Punta Delgada: el futuro de una reserva limitada al turismo local

Durante más de 30 años funcionó una concesión privada y el acceso a la reserva estaba habilitado solo a quienes se hospedaban en el lugar. El gobierno provincial gestiona el acceso a la reserva, pero hay organismos nacionales que quieren darle otro destino.

28 ENE 2020 - 20:54 | Actualizado

Desde mediados de la década de 1980 y por más de 30 años, Punta Delgada fue un centro de recepción de turismo nacional e internacional, sostenida por un emprendimiento privado que brindaba allí alojamiento, gastronomía y experiencia turística a los visitantes, pero vedado al resto de los turistas que llegaban año tras año a Península Valdés.

Dentro de la superficie de Península Valdés y sus más de 110 km de costas a mar abierto y otros 150 km de costas a los Golfos Nuevo y San José, existen seis reservas naturales, entre las que se encuentra Punta Delgada, un área natural surgida en el año 1974.

Ubicado en el sudeste de Península Valdés, y dentro de un predio que supera las 500 hectáreas se destaca principalmente por su faro centenario –en pleno funcionamiento y renovado hace pocas semanas- como así también por tener en sus costas uno de los apostaderos más importantes de la región en cuanto elefantes marinos.

Tras la salida de la empresa que operaba y administraba el hotel y restaurante por más de tres décadas, en los últimos meses el gobierno provincial inició gestiones y ya existe un preacuerdo entre la Agencia de Bienes del Estado y la provincia de Chubut, para que por un periodo inicial sea la provincia quien retome la guarda de la reserva.

Días atrás, el propio Ministro de Turismo de Chubut, Néstor “Quique” García dijo a Cadena Tiempo que “la Administración de Bienes del Estado (ABE) ya nos dio la autorización; eso ahora nosotros lo giramos a la Armada y falta la resolución final de la Armada”.

“Yo hablé con el gobernador del tema y posiblemente vayamos a entrevistarnos con el Ministro de Defensa para apurar el trámite, y tenerlo rápidamente” expresó el funcionario provincial.

El titular de la cartera turística provincial aseguró que están “ansiosos por hacernos de esa área, aprovecharlo turísticamente; es un área emblemática, pero la urgencia nuestra no se traslada por ahí a los papeles de la Armada”.

Según García, se harían cargo “del total de las instalaciones, ones nos haríamos cargo, de las 540 hectáreas que involucran a Punta Delgada. El hotel no lo licitaríamos en lo inmediato pero si permitir el ingreso como a cualquiera área unidad operativa, como Punta Norte o Caleta Valdés, para entrar y disfrutar este lugar que es bellísimo, único y que realmente hoy no lo tenemos dentro de nuestro circuito turístico”.

Sin embargo, fuentes ligadas a la Armadal, reconocieron que existe hace tiempo una idea de instalar en ese predio un Faro escuela, con el fin de trasladar desde provincia de Buenos Aires un centro de capacitación para el personal que trabaja en las tareas de mantenimiento y reparación de las señales marítimas.

Con todo, las próximas semanas podrían ser clave para definir el manejo futuro de una reserva ubicada dentro Área Natural Protegida Península Valdés y para ello se deberá establecer la potestad que tendrá cada uno de los organismos involucrados en el área sobre el manejo no solo del establecimiento rural sino principalmente de la reserva natural, como así también la asignación de recursos humanos y materiales para hacer frente a los proyectos a concretar en ese lugar.

28 ENE 2020 - 20:54

Desde mediados de la década de 1980 y por más de 30 años, Punta Delgada fue un centro de recepción de turismo nacional e internacional, sostenida por un emprendimiento privado que brindaba allí alojamiento, gastronomía y experiencia turística a los visitantes, pero vedado al resto de los turistas que llegaban año tras año a Península Valdés.

Dentro de la superficie de Península Valdés y sus más de 110 km de costas a mar abierto y otros 150 km de costas a los Golfos Nuevo y San José, existen seis reservas naturales, entre las que se encuentra Punta Delgada, un área natural surgida en el año 1974.

Ubicado en el sudeste de Península Valdés, y dentro de un predio que supera las 500 hectáreas se destaca principalmente por su faro centenario –en pleno funcionamiento y renovado hace pocas semanas- como así también por tener en sus costas uno de los apostaderos más importantes de la región en cuanto elefantes marinos.

Tras la salida de la empresa que operaba y administraba el hotel y restaurante por más de tres décadas, en los últimos meses el gobierno provincial inició gestiones y ya existe un preacuerdo entre la Agencia de Bienes del Estado y la provincia de Chubut, para que por un periodo inicial sea la provincia quien retome la guarda de la reserva.

Días atrás, el propio Ministro de Turismo de Chubut, Néstor “Quique” García dijo a Cadena Tiempo que “la Administración de Bienes del Estado (ABE) ya nos dio la autorización; eso ahora nosotros lo giramos a la Armada y falta la resolución final de la Armada”.

“Yo hablé con el gobernador del tema y posiblemente vayamos a entrevistarnos con el Ministro de Defensa para apurar el trámite, y tenerlo rápidamente” expresó el funcionario provincial.

El titular de la cartera turística provincial aseguró que están “ansiosos por hacernos de esa área, aprovecharlo turísticamente; es un área emblemática, pero la urgencia nuestra no se traslada por ahí a los papeles de la Armada”.

Según García, se harían cargo “del total de las instalaciones, ones nos haríamos cargo, de las 540 hectáreas que involucran a Punta Delgada. El hotel no lo licitaríamos en lo inmediato pero si permitir el ingreso como a cualquiera área unidad operativa, como Punta Norte o Caleta Valdés, para entrar y disfrutar este lugar que es bellísimo, único y que realmente hoy no lo tenemos dentro de nuestro circuito turístico”.

Sin embargo, fuentes ligadas a la Armadal, reconocieron que existe hace tiempo una idea de instalar en ese predio un Faro escuela, con el fin de trasladar desde provincia de Buenos Aires un centro de capacitación para el personal que trabaja en las tareas de mantenimiento y reparación de las señales marítimas.

Con todo, las próximas semanas podrían ser clave para definir el manejo futuro de una reserva ubicada dentro Área Natural Protegida Península Valdés y para ello se deberá establecer la potestad que tendrá cada uno de los organismos involucrados en el área sobre el manejo no solo del establecimiento rural sino principalmente de la reserva natural, como así también la asignación de recursos humanos y materiales para hacer frente a los proyectos a concretar en ese lugar.