El intendente de Gualjaina, Marcelo Limarieri, en su actividad privada se dedica a la producción de forraje en un campo de Paso del Sapo que arrienda. Se dio que una persona de una propiedad lindera, acordó llevar a un sector de la explotación sus animales, y a la vez haría recorridas dado que también había hacienda del dueño de la estancia.
En mayo de este año, se detectó un faltante de alrededor de 800 ovejas, que causó el enojo del propietario. Entonces, Marcelo Limarieri pidió a quien a la postre sería su denunciante, que retirara sus animales y dejara el campo. Sólo tenía que cruzar el alambrado, ya que es vecino.
El jefe comunal remarcó que sólo había un acuerdo de palabra, y “esa persona no tenía ninguna relación laboral conmigo”. No obstante presentó una denuncia en la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores Delegación Esquel, esgrimiendo haber sido víctima de trata. Tal situación promovió una inspección en el campo por parte de UATRE, y la Dirección de Lucha contra la Trata y el Tráfico de Personas del Ministerio de Desarrollo Humano de la Provincia.
Limarieri contó que con el denunciante sólo tenía la relación de ser vecinos en el arriendo del campo, y de ninguna manera dependía de él en lo laboral. Además dijo que el mencionado disponía de llaves y código de Wi-Fi para las comunicaciones.
La denuncia se sustanció en el Juzgado Federal de Esquel, donde el denunciado debió declarar, y semanas atrás dictó el sobreseimiento, dejando sentado que las actuaciones no afectan el buen nombre y honor del denunciado. De inmediato, Marcelo Limarieri inició acciones legales en la Fiscalía de Esquel contra la UATRE, por considerar que su procedimiento fue infundado y sin argumentos válidos.
Muy molesto el actual intendente de Gualjaina estimó que “al denunciante le dieron letra abogados con alguna influencia para perjudicarme, y la UATRE tuvo que ver en esto. Así como la Justicia Federal actuó y dictó mi sobreseimiento, exijo que la Justicia provincial lleve un proceso justo”.
El intendente de Gualjaina, Marcelo Limarieri, en su actividad privada se dedica a la producción de forraje en un campo de Paso del Sapo que arrienda. Se dio que una persona de una propiedad lindera, acordó llevar a un sector de la explotación sus animales, y a la vez haría recorridas dado que también había hacienda del dueño de la estancia.
En mayo de este año, se detectó un faltante de alrededor de 800 ovejas, que causó el enojo del propietario. Entonces, Marcelo Limarieri pidió a quien a la postre sería su denunciante, que retirara sus animales y dejara el campo. Sólo tenía que cruzar el alambrado, ya que es vecino.
El jefe comunal remarcó que sólo había un acuerdo de palabra, y “esa persona no tenía ninguna relación laboral conmigo”. No obstante presentó una denuncia en la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores Delegación Esquel, esgrimiendo haber sido víctima de trata. Tal situación promovió una inspección en el campo por parte de UATRE, y la Dirección de Lucha contra la Trata y el Tráfico de Personas del Ministerio de Desarrollo Humano de la Provincia.
Limarieri contó que con el denunciante sólo tenía la relación de ser vecinos en el arriendo del campo, y de ninguna manera dependía de él en lo laboral. Además dijo que el mencionado disponía de llaves y código de Wi-Fi para las comunicaciones.
La denuncia se sustanció en el Juzgado Federal de Esquel, donde el denunciado debió declarar, y semanas atrás dictó el sobreseimiento, dejando sentado que las actuaciones no afectan el buen nombre y honor del denunciado. De inmediato, Marcelo Limarieri inició acciones legales en la Fiscalía de Esquel contra la UATRE, por considerar que su procedimiento fue infundado y sin argumentos válidos.
Muy molesto el actual intendente de Gualjaina estimó que “al denunciante le dieron letra abogados con alguna influencia para perjudicarme, y la UATRE tuvo que ver en esto. Así como la Justicia Federal actuó y dictó mi sobreseimiento, exijo que la Justicia provincial lleve un proceso justo”.