Fausto tiene 9 años. Llevaba una vida normal, iba a la escuela y practicaba atletismo. Hace seis meses se le presentaron erupciones en la piel y los síntomas fueron aumentando.
Tras algunos estudios se le diagnosticó una enfermedad reumatoidea llamada “dermatomiodosis juvenil”.
Fausto inició un tratamiento en el Hospital Garrahan y al menos por un año deberá viajar mensualmente para realizarse las aplicaciones. Carla, su mamá, nos recibió en su casa para contarnos su lucha y las ganas de mejorar su calidad de vida.
Fausto tiene 9 años. Llevaba una vida normal, iba a la escuela y practicaba atletismo. Hace seis meses se le presentaron erupciones en la piel y los síntomas fueron aumentando.
Tras algunos estudios se le diagnosticó una enfermedad reumatoidea llamada “dermatomiodosis juvenil”.
Fausto inició un tratamiento en el Hospital Garrahan y al menos por un año deberá viajar mensualmente para realizarse las aplicaciones. Carla, su mamá, nos recibió en su casa para contarnos su lucha y las ganas de mejorar su calidad de vida.