El hecho fue descubierto por los vecinos de la zona del Acceso Sur quienes expresaron su enojo y tristeza al ver la imagen vandalizada de la virgen que estaba cerca de la entrada al centro sanjuanino.
Por el momento, no se pudo identificar a los responsables del hecho quienes dejaron restos de la cabeza destrozada allí,.
mientras que, afortunadamente, hubo daños en la parte de la escultura que quedó en pie.
Tras este ataque, la Iglesia Católica de San Juan emitió un comunicado en el que repudia el ataque y pide a la comunidad orar para "mantener la paz y el respeto en nuestra ciudad".
La cabeza de la imagen fue dañada en un acto de intolerancia y falta de respeto hacia la fe y la devoción de muchos".
Asimismo, añadió: "La plazoleta es un lugar de encuentro y la imagen de la Virgen es un símbolo de devoción y consuelo, y su daño ha causado un profundo dolor y tristeza entre todos los fieles".
Por último, la comunidad católica y los vecinos de la zona condenan enérgicamente este acto de vandalismo y piden que se tomen medidas para garantizar la seguridad y el respeto hacia los lugares de culto y símbolos religiosos.
El hecho fue descubierto por los vecinos de la zona del Acceso Sur quienes expresaron su enojo y tristeza al ver la imagen vandalizada de la virgen que estaba cerca de la entrada al centro sanjuanino.
Por el momento, no se pudo identificar a los responsables del hecho quienes dejaron restos de la cabeza destrozada allí,.
mientras que, afortunadamente, hubo daños en la parte de la escultura que quedó en pie.
Tras este ataque, la Iglesia Católica de San Juan emitió un comunicado en el que repudia el ataque y pide a la comunidad orar para "mantener la paz y el respeto en nuestra ciudad".
La cabeza de la imagen fue dañada en un acto de intolerancia y falta de respeto hacia la fe y la devoción de muchos".
Asimismo, añadió: "La plazoleta es un lugar de encuentro y la imagen de la Virgen es un símbolo de devoción y consuelo, y su daño ha causado un profundo dolor y tristeza entre todos los fieles".
Por último, la comunidad católica y los vecinos de la zona condenan enérgicamente este acto de vandalismo y piden que se tomen medidas para garantizar la seguridad y el respeto hacia los lugares de culto y símbolos religiosos.