Editorial / El show de las pelucas
Milei consiguió un triunfo clave en el Senado con el inestimable apoyo de muchos gobernadores, entre ellos Nacho Torres. Respaldaron, inclusive, el polémico Artículo 30 del Presupuesto, que despedaza la educación técnica, la ciencia y la tecnología.
Un Presupuesto a fuerza de chequera y reglamento torcido. Así podría describirse a la primera “ley de leyes” que logra sacar Javier Milei para encarar su tercer año de gestión.
Lejos de poder ser considerado un triunfo político genuino, como intentó instalar rápidamente el propio Presidente y sus principales funcionarios en la redes sociales el mismo sábado a la madrugada-con la siempre inestimable ayuda del aparato mediático que los apoya sin fisuras, inclusive recibiendo latigazos humillantes-, la sesión del Senado dejó al desnudo un método de construcción de poder basado en un clásico y rancio toma y daca. Una mezcla de discrecionalidad y rosca que contradice el discurso libertario de “transparencia”, mientras suenan risas de fondo. Más casta no se consigue.
Así y todo, el Presupuesto 2026 de Milei nace rengo luego de que la Cámara de Diputados le cercenara el ajuste brutal que se pretendía hacer al financiamiento universitario y a los fondos para atender a los discapacitados.
Tras dos años de administrar los recursos públicos sin Presupuesto, el oficialismo -y sobre todo “Toto” Caputo por la presión incesante del Fondo Monetario- necesitaba un marco para profundizar el recorte sobre áreas estratégicas como la educación, la ciencia y la tecnología.
No fue por convicción mayoritaria ni por un consenso programático, sino por la articulación de un sistema de premios y castigos que incluyó Aportes del Tesoro Nacional (ATN) a varias provincias, abstenciones funcionales y votos arrancados sobre el filo de la sesión.
Sobrados
Para aprobar el Presupuesto, el Gobierno nacional necesitaba 37 senadores (la mitad más uno), pero terminó consiguiendo 45 voluntades. Salió de shopping con una billetera gorda, al parecer. Y compró de más, por las dudas.
Se aprovechó, además, de la fractura del peronismo, en donde a algunos ya no les da ni un poco de vergüenza ponerse la peluca. Los gobernadores ¿peronistas? Osvaldo Jaldo (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca) y Gustavo Sáenz (Salta) son un claro ejemplo de ello. Con sólo mirar el cuadro de reparto de los ATN durante todo el año, pero en diciembre en particular, se explican muchos votos a favor del presupuesto.
La aprobación, además, estuvo atravesada por una maniobra reglamentaria deliberada, casi una jugada de VAR: el rechazo a la votación artículo por artículo para evitar que quedaran expuestos los núcleos más regresivos del texto.
La negativa a debatir en particular los artículos 12 y 30 no solo vulneró el reglamento del Senado, sino que evidenció el temor del oficialismo a poner en palabras lo que el Presupuesto realmente expresa: una decisión política de desfinanciar la educación pública y concentrar poder en el Ejecutivo.
Colorado el 32
En ese contexto, el gobernador de Chubut, Nacho Torres, jugó uno de los juegos que más le gusta. Se reunió con el ministro del Interior, Diego Santilli, en el mismo momento en que en el Senado se comenzaban a porotear los votos.
Chubut recibió unos $ 7.000 millones en ATN en lo que va del año, pero por ahora ni un centavo durante el último mes del año, cuando se negoció el apoyo al Presupuesto. Sin embargo, tiene otras cuestiones en puerta, como un reclamo por una deuda de Nación con la caja provincial de jubilaciones y el indispensable apoyo del Ministerio de Economía para colocar un bono en dólares en el mercado internacional que alivie la pesada mochila de vencimientos del BOCADE (el Bono Programa de Obra Pública y Cancelación de Deudas de Chubut emitido por Mario Das Neves en 2016 y refinanciado por Mariano Arcioni en 2020) y los cada vez más acuciantes gastos corrientes.
Pícaros como su jefe, los integrantes del equipo de comunicación de Santilli se encargaron de filtrar la foto de la reunión entre algunos medios amigos, dándole un sentido al encuentro con Torres y Paulino Caballero, el presidente del Banco Chubut, que el Gobierno de Chubut trató de aclarar en una gacetilla posterior, en la que el gobernador sólo hablaba -en tono desafiante- del reclamo que la Provincia le hará a la Nación ante la Corte Suprema por la deuda de más de 51.000 millones de pesos con la caja de jubilaciones provincial.
“A diferencia de otros gobernadores, no voy a desistir del reclamo judicial que corresponde para defender los intereses de nuestros jubilados”, dijo Torres a través de un comunicado oficial del Gobierno de Chubut.
Algunas horas después, las dos senadoras que le responden, la radical Edith Terenzi (que tiene su monobloque “Despierta Chubut”) y la macrista/libertaria Andrea Cristina (que integra el Frente PRO), sumaron su apoyo para que el Presupuesto de Milei consiguiera 45 votos en general y en cada uno de los capítulos que se votaron en particular. Inclusive, el cuestionado Capítulo II, que incluía el Artículo 30, que despedaza la educación, la educación técnica, la ciencia y la tecnología.
Qué votaron
Para que quede claro qué se votó el viernes por la noche, vale un escueto resumen:
- Los fondos para Educación y Cultura tendrán una caída real del 1% con respecto a 2025 pero de 47,7% si se los compara con 2023, el último año de la pobrísima gestión de Alberto Fernández.
- Aún con el rechazo de los diputados a derogar la Ley de financiamiento universitario (el Gobierno optó por no insistir en el Senado), se asignan $ 4.872 millones para las universidades nacionales, lo que equivale a una caída del 7,2% en relación a 2025 y de 34,3% respecto a 2023.
- Las partidas para jubilaciones se incrementan 6%, pero los fondos destinados al bono extraordinario para los jubilados de la mínima (congelado en $ 70.000 desde marzo de 2024) caerán 13,8% real durante todo el año próximo. En estas condiciones, la jubilación mínima caería en torno al 1% en 2026, con más de 3o% de inflación acumulada en 2025.
- También caerán 10,6% los fondos para pensiones por discapacidad, que incluye un recorte de 155 mil beneficiarios.
- Aumenta la Asignación Universal por Hijo (AUH), pero se reduce la ayuda alimentaria. Por ejemplo, la prestación Alimentar (un complemento de la AUH destinado a la compra de alimentos) tendrá en 2026 una caída del 15,2% con respecto a los gastos de 2025. En la misma línea, los fondos destinados a comedores comunitarios tendrán un recorte del 28,9%.
- En cuanto a los planes de empleo, se proyecta una caída real del 70,6% en los fondos destinados al programa Volver al Trabajo (destinado a capacitar a personas de hasta 49 años), lo que implicaría una reducción del 66% de los $ 78 mil que actualmente cobran unos 950 mil beneficiarios.
Todo esto también votaron Terenzi y Cristina, por si la desmemoria las afecta en algún momento a ellas o a sus aliados locales, que suelen hablar de educación pública, ciencia, tecnología y contención social con la nariz elevada, el dedo índice alzado y la gola insuflada de "republicanismo".
Las cosas por su nombre.
Un Presupuesto a fuerza de chequera y reglamento torcido. Así podría describirse a la primera “ley de leyes” que logra sacar Javier Milei para encarar su tercer año de gestión.
Lejos de poder ser considerado un triunfo político genuino, como intentó instalar rápidamente el propio Presidente y sus principales funcionarios en la redes sociales el mismo sábado a la madrugada-con la siempre inestimable ayuda del aparato mediático que los apoya sin fisuras, inclusive recibiendo latigazos humillantes-, la sesión del Senado dejó al desnudo un método de construcción de poder basado en un clásico y rancio toma y daca. Una mezcla de discrecionalidad y rosca que contradice el discurso libertario de “transparencia”, mientras suenan risas de fondo. Más casta no se consigue.
Así y todo, el Presupuesto 2026 de Milei nace rengo luego de que la Cámara de Diputados le cercenara el ajuste brutal que se pretendía hacer al financiamiento universitario y a los fondos para atender a los discapacitados.
Tras dos años de administrar los recursos públicos sin Presupuesto, el oficialismo -y sobre todo “Toto” Caputo por la presión incesante del Fondo Monetario- necesitaba un marco para profundizar el recorte sobre áreas estratégicas como la educación, la ciencia y la tecnología.
No fue por convicción mayoritaria ni por un consenso programático, sino por la articulación de un sistema de premios y castigos que incluyó Aportes del Tesoro Nacional (ATN) a varias provincias, abstenciones funcionales y votos arrancados sobre el filo de la sesión.
Sobrados
Para aprobar el Presupuesto, el Gobierno nacional necesitaba 37 senadores (la mitad más uno), pero terminó consiguiendo 45 voluntades. Salió de shopping con una billetera gorda, al parecer. Y compró de más, por las dudas.
Se aprovechó, además, de la fractura del peronismo, en donde a algunos ya no les da ni un poco de vergüenza ponerse la peluca. Los gobernadores ¿peronistas? Osvaldo Jaldo (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca) y Gustavo Sáenz (Salta) son un claro ejemplo de ello. Con sólo mirar el cuadro de reparto de los ATN durante todo el año, pero en diciembre en particular, se explican muchos votos a favor del presupuesto.
La aprobación, además, estuvo atravesada por una maniobra reglamentaria deliberada, casi una jugada de VAR: el rechazo a la votación artículo por artículo para evitar que quedaran expuestos los núcleos más regresivos del texto.
La negativa a debatir en particular los artículos 12 y 30 no solo vulneró el reglamento del Senado, sino que evidenció el temor del oficialismo a poner en palabras lo que el Presupuesto realmente expresa: una decisión política de desfinanciar la educación pública y concentrar poder en el Ejecutivo.
Colorado el 32
En ese contexto, el gobernador de Chubut, Nacho Torres, jugó uno de los juegos que más le gusta. Se reunió con el ministro del Interior, Diego Santilli, en el mismo momento en que en el Senado se comenzaban a porotear los votos.
Chubut recibió unos $ 7.000 millones en ATN en lo que va del año, pero por ahora ni un centavo durante el último mes del año, cuando se negoció el apoyo al Presupuesto. Sin embargo, tiene otras cuestiones en puerta, como un reclamo por una deuda de Nación con la caja provincial de jubilaciones y el indispensable apoyo del Ministerio de Economía para colocar un bono en dólares en el mercado internacional que alivie la pesada mochila de vencimientos del BOCADE (el Bono Programa de Obra Pública y Cancelación de Deudas de Chubut emitido por Mario Das Neves en 2016 y refinanciado por Mariano Arcioni en 2020) y los cada vez más acuciantes gastos corrientes.
Pícaros como su jefe, los integrantes del equipo de comunicación de Santilli se encargaron de filtrar la foto de la reunión entre algunos medios amigos, dándole un sentido al encuentro con Torres y Paulino Caballero, el presidente del Banco Chubut, que el Gobierno de Chubut trató de aclarar en una gacetilla posterior, en la que el gobernador sólo hablaba -en tono desafiante- del reclamo que la Provincia le hará a la Nación ante la Corte Suprema por la deuda de más de 51.000 millones de pesos con la caja de jubilaciones provincial.
“A diferencia de otros gobernadores, no voy a desistir del reclamo judicial que corresponde para defender los intereses de nuestros jubilados”, dijo Torres a través de un comunicado oficial del Gobierno de Chubut.
Algunas horas después, las dos senadoras que le responden, la radical Edith Terenzi (que tiene su monobloque “Despierta Chubut”) y la macrista/libertaria Andrea Cristina (que integra el Frente PRO), sumaron su apoyo para que el Presupuesto de Milei consiguiera 45 votos en general y en cada uno de los capítulos que se votaron en particular. Inclusive, el cuestionado Capítulo II, que incluía el Artículo 30, que despedaza la educación, la educación técnica, la ciencia y la tecnología.
Qué votaron
Para que quede claro qué se votó el viernes por la noche, vale un escueto resumen:
- Los fondos para Educación y Cultura tendrán una caída real del 1% con respecto a 2025 pero de 47,7% si se los compara con 2023, el último año de la pobrísima gestión de Alberto Fernández.
- Aún con el rechazo de los diputados a derogar la Ley de financiamiento universitario (el Gobierno optó por no insistir en el Senado), se asignan $ 4.872 millones para las universidades nacionales, lo que equivale a una caída del 7,2% en relación a 2025 y de 34,3% respecto a 2023.
- Las partidas para jubilaciones se incrementan 6%, pero los fondos destinados al bono extraordinario para los jubilados de la mínima (congelado en $ 70.000 desde marzo de 2024) caerán 13,8% real durante todo el año próximo. En estas condiciones, la jubilación mínima caería en torno al 1% en 2026, con más de 3o% de inflación acumulada en 2025.
- También caerán 10,6% los fondos para pensiones por discapacidad, que incluye un recorte de 155 mil beneficiarios.
- Aumenta la Asignación Universal por Hijo (AUH), pero se reduce la ayuda alimentaria. Por ejemplo, la prestación Alimentar (un complemento de la AUH destinado a la compra de alimentos) tendrá en 2026 una caída del 15,2% con respecto a los gastos de 2025. En la misma línea, los fondos destinados a comedores comunitarios tendrán un recorte del 28,9%.
- En cuanto a los planes de empleo, se proyecta una caída real del 70,6% en los fondos destinados al programa Volver al Trabajo (destinado a capacitar a personas de hasta 49 años), lo que implicaría una reducción del 66% de los $ 78 mil que actualmente cobran unos 950 mil beneficiarios.
Todo esto también votaron Terenzi y Cristina, por si la desmemoria las afecta en algún momento a ellas o a sus aliados locales, que suelen hablar de educación pública, ciencia, tecnología y contención social con la nariz elevada, el dedo índice alzado y la gola insuflada de "republicanismo".
Las cosas por su nombre.