Por Rolando Tobarez / Redacción Jornada
Tres presos de la Unidad 6 de Rawson fueron condenados por intentar matar a puñaladas a otro interno. Ocurrió el 7 de marzo de este año en el Sector “D¨ del Pabellón Nº 14.
Tras un acuerdo de la defensa con la Fiscalía, el Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia sentenció a Brian Daniel Corrales Colman a 5 años y 6 meses de prisión efectiva. Lo declararon reincidente: tiene una pena anterior de 5 años y está proceso por un homicidio agravado.
Como cómplice, Joaquín Miguel Almirón fue sentenciado a 4 años y 6 meses y también declarado reincidente: tiene una condena anterior a 8 años de prisión.
Y Víctor Antonio Barrios Sosa fue sentenciado a 15 años, 2 meses y 6 días de cárcel efectiva también como cómplice de la agresión. En su caso, además de ser declarado reincidente, su pena fue unificada con otros delitos: tiene una condena de 14 años por homicidio y robo.
Según se probó, Corrales Colman y Almirón forzaron el ingreso a la celda Nº 3, donde Matías Sánchez se hallaba alojado bajo resguardo diferencial. Arrancaron un trozo del marco de una ventaba para romper el candado y se abalanzaron sobre Sánchez, que intentó escapar arrastrándose hacia la reja de acceso al pabellón.
Igual lo interceptaron y comenzaron a pegarle trompadas y patadas. Con facas lo hirieron en tórax, cuello y abdomen, mientras otro interno no identificado lo sujetaba en el suelo. “Las agresiones fueron reiteradas, ejecutadas con violencia inequívoca y dirigidas a lugares letales, sin que la víctima tuviera posibilidad alguna de defensa”, dice el fallo.
Este último tramo de la secuencia ocurrió a la vista del personal penitenciario, detrás de la reja interna de seguridad, que trataban de disuadir las agresiones mientras aguardaban a más personal para neutralizar la situación.
Barrios Sosa golpeó fuerte a Sánchez en la cabeza con una pata plástica desprendida de una mesa del área común, lo que ocasionó una lesión traumática y facilitó que el ataque continuara.
Cuando la víctima logró llegar hasta la reja del pabellón, los imputados continuaron la agresión pese a que un celador les pedía parar la golpiza. Tras varios segundos de violencia sostenida y creyendo que Sánchez estaba muerto, los atacantes se replegaron al fondo del pabellón.
La víctima salvó su vida gracias a su traslado urgente al Hospital Zonal “Santa Teresito”. Ingresó en estado crítico y permaneció internado en Terapia Intensiva: uno de los facazos había perforado su tórax.
Tras recuperarse, prefirió no participar del proceso contra sus agresores.

Por Rolando Tobarez / Redacción Jornada
Tres presos de la Unidad 6 de Rawson fueron condenados por intentar matar a puñaladas a otro interno. Ocurrió el 7 de marzo de este año en el Sector “D¨ del Pabellón Nº 14.
Tras un acuerdo de la defensa con la Fiscalía, el Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia sentenció a Brian Daniel Corrales Colman a 5 años y 6 meses de prisión efectiva. Lo declararon reincidente: tiene una pena anterior de 5 años y está proceso por un homicidio agravado.
Como cómplice, Joaquín Miguel Almirón fue sentenciado a 4 años y 6 meses y también declarado reincidente: tiene una condena anterior a 8 años de prisión.
Y Víctor Antonio Barrios Sosa fue sentenciado a 15 años, 2 meses y 6 días de cárcel efectiva también como cómplice de la agresión. En su caso, además de ser declarado reincidente, su pena fue unificada con otros delitos: tiene una condena de 14 años por homicidio y robo.
Según se probó, Corrales Colman y Almirón forzaron el ingreso a la celda Nº 3, donde Matías Sánchez se hallaba alojado bajo resguardo diferencial. Arrancaron un trozo del marco de una ventaba para romper el candado y se abalanzaron sobre Sánchez, que intentó escapar arrastrándose hacia la reja de acceso al pabellón.
Igual lo interceptaron y comenzaron a pegarle trompadas y patadas. Con facas lo hirieron en tórax, cuello y abdomen, mientras otro interno no identificado lo sujetaba en el suelo. “Las agresiones fueron reiteradas, ejecutadas con violencia inequívoca y dirigidas a lugares letales, sin que la víctima tuviera posibilidad alguna de defensa”, dice el fallo.
Este último tramo de la secuencia ocurrió a la vista del personal penitenciario, detrás de la reja interna de seguridad, que trataban de disuadir las agresiones mientras aguardaban a más personal para neutralizar la situación.
Barrios Sosa golpeó fuerte a Sánchez en la cabeza con una pata plástica desprendida de una mesa del área común, lo que ocasionó una lesión traumática y facilitó que el ataque continuara.
Cuando la víctima logró llegar hasta la reja del pabellón, los imputados continuaron la agresión pese a que un celador les pedía parar la golpiza. Tras varios segundos de violencia sostenida y creyendo que Sánchez estaba muerto, los atacantes se replegaron al fondo del pabellón.
La víctima salvó su vida gracias a su traslado urgente al Hospital Zonal “Santa Teresito”. Ingresó en estado crítico y permaneció internado en Terapia Intensiva: uno de los facazos había perforado su tórax.
Tras recuperarse, prefirió no participar del proceso contra sus agresores.