Un temblor que llamó a atender la actividad sísmica en la Patagonia

El lunes 12 de mayo de 2025, a unos 40 Km de Río Turbio, se registró un sismo de magnitud 5.1 en la escala Richter. César Navarrete, doctor en Geología, docente de la UNPSJB, señala la necesidad de reforzar la red de monitoreo.

10 JUN 2025 - 19:57 | Actualizado 10 JUN 2025 - 22:08

César Navarrete, doctor en Geología, docente y director del Laboratorio Patagónico de Petrotectónica de la Facultad de Naturales y Ciencias de la Salud, sede Comodoro Rivadavia de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (UNPSJB), señala la necesidad de reforzar la red de monitoreo para construir un mapa de riesgo sísmico en Chubut y Santa Cruz.

Un sismo de magnitud 5.1 en la escala Richter, se registró el lunes 12 de mayo, a unos 40 Km de Río Turbio, al suroeste de la provincia de Santa Cruz, reavivó el interés sobre la actividad sísmica en la Patagonia austral.
El epicentro se originó a unos 10 Km de profundidad, y aunque tuvo intensidad moderada, al ser de carácter superficial, se sintió con fuerza en localidades cercanas.

“La ubicación exacta del epicentro de éste sismo ocurrió a unos 28 Km al noreste de 28 de Noviembre y más o menos a 40 kilómetros al noreste también de Río Turbio, en una zona que viene teniendo actividad sísmica de manera bastante recurrente durante los últimos cien años”, explicó el profesional.

El sismo, dejó en evidencia una realidad geológica que, aunque suele pasar desapercibida, es parte del subsuelo patagónico. Hace unos años, más precisamente en 2021, se registró un sismo de magnitud 5.4 en El Calafate, con epicentro a 4 km al suroeste de la ciudad.

Estos eventos ocurren porque toda esa zona desde El Calafate hacia el sur y la región de Puerto Natales (Chile), -según el investigador- tiene una actividad telúrica intensa. Por lo tanto, “no es un fenómeno aislado ni anormal; de hecho, forma parte de un patrón de actividad vinculado a una serie de fallas geológicas activas, que tienen rumbo norte-sur, medianamente en paralelo a la Cordillera de los Andes”, indicó Navarrete.

La interacción entre placas tectónicas hace que esas fallas geológicas se activen y provoquen desplazamientos. “Estos desplazamientos generan vibraciones que son los que nosotros conocemos como sismos, o, terremotos, en los casos más graves”.

10 JUN 2025 - 19:57

César Navarrete, doctor en Geología, docente y director del Laboratorio Patagónico de Petrotectónica de la Facultad de Naturales y Ciencias de la Salud, sede Comodoro Rivadavia de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (UNPSJB), señala la necesidad de reforzar la red de monitoreo para construir un mapa de riesgo sísmico en Chubut y Santa Cruz.

Un sismo de magnitud 5.1 en la escala Richter, se registró el lunes 12 de mayo, a unos 40 Km de Río Turbio, al suroeste de la provincia de Santa Cruz, reavivó el interés sobre la actividad sísmica en la Patagonia austral.
El epicentro se originó a unos 10 Km de profundidad, y aunque tuvo intensidad moderada, al ser de carácter superficial, se sintió con fuerza en localidades cercanas.

“La ubicación exacta del epicentro de éste sismo ocurrió a unos 28 Km al noreste de 28 de Noviembre y más o menos a 40 kilómetros al noreste también de Río Turbio, en una zona que viene teniendo actividad sísmica de manera bastante recurrente durante los últimos cien años”, explicó el profesional.

El sismo, dejó en evidencia una realidad geológica que, aunque suele pasar desapercibida, es parte del subsuelo patagónico. Hace unos años, más precisamente en 2021, se registró un sismo de magnitud 5.4 en El Calafate, con epicentro a 4 km al suroeste de la ciudad.

Estos eventos ocurren porque toda esa zona desde El Calafate hacia el sur y la región de Puerto Natales (Chile), -según el investigador- tiene una actividad telúrica intensa. Por lo tanto, “no es un fenómeno aislado ni anormal; de hecho, forma parte de un patrón de actividad vinculado a una serie de fallas geológicas activas, que tienen rumbo norte-sur, medianamente en paralelo a la Cordillera de los Andes”, indicó Navarrete.

La interacción entre placas tectónicas hace que esas fallas geológicas se activen y provoquen desplazamientos. “Estos desplazamientos generan vibraciones que son los que nosotros conocemos como sismos, o, terremotos, en los casos más graves”.