Por Ismael Tebes / Redacción Jornada
El hallazgo científico más importante de las últimas décadas en el Golfo San Jorge - la llegada masiva de la ballena SEI, la tercera más grande del mundo - quedó plasmado en un nuevo documental producido por National Geographic Pristine Seas. La pieza recorre el proceso que permitió registrar por primera vez en la historia el comportamiento de esta especie en peligro de extinción y expone el enorme potencial turístico y científico de la costa de Comodoro y Rada Tilly. La obra está dirigida por Juan María Raggio y Mariano Fernández, con la producción ejecutiva de Enric Sala y Scott Ressler.
“En una salida de una hora o una hora y media, debemos haber visto cuarenta, cuarenta y pico de ballenas. Fue increíble, porque es la tercera más grande del mundo y no se sabía nada de ella”, explicó Juan María “Jhony” Raggio, uno de los directores del trabajo que dura treinta minutos y que será expuesto en Rada Tilly; el Teatro Español de Comodoro Rivadavia y el Centro Cultural de la Ciencia (CoNiCET) en Buenos Aires.
“Hasta ahora, la ballena Sei era casi un misterio. De ésta ballena no se sabía nada. Está en peligro de extinción. Se las solía cruzar en el océano pero no se sabía dónde iban o qué hacían”, agregó.
Resaltó el avance científico logrado y la investigación local a cargo de Mariano Coscarella como la colocación de dispositivos GPS (“tags”) a través de los cuales se descubrió que la Ballena SEI llega al Golfo San Jorge en grandes concentraciones.
“Se descubrió que empiezan a arribar en marzo. Se quedan cuatro, cinco, o seis meses ahí, alimentándose. Son más de dos mil o dos mil quinientas ballenas. Eso es asombroso”, dijo a Jornada el director de “SEI, la ballena desconocida”.
El documental busca transmitir justamente ese impacto y propone “asombro” desde la magnificencia que representa una especie que parece haber llegado para quedarse. “Creo que la gente va a sentir asombro. Van a ver algo súper lindo en imágenes y van a conocer una historia que está a metros de sus casas. Es algo de ustedes, está ahí, y eso es lo que tienen que valorar”, dijo el realizador.
La ballena SEI es considerada una de las “gigantes” del planeta como también una de las especies más enigmáticas. Clasificada en peligro crítico de extinción, ha permanecido en las sombras de la biología marina. Poco se sabe sobre sus rutas migratorias, sus hábitos alimenticios o su estructura social. Históricamente escurridizas y difíciles de observar, estas ballenas rara vez aparecen cerca de las costas. Por eso, la repentina llegada de miles de individuos a un mismo punto del Atlántico Sur desató una ola de preguntas sin precedentes.
La campaña de filmación duró 25 días y se montó con base en Rada Tilly. Participaron entre 15 y 20 especialistas, tres lanchas, drones, cámaras submarinas y científicos. El objetivo era doble: registrar material inédito y comenzar a capacitar a equipos locales en avistamiento responsable.
“Nunca se había filmado esta ballena bajo el agua. Logramos las primeras filmaciones de esta especie en toda la historia”, destacó. También se documentó por primera vez su forma de alimentación en la zona. “Las ballenas comiendo bogavante con imágenes únicas, muy lindas”. describió.
El trabajo integró el aporte de los guardaparques de Punta Marqués, reconocidos por su manejo de drones y tras la campaña, el equipo dedicó un año entero a procesar imágenes, el sonido y la edición. “Con el rigor científico y la calidad de National Geographic, todo tarda más. No es un documental que se saca rápido, lleva un proceso largo de aprobación”, remarcó.
El mensaje detrás del proyecto es claro: ayudar a que la región revalorice el tesoro que posee. “Tienen un potencial único. La ballena SEI es el llamador principal, pero alrededor hay delfín nariz de botella, delfín oscuro, tonina overa, ballena franca, jorobada, orcas, elefantes marinos y un mundo enorme para que Comodoro mire al mar”, subrayó.
“Comodoro siempre miró a la tierra y al petróleo. Hoy, con la situación actual, es una gran oportunidad para que encuentre posibilidades de ser un polo turístico. Basta ver el ejemplo de Península Valdés, donde el turismo es un bastión fundamental después de 30 años” dijo Raggio quien remarcó el potencial turístico regional como la capacidad de que esta industria genere fuentes de empleo alternativas.
Por Ismael Tebes / Redacción Jornada
El hallazgo científico más importante de las últimas décadas en el Golfo San Jorge - la llegada masiva de la ballena SEI, la tercera más grande del mundo - quedó plasmado en un nuevo documental producido por National Geographic Pristine Seas. La pieza recorre el proceso que permitió registrar por primera vez en la historia el comportamiento de esta especie en peligro de extinción y expone el enorme potencial turístico y científico de la costa de Comodoro y Rada Tilly. La obra está dirigida por Juan María Raggio y Mariano Fernández, con la producción ejecutiva de Enric Sala y Scott Ressler.
“En una salida de una hora o una hora y media, debemos haber visto cuarenta, cuarenta y pico de ballenas. Fue increíble, porque es la tercera más grande del mundo y no se sabía nada de ella”, explicó Juan María “Jhony” Raggio, uno de los directores del trabajo que dura treinta minutos y que será expuesto en Rada Tilly; el Teatro Español de Comodoro Rivadavia y el Centro Cultural de la Ciencia (CoNiCET) en Buenos Aires.
“Hasta ahora, la ballena Sei era casi un misterio. De ésta ballena no se sabía nada. Está en peligro de extinción. Se las solía cruzar en el océano pero no se sabía dónde iban o qué hacían”, agregó.
Resaltó el avance científico logrado y la investigación local a cargo de Mariano Coscarella como la colocación de dispositivos GPS (“tags”) a través de los cuales se descubrió que la Ballena SEI llega al Golfo San Jorge en grandes concentraciones.
“Se descubrió que empiezan a arribar en marzo. Se quedan cuatro, cinco, o seis meses ahí, alimentándose. Son más de dos mil o dos mil quinientas ballenas. Eso es asombroso”, dijo a Jornada el director de “SEI, la ballena desconocida”.
El documental busca transmitir justamente ese impacto y propone “asombro” desde la magnificencia que representa una especie que parece haber llegado para quedarse. “Creo que la gente va a sentir asombro. Van a ver algo súper lindo en imágenes y van a conocer una historia que está a metros de sus casas. Es algo de ustedes, está ahí, y eso es lo que tienen que valorar”, dijo el realizador.
La ballena SEI es considerada una de las “gigantes” del planeta como también una de las especies más enigmáticas. Clasificada en peligro crítico de extinción, ha permanecido en las sombras de la biología marina. Poco se sabe sobre sus rutas migratorias, sus hábitos alimenticios o su estructura social. Históricamente escurridizas y difíciles de observar, estas ballenas rara vez aparecen cerca de las costas. Por eso, la repentina llegada de miles de individuos a un mismo punto del Atlántico Sur desató una ola de preguntas sin precedentes.
La campaña de filmación duró 25 días y se montó con base en Rada Tilly. Participaron entre 15 y 20 especialistas, tres lanchas, drones, cámaras submarinas y científicos. El objetivo era doble: registrar material inédito y comenzar a capacitar a equipos locales en avistamiento responsable.
“Nunca se había filmado esta ballena bajo el agua. Logramos las primeras filmaciones de esta especie en toda la historia”, destacó. También se documentó por primera vez su forma de alimentación en la zona. “Las ballenas comiendo bogavante con imágenes únicas, muy lindas”. describió.
El trabajo integró el aporte de los guardaparques de Punta Marqués, reconocidos por su manejo de drones y tras la campaña, el equipo dedicó un año entero a procesar imágenes, el sonido y la edición. “Con el rigor científico y la calidad de National Geographic, todo tarda más. No es un documental que se saca rápido, lleva un proceso largo de aprobación”, remarcó.
El mensaje detrás del proyecto es claro: ayudar a que la región revalorice el tesoro que posee. “Tienen un potencial único. La ballena SEI es el llamador principal, pero alrededor hay delfín nariz de botella, delfín oscuro, tonina overa, ballena franca, jorobada, orcas, elefantes marinos y un mundo enorme para que Comodoro mire al mar”, subrayó.
“Comodoro siempre miró a la tierra y al petróleo. Hoy, con la situación actual, es una gran oportunidad para que encuentre posibilidades de ser un polo turístico. Basta ver el ejemplo de Península Valdés, donde el turismo es un bastión fundamental después de 30 años” dijo Raggio quien remarcó el potencial turístico regional como la capacidad de que esta industria genere fuentes de empleo alternativas.