir “una lata de cerveza por persona los sábados, cuando se come pizza, y un vaso de vino los domingos cuando se come asado”.
Una de las claves de la investigación también pasará por catalogar el tipo de lesiones sufridas por Echenique, que serán leves o graves de acuerdo a la cantidad de tiempo que demande su curación definitiva, agregaron los voceros.
El Cocoantar confirmó también el inicio de las “actuaciones de justicia militar”, y enfatizó que lo ocurrido “no constituye un hecho reiterativo en las Bases Antárticas Conjuntas” sino que, por el contrario, es un episodio “aislado y sin precedentes que no representa los valores y principios institucionales y a aún más los hábitos y costumbres en la convivencia en la Antártida”.