“Para ser docente, hay que sentirlo”

Silvana Mesina, docente de Educación Especial y Primaria manifestó que siempre fue “una bendecida” ya que nunca dejó de trabajar en lo que había elegido como futuro de su vida, desde la parte profesional.

11 SEP 2025 - 11:19 | Actualizado 11 SEP 2025 - 11:22

En el marco del Día del Maestro, una docente de Educación Especial y Primaria compartió sus vivencias y reflexiones sobre lo que significa la vocación y el valor del vínculo con los estudiantes ya que, para ejercer esta profesión, “hay que sentirlo”.

En diálogo con la Agencia Noticias Argentinas, Silvana Mesina, docente de Educación Especial y Primaria manifestó que siempre fue “una bendecida” ya que nunca dejó de trabajar en lo que había elegido como futuro de su vida, desde la parte profesional.

En sus últimos años de su carrera, se dedicó a conducir en una Escuela de Educación Especial y, aunque se haya jubilado hace poco, extraña mucho “el estar dentro de una escuela”.

Al ser consultada sobre el sentido de la celebración, Mesina expresó: “Desde mi experiencia, es un momento de festejo, de alegría, de unión, de camaradería, de mirarse a los ojos y, a pesar de muchas situaciones que a veces en la docencia se nos presenta, mirarnos y saber que lo que elegimos es lo que realmente deseamos hacer y lo hacemos con todo el corazón”.

Además, agregó: “Es un momento donde desde el lado del docente siempre somos agasajadas y reconocidas en las escuelas y por el lado de la conducción está este entramado de agradecimiento hacia todo ese equipo de docentes que hacen el trabajo diario con tanto esfuerzo, en particular en las escuelas estatales, donde ponen el hombro, el corazón, su todo, cada día y en cada momento”.

En su repaso de años de trabajo, recordó el rol de sus alumnos: “Los principales aprendizajes que me dejaron mis alumnos es que me dejaron todo. Cuando empiezo a recordar todos los años de docencia, cuesta mucho no emocionarse. Muchos años donde uno empieza a tener como una película de todas las situaciones y de cada una de esas caritas, tanto chiquitos, chiquitas como niños o niñas adolescentes y también adultos que fueron pasando por mi vida. Todo lo que soy me lo dejaron ellos”.

Por otro lado, la ex directora también transmitió un mensaje a los maestros que recién se inician: “Para ser docente hay que sentirlo y este es el mensaje que yo les dejaría: nunca dejen de sentir eso que llevó a cada uno y a cada una a elegir esta vocación, nunca dejen que esa llama se apague y que esa fuerza que tienen en el alma en el momento que pisaron la primera aula, en el momento que miraron al primer niño o a la primera niña o al primer adolescente o al primer adulto —porque somos educadores de adultos también—, que esa energía no se evapore nunca”.

Desde la parte del rol docente, la profesora mencionó: “Nunca dejen de mirar a cada uno y a cada una desde su individualidad. En cada uno de sus años en la docencia siempre sientan ese amor, esa pasión, y esa es la palabra: que nunca pierdan la pasión por lo que ustedes eligieron”.
Finalmente, la docente jubilada destacó la importancia del vínculo con los alumnos: “Todos los días es el Día del Maestro y de la Maestra, es el Día del Docente, porque todos los días en el momento que pasamos la puerta a una escuela, en el momento que nos ponemos el delantal, en el momento que estamos frente a un grupo que es nuestra responsabilidad en el sentido de lo más puro, del vínculo”.

“En cada chico o en cada chica con una dificultad, detrás de esa dificultad, detrás de esa situación de conducta, detrás de cada cuestión que se les presenta, hay un motivo. Nunca dejen de interiorizarse de cuál es ese motivo y por qué ese chico o esa chica se presenta y se muestra de esa forma. Con la contención, con el amor, con el afecto, con darle la palabra, con escucharlos, eso para ellos es súper valioso y ahí se crea ese vínculo que no se olvida en años y años de docencia”, finalizó la ex directora Mesina.

11 SEP 2025 - 11:19

En el marco del Día del Maestro, una docente de Educación Especial y Primaria compartió sus vivencias y reflexiones sobre lo que significa la vocación y el valor del vínculo con los estudiantes ya que, para ejercer esta profesión, “hay que sentirlo”.

En diálogo con la Agencia Noticias Argentinas, Silvana Mesina, docente de Educación Especial y Primaria manifestó que siempre fue “una bendecida” ya que nunca dejó de trabajar en lo que había elegido como futuro de su vida, desde la parte profesional.

En sus últimos años de su carrera, se dedicó a conducir en una Escuela de Educación Especial y, aunque se haya jubilado hace poco, extraña mucho “el estar dentro de una escuela”.

Al ser consultada sobre el sentido de la celebración, Mesina expresó: “Desde mi experiencia, es un momento de festejo, de alegría, de unión, de camaradería, de mirarse a los ojos y, a pesar de muchas situaciones que a veces en la docencia se nos presenta, mirarnos y saber que lo que elegimos es lo que realmente deseamos hacer y lo hacemos con todo el corazón”.

Además, agregó: “Es un momento donde desde el lado del docente siempre somos agasajadas y reconocidas en las escuelas y por el lado de la conducción está este entramado de agradecimiento hacia todo ese equipo de docentes que hacen el trabajo diario con tanto esfuerzo, en particular en las escuelas estatales, donde ponen el hombro, el corazón, su todo, cada día y en cada momento”.

En su repaso de años de trabajo, recordó el rol de sus alumnos: “Los principales aprendizajes que me dejaron mis alumnos es que me dejaron todo. Cuando empiezo a recordar todos los años de docencia, cuesta mucho no emocionarse. Muchos años donde uno empieza a tener como una película de todas las situaciones y de cada una de esas caritas, tanto chiquitos, chiquitas como niños o niñas adolescentes y también adultos que fueron pasando por mi vida. Todo lo que soy me lo dejaron ellos”.

Por otro lado, la ex directora también transmitió un mensaje a los maestros que recién se inician: “Para ser docente hay que sentirlo y este es el mensaje que yo les dejaría: nunca dejen de sentir eso que llevó a cada uno y a cada una a elegir esta vocación, nunca dejen que esa llama se apague y que esa fuerza que tienen en el alma en el momento que pisaron la primera aula, en el momento que miraron al primer niño o a la primera niña o al primer adolescente o al primer adulto —porque somos educadores de adultos también—, que esa energía no se evapore nunca”.

Desde la parte del rol docente, la profesora mencionó: “Nunca dejen de mirar a cada uno y a cada una desde su individualidad. En cada uno de sus años en la docencia siempre sientan ese amor, esa pasión, y esa es la palabra: que nunca pierdan la pasión por lo que ustedes eligieron”.
Finalmente, la docente jubilada destacó la importancia del vínculo con los alumnos: “Todos los días es el Día del Maestro y de la Maestra, es el Día del Docente, porque todos los días en el momento que pasamos la puerta a una escuela, en el momento que nos ponemos el delantal, en el momento que estamos frente a un grupo que es nuestra responsabilidad en el sentido de lo más puro, del vínculo”.

“En cada chico o en cada chica con una dificultad, detrás de esa dificultad, detrás de esa situación de conducta, detrás de cada cuestión que se les presenta, hay un motivo. Nunca dejen de interiorizarse de cuál es ese motivo y por qué ese chico o esa chica se presenta y se muestra de esa forma. Con la contención, con el amor, con el afecto, con darle la palabra, con escucharlos, eso para ellos es súper valioso y ahí se crea ese vínculo que no se olvida en años y años de docencia”, finalizó la ex directora Mesina.