Es de Bélgica y recorre el mundo sola en su velero

Eugenia Nottebohm inició su viaje hace cuatro años, luego de atravesar un cáncer de mama, y de separarse de su pareja en el proceso. Acá te contamos su historia (VIDEO).

14 FEB 2023 - 18:45 | Actualizado 14 FEB 2023 - 19:43

Este martes dialogó con Cadena Tiempo, Eugenia Nottebohm, una mujer oriunda de Bélgica que hace cuatro años y medio viaja por el mundo sola en su velero. Ahora está en Camarones. Durante su relato, contó que se separó de su pareja mientras luchaba contra el cáncer de mama, y denomina este proyecto como “un encuentro consigo misma”.

“Yo salí de Bélgica hace cuatro años y medio, y en realidad empecé este viaje porque tuve un cáncer de mama, y después decidí comprarme un barco porque sentí que tenía que cambiar un poco de rumbo. Al inicio la idea era viajar con tripulantes, pero como no estuvieron llegando, empecé a navegar sola”, comenzó.

Al comienzo, navegaba cerca de su casa, “y poco a poco fui tomando confianza. Salí en el 2018 con la meta de ir a visitar a unos amigos en Los Azores que me habían ayudado mucho cuando tuve cáncer. Como me fue bien, fui siguiendo el viaje. Me quise venir hasta aquí-el sur- porque en Buenos Aires tengo familia que quería venir y tenía este sueño loco de conocer la Patagonia”, contó.

“Cuando emprendí el viaje navegaba hace ya ocho o nueve años, lo hacía con mi novio de la época. Pero cuando tuve el cáncer nos separamos y me quedé sola. Al inicio dije que no lo iba a hacer, pero cuando fui a visitar a mi amiga de Los Azores que también navega me preguntó por qué no me compraba un barco. Me pareció una idea loca, pero dije ¿por qué no? Y así me di cuenta que conocía más de lo que pensaba, navegar sola me ayuda a pasar muchas barreras que me había puesto”, confesó.

El significado detrás del desafío y creer en sí misma

“Cuando uno pasa por una enfermedad que te amenaza la vida, pierde el rumbo. Esa metáfora me ayudó mucho: tomar el barco en mano era como tomar mi vida en mano, y tomar un rumbo con mi barco era como tomar rumbo en mi vida”.

Pese a que el cáncer lo padeció hace muchos años atrás, explicó que “todavía sigo en tratamiento, me faltan tres o cuatro años, pero por ahora me ha ido bien por suerte”, luego agregó: “Pensé que no lo iba a lograr porque el mar argentino, y más en la Patagonia, es un desafío. Pero con ayuda de mucha gente que me apoyó y me dio consejos, sobrepase ese miedo”.

Te compartimos el informe completo en el siguiente video.

14 FEB 2023 - 18:45

Este martes dialogó con Cadena Tiempo, Eugenia Nottebohm, una mujer oriunda de Bélgica que hace cuatro años y medio viaja por el mundo sola en su velero. Ahora está en Camarones. Durante su relato, contó que se separó de su pareja mientras luchaba contra el cáncer de mama, y denomina este proyecto como “un encuentro consigo misma”.

“Yo salí de Bélgica hace cuatro años y medio, y en realidad empecé este viaje porque tuve un cáncer de mama, y después decidí comprarme un barco porque sentí que tenía que cambiar un poco de rumbo. Al inicio la idea era viajar con tripulantes, pero como no estuvieron llegando, empecé a navegar sola”, comenzó.

Al comienzo, navegaba cerca de su casa, “y poco a poco fui tomando confianza. Salí en el 2018 con la meta de ir a visitar a unos amigos en Los Azores que me habían ayudado mucho cuando tuve cáncer. Como me fue bien, fui siguiendo el viaje. Me quise venir hasta aquí-el sur- porque en Buenos Aires tengo familia que quería venir y tenía este sueño loco de conocer la Patagonia”, contó.

“Cuando emprendí el viaje navegaba hace ya ocho o nueve años, lo hacía con mi novio de la época. Pero cuando tuve el cáncer nos separamos y me quedé sola. Al inicio dije que no lo iba a hacer, pero cuando fui a visitar a mi amiga de Los Azores que también navega me preguntó por qué no me compraba un barco. Me pareció una idea loca, pero dije ¿por qué no? Y así me di cuenta que conocía más de lo que pensaba, navegar sola me ayuda a pasar muchas barreras que me había puesto”, confesó.

El significado detrás del desafío y creer en sí misma

“Cuando uno pasa por una enfermedad que te amenaza la vida, pierde el rumbo. Esa metáfora me ayudó mucho: tomar el barco en mano era como tomar mi vida en mano, y tomar un rumbo con mi barco era como tomar rumbo en mi vida”.

Pese a que el cáncer lo padeció hace muchos años atrás, explicó que “todavía sigo en tratamiento, me faltan tres o cuatro años, pero por ahora me ha ido bien por suerte”, luego agregó: “Pensé que no lo iba a lograr porque el mar argentino, y más en la Patagonia, es un desafío. Pero con ayuda de mucha gente que me apoyó y me dio consejos, sobrepase ese miedo”.

Te compartimos el informe completo en el siguiente video.