El jefe de la Unidad Regional de Policía de Comodoro Rivadavia, comisario mayor Lucas Cocha, brindó un diagnóstico sobre la situación actual de seguridad en la ciudad y las estrategias frente a los delitos más comunes. Destacó el uso de estadísticas para planificar operativos, la necesidad de contar con mayor infraestructura y recursos humanos como también la importancia del vínculo con la comunidad, clave para poder intervenir en el territorio.
“El delito del hurto o contra la propiedadrepresenta el hecho más reiterado y más común en la ciudad y con los cuales estamos tratando de luchar con más frecuencia”, explicó. Un focoreciente esel robo de neumáticos en la zona norte, particularmente en Kilómetro 3, donde las estadísticas indicaban franjas horarias y zonas críticas. “Aplicamos mecanismos de prevención y creo que hemos bajado esa línea delictiva”.
Cocha remarcó que gran parte del trabajo policial se sustenta en la información estadística que se elabora desde Rawson y se actualiza semanalmente con base en las denuncias realizadas y las intervenciones registradas. “Trabajamos con la estadística y, para que la estadística sea certera e ideal, es necesario tener una denuncia. En barrios donde la gente no denuncia, no estamos advertidos de los pormenores”, señaló.
La conducción de la UR impulsa reuniones frecuentes con uniones vecinales y jefes de comisarías, con el objetivo de incentivar la formalización de las denuncias y detectar zonas con necesidades urgentes de presencia policial.
Setrabajajunto con la Municipalidad para avanzar en la cesión de terrenos donde se proyecta construir nuevas comisarías. “Este año se pretende la inauguración de la comisaría de Kilómetro 8, que le falta muy poco. También está la propuesta de avanzar con una en las fracciones 14 y 15, donde el lugar ya está acordado. Lo mismo sucede en zona norte, con la comisaría octava”, detalló. En cuanto al aspecto humano, el comisario reconoció que al aspecto vocacional se le suma aunque no se trate de un “trabajo común”, la oportunidad laboral.
“He sido docente en la Escuela de Policía, y es un porcentaje muy chico el de quienes ingresan a la fuerza porque les gusta ser policía. La gran mayoría lo hace por necesidad laboral”, reconoció. A su juicio, eso no invalida el compromiso que puede desarrollarse con la formación adecuada. “Está en nosotros formarlos y adoctrinarlos para que entiendan cuál es la responsabilidad. Ser policía no es un trabajo tan fácil. Nos debemos a la sociedad y tenemos que trabajar al cien por ciento para lograr que el vecino se sienta seguro”.
“Necesitamos –dijo Cocha- que el policía esté atento las 24horas en cuanto a lo que sucede en su entorno. Su atención debe que estar íntegramente puesta en lo que ocurre en el sector”, expresó, en relación a los debates públicos sobre el uso del celular durante el servicio.
Por otro lado, reconoció la preocupación ciudadana sobre la reincidencia de algunos delincuentes. “La gente busca es que la persona que cae detenida, quede efectivamente detenida. Este fin de semana, por ejemplo, detuvimos a una persona al mediodía por intentar sustraer elementos de un vehículo; recuperó la libertad y a la tarde fue detenida nuevamente por robar en un comercio de zona centro”.
Además del hurto y robo de neumáticos, los delitos más frecuentes en Comodoro incluyen robos domiciliarios, hurtos en locales comerciales y sustracción de pertenencias de vehículos, todos relacionados a delitos contra la propiedad. “Son los hechos que más se repiten en distintas zonas, y trabajamos para ajustar los operativos en función de las estadísticas”, resaltó.
“También tenemos jurisdicción sobre Sarmiento, Río Mayo, Río Senguer, Lago Blanco y Camarones. En invierno, las rutas nos demandan mucho pero la impronta de trabajar en contacto con la comunidad ha dado resultado, y eso es lo que queremos extender a cada comisaría de la región”.
El jefe de la Unidad Regional de Policía de Comodoro Rivadavia, comisario mayor Lucas Cocha, brindó un diagnóstico sobre la situación actual de seguridad en la ciudad y las estrategias frente a los delitos más comunes. Destacó el uso de estadísticas para planificar operativos, la necesidad de contar con mayor infraestructura y recursos humanos como también la importancia del vínculo con la comunidad, clave para poder intervenir en el territorio.
“El delito del hurto o contra la propiedadrepresenta el hecho más reiterado y más común en la ciudad y con los cuales estamos tratando de luchar con más frecuencia”, explicó. Un focoreciente esel robo de neumáticos en la zona norte, particularmente en Kilómetro 3, donde las estadísticas indicaban franjas horarias y zonas críticas. “Aplicamos mecanismos de prevención y creo que hemos bajado esa línea delictiva”.
Cocha remarcó que gran parte del trabajo policial se sustenta en la información estadística que se elabora desde Rawson y se actualiza semanalmente con base en las denuncias realizadas y las intervenciones registradas. “Trabajamos con la estadística y, para que la estadística sea certera e ideal, es necesario tener una denuncia. En barrios donde la gente no denuncia, no estamos advertidos de los pormenores”, señaló.
La conducción de la UR impulsa reuniones frecuentes con uniones vecinales y jefes de comisarías, con el objetivo de incentivar la formalización de las denuncias y detectar zonas con necesidades urgentes de presencia policial.
Setrabajajunto con la Municipalidad para avanzar en la cesión de terrenos donde se proyecta construir nuevas comisarías. “Este año se pretende la inauguración de la comisaría de Kilómetro 8, que le falta muy poco. También está la propuesta de avanzar con una en las fracciones 14 y 15, donde el lugar ya está acordado. Lo mismo sucede en zona norte, con la comisaría octava”, detalló. En cuanto al aspecto humano, el comisario reconoció que al aspecto vocacional se le suma aunque no se trate de un “trabajo común”, la oportunidad laboral.
“He sido docente en la Escuela de Policía, y es un porcentaje muy chico el de quienes ingresan a la fuerza porque les gusta ser policía. La gran mayoría lo hace por necesidad laboral”, reconoció. A su juicio, eso no invalida el compromiso que puede desarrollarse con la formación adecuada. “Está en nosotros formarlos y adoctrinarlos para que entiendan cuál es la responsabilidad. Ser policía no es un trabajo tan fácil. Nos debemos a la sociedad y tenemos que trabajar al cien por ciento para lograr que el vecino se sienta seguro”.
“Necesitamos –dijo Cocha- que el policía esté atento las 24horas en cuanto a lo que sucede en su entorno. Su atención debe que estar íntegramente puesta en lo que ocurre en el sector”, expresó, en relación a los debates públicos sobre el uso del celular durante el servicio.
Por otro lado, reconoció la preocupación ciudadana sobre la reincidencia de algunos delincuentes. “La gente busca es que la persona que cae detenida, quede efectivamente detenida. Este fin de semana, por ejemplo, detuvimos a una persona al mediodía por intentar sustraer elementos de un vehículo; recuperó la libertad y a la tarde fue detenida nuevamente por robar en un comercio de zona centro”.
Además del hurto y robo de neumáticos, los delitos más frecuentes en Comodoro incluyen robos domiciliarios, hurtos en locales comerciales y sustracción de pertenencias de vehículos, todos relacionados a delitos contra la propiedad. “Son los hechos que más se repiten en distintas zonas, y trabajamos para ajustar los operativos en función de las estadísticas”, resaltó.
“También tenemos jurisdicción sobre Sarmiento, Río Mayo, Río Senguer, Lago Blanco y Camarones. En invierno, las rutas nos demandan mucho pero la impronta de trabajar en contacto con la comunidad ha dado resultado, y eso es lo que queremos extender a cada comisaría de la región”.